Desde Cero

4 - Genio Musical

Me costó mucho conciliar el sueño esa noche debido al dolor que me quedaba en el estómago. La mañana después de que me desperté de lo que podría decir que fue un sueño terrible, fui a la ducha. Las gotas de agua lastimaron mi piel mientras bajaban por mi cuerpo. Fue soportable sin embargo. Me aseguré de desayunar esta mañana, aunque no estoy seguro si seré capaz de mantenerlo. Fue un simple jugo y cereales, muy promedio, aunque no me quejo. No me molesté en preparar el almuerzo hoy porque claramente no tuve tiempo de hacer nada.

Honestamente, no me gustaría nada más que quedarme en casa todo el día, pero mis maestros ya piensan en mí como un niño problemático, y saltarse otro día de clases solo empeoraría las cosas. Sé que si llamara por enfermedad tampoco me creerían. Entonces con eso en mente solo salgo por la puerta.

Después de mi larga caminata a la escuela, siento que el dolor en mi cuerpo se ha vuelto aún más insoportable. Aunque estoy demasiado cansado y débil para dar marcha atrás ahora. Así que solo continúo hacia la escuela. Comencé a caminar por el pasillo pero muy lento, porque no me siento bien en este momento. Mientras sigo luchando por caminar, veo a Liam y sus amigos. También notan que camino por el pasillo. Comenzaron a acercarse a mí con una gran sonrisa en sus caras hasta que comencé a balancearme, mi cabeza comenzó a girar y mi visión se volvió borrosa. Escucho un fuerte golpe mientras me desplomo al suelo. Todos guardaron silencio, excepto por unos pocos. Se rieron probablemente pensando que me tropezaron o me empujaron, solo hasta que no me levanté. Fue entonces cuando la gente comenzó a entrar en pánico. Ni siquiera sabía lo que estaba sucediendo yo mismo. Fue entonces cuando me dormí.

Me desperté con un fuerte pitido que se repetía una y otra vez. Estaba en el hospital. Me quedé allí pensando que estaba soñando. Solo esperé y esperé para despertarme pero a cada segundo que pasaba comenzó a sentirse más como la realidad. Empecé a entrar en pánico cuando me di cuenta de que no estaba soñando.

Varios momentos después, la puerta se abrió. Entró un médico. Tenía el cabello castaño desordenado y era bastante alto. Sin embargo, no pude leer la etiqueta de su nombre. Mi visión todavía era demasiado borrosa.

"¿Como te sientes?" El empezó.

"Mucho mejor que antes". Digo con una risa tímida, y él sonríe.

"¿C-cuánto tiempo he estado aquí?" Pregunto nerviosamente, asustado por una respuesta.

"Solo has estado fuera durante dos días". Mis ojos se abren ante su respuesta.

"¡De ninguna manera! ¡Espero haber cerrado las puertas, apagar la estufa!" Susurro preocupado. Aunque todavía parecía escucharlo.

"No trabajes demasiado chico. Estabas en muy mal estado cuando llegaste aquí". Él dice en un tono preocupado. Lo miro curioso.

"Sus dos costillas estaban fracturadas y su cuerpo estaba increíblemente magullado". Él me mira con lástima en sus ojos "¿Acaso me dirás lo que pasó?" Él termina con una pregunta.

"Yo ... yo uhh ..." dudo en responder por un tiempo. "F-Fueron algunos matones en mi escuela. A-aunque no es como si incluso tu me creyeras de todos modos". Termino girando mi cabeza en la otra dirección.

"¿Por qué no te creo?" Él pregunta con curiosidad.

"Nadie lo hace ... Yo-es como si el mundo estuviera en mi contra". Digo ahora mirando hacia abajo en mi regazo.

"Te creo, así que no tienes que preocuparte", dice con pena en su voz. Le miro a la cara y veo que está diciendo la verdad.
"Esos son unos matones bastante duros". Él dice sorprendido.

"S-sí ... no creo que conozcan su propia fuerza". Digo ahora jugando con mis dedos.

"Entonces, ¿cuándo vendrán tus visitantes?" Él pregunta: "Solo tengo curiosidad porque nadie ha venido a visitarte en estos últimos días". Él dice preocupado.