Desde Cero

17 - Durmiendo Juntos

Entré a la sala de estar cargando mi plato de dulces. Liam estaba configurando la consola. Sacó un juego y sonrió. Me pregunto qué podría estar haciendo él. Me senté en el sofá y lo vi moverse de un lado a otro. Un poco más tarde se volvió hacia mí y me entregó un controlador.

"No puedo perder contigo en esto". Él dice con extrema determinación. Parecía ser un juego de lucha. Nunca he tenido mucha experiencia con estos juegos, pero sí sabía lo básico. Rápidamente navegó por el menú y seleccionó un personaje. Él tenía ropas rojas; chaqueta, botas y pantalones con una envoltura blanca alrededor de este torso y cuchillas duales. Seleccioné a un chico rubio con un bastón. Tenía una paleta de color gris oscuro en su ropa. Seleccionamos una etapa y la partida comenzó.

Él realmente era bueno en este juego. Apenas podía seguir el ritmo de todos sus ataques. Su personaje siempre estaba cortando y saltando. Solo logré obtener algunos golpes en él. Jugamos un par más de partidos con los mismos personajes, y después de cada uno comí un poco de mi helado y muffin. El panecillo sabía extremadamente bien. Supongo que nunca lo noté porque siempre fui yo quien los cocinaba.

Tenía un poco en mi cara. Liam lo notó y pasó un dedo por el costado de mi boca. Lo que hizo casi me hizo desmayar, ¡metió su dedo en su BOCA! Me convertí en un desastre rojo pegajoso tratando de averiguar por qué lo hizo. Él solo me sonrió, volviendo al juego. Esta vez eligió un ninja verde oscuro. Elegí una gran mujer con el torso desnudo. Tenía el pelo largo y castaño y un atuendo blanco de sparring.

Creo que finalmente estoy empezando a entender esto, porque casi gano la partida. Liam aplaudió por la victoria, empujando los puños en el aire.

"Finalmente, algo en lo que te puedo ganar". Dijo volviéndose para mirar con aire de suficiencia.

"Estoy seguro de que hay muchas cosas en las que puedes vencerme". Digo tranquilizadoramente.

"Está bien, bueno creo que es casi hora de dormir. Ya me di una ducha para que puedas seguir tu, adelante". Liam dijo estirándose.

"P-pero yo no traje nada de ropa!" Le digo con preocupación clara en mi tono.

"Puedes tomar prestada una de mis camisas. Pueden ser un poco grandes, deberían estar cómodas". Él contesta levantándose del sofá y dirigiéndose a las escaleras.

"B-bueno ... quiero decir si realmente no te importa". Digo un poco preocupado, sin saber si realmente le importaba. Permaneció en silencio durante todo el camino hasta su habitación y comenzó a hurgar en sus cajones. Sacó un pequeño par de boxers y una camiseta de gran tamaño. Los empujó hacia mi pecho, queriendo que los tomara.

"Ten, son algunas de mis prendas viejas. Ya hay algunas toallas en el baño, así que puedes usarlas. Cuando hayas terminado, puedes arrojar toda tu ropa en el cesto al lado de la puerta. lo lavamos cuando despertemos ". Él explica señalando hacia el baño.

"B-bien gracias". Fue todo lo que respondí. Entré al baño y lo inspeccioné un poco. Era limpio y blanco brillante con luces amarillas que suavizaban el brillo de la habitación, haciendo que el ambiente fuera agradable. Me desnudé y entré a la ducha. No pasó mucho tiempo para calentar como lo haría el mío. Me quedé allí de pie, dejando que el agua me lavé la cara, bajando por mi cuerpo. Se sintió increíble.

Salí un par de minutos más tarde y saqué una de las toallas del estante cerca de la ducha para secarme. Me puse los boxers de Liam que usaba cuando supongo que era mucho más joven. Fue bastante revelador en la parte frontal, pero afortunadamente tenía una camisa de gran tamaño para usar. Me puse la camisa por la cabeza. Era muy grande, como se esperaba, cubriendo la parte inferior de los boxers. Tenía el aroma desvaído de Liam aún presente. Me encontré agarrando la camisa en mi nariz e inhalando el aroma. No sé lo que me pasó, solo me perdí.

Después de terminar en el baño, volví al dormitorio de Liam. Estaba sentado en su cama leyendo algo de su tableta. Se volvió hacia mí y sonrió con sus mejillas enrojecidas.

"Luces bien." Dijo en una manera de broma coqueta. Por supuesto, eso todavía me hizo cambiar mi color de rojo pálido a rojo brillante. Se levantó de la cama y me indicó que fuera. Subí y lo miré, ahora me detuve en el suelo.

"E-espera, no puedes dormir en el piso otra vez". Anuncio con preocupación "Dormiré en el piso".

"De ninguna manera eres un invitado, además tú eres el que recibió un golpe en la cabeza con una pelota, no yo. Yo dormiría en el sofá, pero la enfermera dijo que debías tener a alguien contigo siempre que fuera posible". Él dice con severidad.

"Pero ... yo ..." me congelé. "¿P-por qué los dos no dormimos en la cama?" Pregunté sin pensar. Qué he hecho. No quería arrastrar a Liam ni hacer que se sintiera incómodo.

"Por supuesto." Él respondió con una gran sonrisa en su rostro, y una capa de lo que parece ser encantado?.

"Quiero decir, ¡no es necesario! Fue solo una sugerencia". Digo con mi voz callada y mis manos ondeando hacia adelante y hacia atrás.

"¿Qué? ¿No quieres que lo haga?" Él dice y se ve un poco molesto.

"No, no, no, ¡no es eso! ¡Realmente quiero que te acuestes conmigo!" Digo agitando mis manos nuevamente. Él se quedó allí con una mirada divertida en su rostro, sonriéndome. Pasó un momento antes de darme cuenta de lo que acababa de decir. Mis ojos se abrieron y una ola de vergüenza me inundó. Metí la cabeza debajo de la almohada y me tapé con las sábanas.

Acaso yo solo le revelé mis sentimientos? Tal vez él realmente no sabía lo que quería decir, tal vez él no entendió bien. Antes de que pudiera terminar mis pensamientos, la cama se hundió, lo que significaba que Liam entró. Las cobijas y la almohada fueron arrancadas de mí solo para revelar a Liam, en la cama ... SIN CAMISETA. Me volví tan rojo que probablemente estaba buscando una cereza justo ahora. Sentí el calor de mi sangre corriendo a través de mi cuerpo, se sentía como si hubiera sido sumergido en un volcán, pero de alguna manera el calor que irradiaba del cuerpo tonificado de Liam era mucho más cálido. Me sentí gravitar hacia él. El calor me atrajo, casi como si no tuviera otra opción. Envolvió sus brazos musculosos a mi alrededor, jalándome hacia su pecho desnudo. Su aroma era poderoso y relajante. Levanté la vista de su pecho y vi una cálida sonrisa en su rostro mientras me miraba a los ojos. Oculté mi cara en su pecho tratando de enterrar mi vergüenza. Estoy soñando, debe ser, este momento fue demasiado surrealista.

Antes de darme cuenta me había quedado dormido, en los brazos de Liam. Este sueño se sintió sustancialmente largo. Me pregunto cuándo terminará ...

Hola, le informo que en esta historia habrán actualizaciones diarias hasta el capítulo 40 probablemente (son 59), olviden votar y comentar.