Alguna vez... [Terminada]

15.

Alguna vez...

¿Pensaste que era una mala idea?

.

-esto es inaceptable Adrien, he soportado que me traicionaras una vez, sin embargo esto no puedo perdonártelo, estas desperdiciando cuatro años de tu vida por una tonta afición.

-¿Qué sucede padre? ¿No estás orgulloso de mí?

-no es eso Adrien...

-¿Qué es entonces? ¿Quieres seguir manipulándome? -cuestionó con cinismo.

-Adrien, tú te dejas manipular por cualquier persona que se ponga enfrente de ti.

-bien, si no quieres asistir, gracias por tu tiempo Gabriel -trato de tomar la invitación junto al boleto, recibiendo una negativa del mayor.

-Adrien... ¿En serio quieres esto?

-he perdido a Marinette y sin ella ¿De qué sirve que siga viviendo?

-eso le dije yo a ella -Adrien creyó que se refería a su madre, por fin existía algo en lo que se entendían -puedo ofrecerte mi puesto, pero no te vayas... Hijo... -dolía porque parecía que se forzada para pronunciarlo.

-padre, a ti te apasiona el mundo de la moda, simplemente esto no es lo mío, no sé siquiera combinar colores.

-podría enseñarte -esas palabras que espero escuchar durante su infancia y adolescencia, pero al parecer había necesitado ignorar sus reglas para que el se lo dijera, con tal de seguir reteniéndolo se esforzaba por decirlo.

-no, no es necesario.

-¿Eso significa que regresas?

-significa que no voy a volver a las 4 paredes de aquí -corrigió con cierta ilusión.

-¡estas tirando a la basura tu vida! -soltó golpeando su escritorio con sus manos.

-eso mismo me gritaste en el aniversario de mamá -pronunció -después insultaste a Marinette, tiraste sus diseños a la calle, estos se arruinaron y ella quedó destrozada -lo observó con un ligero retín -era su trabajo de 3 meses.

-no los necesitaba, poco después se suicido ¿No es así?

-no tienes derecho a decirlo... -apretó sus labios -ella lloro toda esa tarde, una parte de la tarde, yo trate de repararlo al día siguiente, tu me dijiste que ya no era tu hijo -escupió -y desde ese instante ya no eres mi padre -sus palabras lo habían dañado, pero se negaba a debilitarse frente a su hijo.

-¡estas arruinando todo por ella que te dejó!

-¡Tú arruinaste la vida de muchos con tus akumas! -el mayor entreabrió sus labios temeroso.

-ella dijo que jamás...

-así que es cierto -se cruzo de brazos -perdón padre, perdón por arruinar mi vida y no seguir tu camino asqueroso de arruinar a otros para conseguir lo que quiero.

-quería salvar a tu madre.

-¿Valía la pena?

-no recordaban nada, no le arruine la vida a nadie.

-que no lo veas no significa que no existe.

-eso dijiste tú el día que regresaste pidiendo que le devolviera el empleo a Marinette -relució -ella era más importante para ti y eso no debía ser.

-con mamá ¿No era lo más importante de tu vida?

-¡Ella no se quería suicidar! -bramo, las facciones del rubio se desencajaron mientras que el mayor palacio, Gabriel molesto solía hablar de más.