Capítulo treinta y seis

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Capítulo treinta y seis

Nicholas

No es así como quería hacer esto.

No se suponía que todos se enteraran primero que Nicole...Aunque no estoy seguro de que ella en este momento se esté enterando de nada. Sabía que era cuestión de tiempo pero solemos pensar que el tiempo es eterno hasta que se acaba.

Ni siquiera sé como nadie dio con mi pequeño secreto cuando la fama golpeo con fuerza mi puerta. Supongo que la prensa a veces no es tan eficiente como les gusta pensar que lo son.

—No voy a contar los detalles que no me pertenecen. Si Camille quiere hablar de ello no voy a detenerla pero necesito que todos ustedes entiendan que mi prioridad es mi hermana...y ya que Brooke va a salvar el trasero inconsciente de todos nosotros, creo que es un buen momento para dejar claro que Nicole también encabeza mi lista de prioridades.

Ella rueda los ojos.

—Pensé que la prioridad de todos los artistas eran ellos mismos. Estoy sorprendida, Nicholas.

Ahora es mi turno de poner los ojos en blanco. ¿Qué carajos? Tener un talento y poder vivir de ello no nos vuelve idiotas...al menos no a todos. Solo somos afortunados.

—Y yo pensé que eso es lo que te daba de comer.

—Estoy oficialmente ofendido, muñeca —informa Owen cruzando los brazos sobre su pecho y levantándose del sofá donde segundos antes se había acomodado. —¿Cómo se supone que vas a limpiar nuestra mierda si piensas que somos idiotas?

—Ese no es un comentario inteligente para decir en una habitación llena de personas que viven de hacer lo que más aman y obtienen reconocimiento por ello —replica Raymond —. Renunciare a los derechos de autor de mi definición de artista por el bien de tu carrera y dejaré que la uses como si fuera tuya.

Ella sonríe y estoy muy seguro que acabo de ver baba cayendo por la barbilla de Owen.

Creo que estoy viendo la magia pasar frente a mis ojos. Casi puedo sentir la tensión sexual que sale en ondas de ambos. Incluso cuando Brooke intenta ser toda hostilidad y no lucir sorprendida por el modo en que nos comportamos.

—Si no fueran idiotas no tendría que limpiar su mierda...Y, vuelve a llamarme muñeca y voy a arruinar tu rostro de niño bonito.

Christina carraspea haciendo que ambos detengan su enfrentamiento.

—No estamos aquí para hablar de los problemas que ocasionan Owen, Wyatt o Raymond quien de hecho no tiene ningún problema, Brooke. Centrémonos en Nicholas y Nicole. Y por favor, ¿pueden todos dejar de usar malas palabras?

—Nicole te hubiera mandado a la mierda por tu comentario racista contra los artistas, querida —asegura Wyatt frunciendo el ceño.

Christina bufa claramente molesta porque de nuevo están ignorándola.

—Suficiente, niños. Si no quieren que piensen que son idiotas dejen de actuar como tal —interviene Adrian ocasionando que golpee la parte trasera de su cabeza.

¿Olvide mencionar que hay mucha confianza entre nosotros? Quizá porque el bastardo ha sido mi amigo desde que tengo dos años y es tan solo tres años mayor que yo.

—Vuelve a llamarme niño y voy a recortar tu salario.

Ríe.

Volteo a ver a Camille quien permanece en silencio junto a Raymond sentada en el sofá con mi cachorro quien se ha autodenominado su protector y le pregunto directamente:

Un Nicholas para Nicole (TOP FLAIR I)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora