Escape: Brooke © PAUSADA

Capítulo 27

El silencio se hizo presente en esta enorme sala, todos teníamos la atención en Charlie, esperando a que él dijera algo, pero sabía que estaba releyendo una y otra vez lo que había en esa hoja, lo cual debe ser muy difícil de creer, si lo es para mí, no quiero imaginar cómo debe de sentirse él en este momento.

Finalmente, ya tenía información completa de esta mujer que se hace llamar Chelsey y hasta Camille, pero su nombre verdadero es Caitlin Hale, la misma mujer que vimos hace unos minutos en aquel bar, la muy descarada se comportó tan amable, ahora ya sé porque su expresión triste al ver a Charlie, ella no puede estar triste si fue ella quien abandonó a Charlie desde que nació, ahora que sé quién es, tengo unas increíbles ganas de acabar con ella.

—Entonces, ella de verdad era mi madre —dice Charlie en un susurro, aun con su mirada en el expedienté.

—Lo sé, es difícil de creer, lo muy descarada nos vio la cara de idiotas —respondo y le quito el archivo de la mano. No quiero que siga leyendo esto.

—Es una hija de perra, cuando me dijiste por teléfono que Caitlin estaba aquí, no pensé que fuera ella, no lo creía, es decir, la mujer que me dejó en la calle, la tenía justo frente a mis narices —dice Charlie en un tono de voz alto.

La verdad, es difícil saber cómo él se siente, porque no me ha tocado vivir algo como eso, realmente intento ponerme en sus zapatos y entenderlo.

—Y es tan cínica que me dijo que no me conocía, que tuvo un hijo y nunca supo de él, lo hace ver como si yo fuese el malo, ella fue quien me dejó pasar frío y hasta hambre —dice con los ojos brillosos, sé que está reteniendo todo ese dolor. Mi padre está a su lado sin dejar de mirarlo, me acerco a Charlie con la intención de abrazarlo, pero él continúa hablando.

—Esa mujer no es mi madre y yo estoy dispuesto a hacer hasta lo imposible para verla como ella me dejó a mí, desorientada y sola, sin saber qué demonios está pasando, sin familia, sin nadie —dice con todo el enojo y el dolor reflejado en las lágrimas que ahora se deslizan por sus mejillas. No me da tiempo a abrazarlo, mi padre nos sorprende a todos y lo estrecha entre sus brazos como si se tratara de su propio hijo. Charlie se limpia rápidamente las lágrimas de los ojos y acepta el abrazo.

—Yo mismo me encargaré de que ella pague por lo que te hizo y está haciendo —le asegura mi padre en cuanto se apartan, Charlie solo asiente.

—¿Qué más sabemos de ella? —cuestiona papá.

—Que es esposa de Connor, su única hija viva es Lesley, y es hermana menor de Adrian Fernández —le digo mientras leo. Nunca se nos pasó por la cabeza, ni siquiera mi padre que perteneció a su mafia sabía que ellos eran familias. Esto me hace descartar que Fernández sea el padre de mi chico y solo quedan en la ecuación, Connor y su familia que busca venganza.

—¿Cómo es que nunca supe de ellos dos? Ahora todo tiene más sentido —dice mi padre.

—¿Qué cosa? —cuestiono.

—Connor era infiltrado de nuestro enemigo Mason, y Caitlin llegó a la mafia después de que yo me fui, pero llegó con sus dos hijas que tuvo con Connor —responde papá, pero estoy igual de confundida.

—Y...

—Fernández envió a una de las hijas de Caitlin a matar a mi esposa, pero no porque ella fuera la mejor, sino porque sabía que íbamos a acabar con la hija de su hermana y del tipo que consideraba su enemigo —señala y ahora sí que tiene un poco de coherencia.

—Él se deshizo de mucha gente al enviarlos para matarme, Leyla fue una de ellas, quizás esa mujer está vengando la muerte de su hija y su hermano, sin saber lo que él hizo. —La verdad tiene mucha lógica, me sorprende lo rápido que llegó a esa conclusión.