Eres mi única necesidad ♥ / Devil May Cry

~Capítulo 57~

Llegamos después de unos quince minutos a la ciudad de Trinity, la cual hace mucho Trish nos mencionó que es donde se encontraba Mundus.
Es una ciudad algo grande, hay bastantes personas que no tienen ni idea que en una colina está el portal de roca enorme el cual permanece hasta el momento cerrado.
Nos paramos frente al portal hasta que detrás de nosotros se escuchan pasos. Trish nos mira a todos y camina con actitud segura, cuando llega mantiene cierta distancia.

—Hola.—Dice Dante.—¿Nos dirás dónde era?

—Pasó algo, la energía venía desde el otro lado de la ciudad pero era extraña, se esparcía y en el mismo instante se volvía más pequeña y venía aquí, es muy inestable y me confundió, ahora hace varios minutos que no he vuelto a sentirlo.—Suspira colocando sus manos en su cintura.

—¿Entonces que haremos?.—Dante mira al portal.—¿No hay alguna manera de entrar?

—Aun si lo hubiera no serviría de nada, podría abrirse en otro lado del Inframundo y quedarnos atrapados.—Responde Vergil.

—Para eso está Yamato ¿No?

—Yamato abre portales pero si alguien lo cierra por afuera es más complicado, puede hacerlo pero cuesta más trabajo y por supuesto más de mi energía, me debilitaría.

—Eso es un problema..¿Entonces? ¿Alguna idea?.—Dice Dante.

—Quizás debamos esperar a que vuelva a aparecer.—Propone Amy con voz calmada.

—Si, será lo mejor.—Respondo.

No dejaré que esta mujer se pase de lista, averiguaré que está tramando de una vez por todas y saldrá la verdad.

~•~

Pasamos toda la tarde esperando. Nada ocurría, ningúna presencia, sin embargo no le quité la mirada de encima a esa mujer en todo este tiempo, habla con Dante como si se conocieran de toda la vida pero es un error, a pesar de lucir como nuestra madre los demonios creados no poseen recuerdos, si mi teoría es cierta entonces Mundus la creo pero eso solo significa más problemas.

Me levanto y ya harto de no haber hecho nada suspiro.

—Dante, llévate a Amy de aquí, lo mejor será que vayan a descansar mientras yo hago guardia.—Digo mientras veo el sol llendo hacia el horizonte con ganas de ocultarse.

—¿Que?.—Amy se acerca a mi.—No quiero irme, no estoy cansada, además podría aparecer en cualquier momento y no puedes quedarte tú solo si eso pasa.

—Tienes menos resistencia que yo, sabes que no quería que vinieras en primer lugar.

—Lo sé, intentaré no causar problemas.

—Ese no es el punto..

Detrás de nosotros un ruido se escucha, el portal comienza a iluminarse mostrándonos del otro lado el mismo inframundo.

—¡Al fin!.—Dice Dante junto a nosotros.—¿Entramos?

Miro a Amy quien mira el portal algo nerviosa, sin embargo da un paso hacia adelante.
—Hay que hacerlo.

—Amy..—Susurro mientras camino hacia el portal.—Si ves que todo es peligroso corre hacia el portal y vete.

—Pero..

—Hazlo, estaremos bien, recuerda nuestro linaje.

Ella asiente e intenta sonreír.

Los cuatro entramos rápidamente al portal quedando ahora a nuestra espalda.
Todo es de color rojo, como siempre, demasiado lúgubre, el aire incluso es difícil de respirar.