Sálvame [Tom Holland y tú]

Capítulo 17

-Narra Tom-
-¿Quien es, Harrison?- Hazza dio un último vistazo a su portátil.
- Todo parece girar alrededor de Rubén Doblas Gundersen o mejor conocido como el Rubius, es un famoso youtuber, tiene 24, vive junto con otro youtuber famoso Miguel Ángel, conocido como Mangel- volvió a mirar su portatil y se recosto sobre el respaldo de la silla- No se si ella esta con ellos, pero según la descripción y el número de placas que me diste, esta claro que la última persona con la que le viste fue él.
-¿Tienes la dirección?- Me incline hacía delante intentando ver su pantalla.
-¿Qué piensas hacer? Si vas y te le apareces solo la vas a asustar, aparte, él es solo una opción, no se garantiza que ___ este con ellos- Me quedé en silencio y baje la cabeza- ¿Porque te preocupa tanto?- Me pregunto Haz, desconcertandome, ¡NI YO LO SABIA!-.
-
-Narra ____-

Sin exito, así fue mi día buscando trabajo, el sol se ocultaba, saque mi telefono para ver la hora, eran las 7:58 pm, en ese momento me llego un mensaje de Rubén.
-___, llegaré algo tarde, por un contratiempo, llego a las 10:00- genial, estaria sola en la casa-.

Guarde el movil y busque las llaves de Mangel que Rubén me dio para entrar. Nada, no podría entrar, suspire, más jodida no estaba, caminé sin dirección alguna, no serviría de nada ir a la casa.

- Oye guapa, ¿te llevo?- escuche una voz masculina decir detrás de mi, me gire y vi aun chico de unos 23 años con una chaqueta de cuero y unos pantalones ajustados de cuero tambien, apagaba su moto a unos pasos de mi.

-No, gracias- intente seguir con mi camino, pero algo hizo fuerza en mi brazo jalandome hacía atrás, provocando que chocara contra una pared hasta el punto que me hizo daño.

-¿Segura? La calle no es muy segura para una dama- me acorralo-.

-SI, ahora vete a la mierda- me empezaba a desesperar.

-Uy, que bocaza la tuya- se me acercó más- Soy Levi- respire hondo intentando controlarme.

-Mira Levi, fue un día largo, me duele el curpo y quiero que me dejes en paz, por favor.

-Si, seguro que te duele el cuerpo, si vienes conmigo, te dolerá de una forma más placentera, te doy 200- puse los ojos en blanco, que imbécil, levanté mi rodilla hasta su entrepierna, gimio de dolor llevando sus manos a ella mientras maldecia por lo bajo.
- Adios imbécil - corrí alejandome de él.
-¡Esta me las pagarás! - se montó en la moto y me perseguio con una mirada matadora, me metí en un angosto callejón y tumbe un bote de basura interponiendole el paso, cosa que esquivó como si fuera nada, salté una pequeña reja, cansada de tanto correr, pensaba en seguir corriendo, cuando note algo.

-¿Qué pasa? ¿Tu moto no puede pasar las rejas? - le dedique una sonrisa burlona.
- Cariño estoy a 5 metros de dar vuelta, alcanzarte y darte a por culo- mi sonrisa se borró, busque ayuda con la mirada, vi luces a lo lejos, como una reunión/fiesta/algo, corri de nuevo dirigiendome al lugar, me dolían las heridas, definitivamente nunca sanaria a este paso, me detuve un momento a tomar aire, pero Levi no me daba esa oportunidad, hizo rugir su moto, detrás de mi.

-Joder- me dije a mi misma, segui corriendo hasta que llegue, dandome cuenta que en vez de ponerme a salvo hice lo contrario, era una reunión de motociclistas y yo no solo era una chica con ropa de chico si no que estaba a la mitad de lo que parecia una importante carrera, por las miradas de los presentes.

- ¡Detenganla!- Levi había llegado, poco parecio importarle la carrera, se metió en el área de la carrera donde yo estaba.

Atonita sin saber a donde ir retrocedi sin saber a que temer más, a Levi o los 4 competidores que pronto fueron 3 despúes de un aparatoso accidente, tropecé con algo callendo de espaldas al suelo, por acto reflejo me cubri la cara y cerré los ojos, esperando un buen golpe por cualquiera de los 2.

Pero no paso, abri los ojos lentamente, bajando los brazos  y frente a mi había una harley bestial que hacía parecer que la moto de Levi era solo un juguete, no la había escuchado llegar por todo el ruido que había.

Quien me había salvado era importante o peligroso, lo supe en la forma en que mi atacante se asustó y huyó cuando se bajo el gorrito de su sudadera negra que parecía llevar debajo de una chaqueta de cuero del mismo color, dejandome ver que no era "él" si no ella, el pelo rojizo y algo despeinado de tanto correr en la moto le cayo a los hombros, se giro sobre su harley, su intimidante harley y me miro con indiferencia, la reconocí al instante.

-Eres la que trabaja en la casa de Holland...Martha- Su seriedad quedó atrás cuando soltó una fuerte carcajada, ladendo la cabeza hacía atrás, mostrandome sus perfectos dientes blancos.

-No me jodas, ¡¿YO?! Trabajar para él- se hecho a reir de nuevo- somos socios, cuando me viste vestida como la chacha de Martha fue porque estabamos a punto de dar un gran golpe a un ricachón-.

-P-p-pero- No sabía que decir- eso significa que tu y él son- no me atrevía a decirlo.

-Si y por tu culpa perdimos esos millones- Saco de el bolsillo de su chaqueta una cajetilla de cigarros, tomo uno, se lo llevo a la boca y lo encendio- Bien __, me parece que él tiene demasiada consideración contigo- vi como expulsaba el humo del cigarro por su boca y se mezclaba con el aire frío, - pero yo no, a la primera que me hagas  y te rompo el cuello- le dio otra calada a su cigarro-.

No estaba jugando, no tenía pinta de que jugara en ese sentido, me estremeci, no mentia era capaz de romperme hasta el ultimo hueso, debia cuidar mis palabras y no ser torpe.

-¿Qué quieres? No te debo nada, dejame en paz- Tenia que ser yo,  si salia de esta me pondría un letrero que diga "Solo matame, nos ahorramos el show  :)" -.

-¡¿Qué mierda dijiste?!- se bajo de la harley, tiro el cigarrillo al suelo y lo hizo añicos con su bota, se inclino y me tomo de la sudera jalando hacia arriba con mirada rabiosa.

Bien __ por una puñetera vez en la vida deja de provocar al tigre.

- Lo que oiste- Estoy muerta.