My Name is Rose (Shadamy)

Capítulo XLII

-Narra Shadow-

Cada paso que di de camino a la casa de campo era un crujir diferente entre vértebras...no deseo quedar inválido. Pero para la información y todo lo que sé ahora, nada puede esperar.

—¡Esto se acabó, Finitevus! —Más de uno, sino es que todos están ahora azorados, incrédulos de mi revelación, pero que si esto ya no puede llegar más lejos.

Ese disfraz de él empieza a burbujear, muy sonriente y orgulloso la energía caos suya empieza a escurrir de su cuerpo como si de un brebaje espeso fuera; logrando dejar ver ahora su pelaje blanco y rayado, típico de equidna en él. Una curva maliciosa y ligeramente pacífica ensucia su cara; además, esas pequeñas gafas busca acomodarlas de forma lenta y correcta.

—Esperé tanto y tan poco he recibido, ¿Por qué has de detener lo que se volvió imparable hace unos días?

—Hablas como el típico canalla que se ahorra el jactarse sin control; sabías muy bien que todo esto podía ocurrir.

—Sí, mis posibilidades de que saliera bien eran de 4/10, ¿tener suerte? Es que no creí fueran tan poco observadores... —¡Agh! Estoy teniendo un enorme choque de emociones que me molestan, ¡Me estoy cabreando demasiado!—. ¡Estúpidamente ciegos!

Veo de reojo a Silver lograr "despertar" a los otros. No consigo saber en qué momento los ha intentando controlar con su magia/energía, pero lo que sí es bueno es que no fue un control total.

Eso explica por qué se ponían agresivos y con la intención de conseguir los objetivos del Silver copia.

•
♦
•
♦•♦
-

Flashback-

Esa extraña neblina rodeando la casa de campo no se queda ahí, ni mucho menos parece estar siendo desvanecida por la lluvia.

Todos duermen ya, pero...dicho aire está cargado de malicia.

Puede notarse hasta en las recamaras y habitaciones las mismas nubes amarillo/verdosas de fuera, surcando y teniendo un cometido con el Team Sonic...
-

Fin del Flashback-

♦•♦
•
♦
•

Me descuido; ver al equidna blanquisco maniobrar con las esmeraldas tan rápido me impide querer acercarme y arrebatárselas porque ahora tiene cinco levitando a su alrededor, ¿Qué planes tiene con ellas? Por mucho tiempo ha estado buscando la manera de dominar y controlar esa energía. ¿Acaso...ya sabe cómo hacerlo?

Los quejidos del resto me hacen empezar a tener credibilidad de que Silver ya lo ha conseguido, pero pelear con este sujeto en esta madrugada y, con poca visión y encima yo jodido...no creo que salga algo bien.

De milagro nos liberaremos de la muerte.

—¡Sueltalas o te vas a arrepentir!

—Me sorprendes, mujer; tras todo esto no has dejado de molestar pero, eso va a cambiar pronto. —La energía que golpea nuestros pelajes es de molestar hasta a nuestras almas. Amy no baja la retaguardia y tiene más ganas de sacar cizaña porque sé que al igual que todos, está perpleja y molesta.