CAPITULO 34. GRADUACIÓN

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-¿Estás bien?- me preguntó Alex.

-Creo… creo que sí.

Empezó a revisarme por todos lados y yo me empecé a reír.

-He dicho que estoy bien…-dije riendo.

Me acompañó a casa y me quedé quieta en el portal de ésta esperando algo. Pero no sabía el qué.

-Bueno, gracias… Creo que… entraré en casa…

-Sí, y yo me iré por allí-dijo él señalando calle abajo.

Entré a casa. Vaya, me sentía muy vacía, me había esperado un beso. Tal vez él quería que diera yo el primer paso para superar lo de Carlos, y tal vez estaba preparada. Abrí la puerta y lo vi bajando hacia abajo, ahora no había vuelta atrás. Corrí hacia él, le abracé y le besé sintiéndome en el cielo. Lo había superado por fin, al cabo de unos largos 4 meses. Me separé y él se quedó algo sorprendido por lo que acababa de hacer.

-Te quiero, te quiero, te quiero, te quiero…-dije abrazándole.

-E… ¿Estás bien?

-Ahora sí, perfectamente.

-Vale pues déjame decirte algo muy serio -se separó un poco- Marta, te conozco desde hace bastante y quiero que sepas que has ido ganándote un gran puesto en mí corazón, me gustas mucho y yo… querría saber si… ¿Saldrías conmigo?

Empecé a saltar y le di un ‘’SÍ’’ enorme. Me encantaba y quería estar con él para siempre. Noté como las inseguridades desaparecían y poco a poco me iba sintiendo más segura, en casa.

--Un año y medio después--

Llegaba tarde, muy tarde. Y justamente el día de la graduación. ¿Qué qué había pasado en este año y medio? Pues había estado con Alex la mayor parte del día. Al fin Dylan, el hermano de Carlos, le había pedido salir a Re y ésta había empezado a trabajar ya que no le iba mucho eso de estudiar. Estaba más centrada y me sentía más madura al saber que dentro de poco estaría estudiando psicología en la universidad con Alex que estudiaría para maestro de educación física. Bueno, Esther lo había dejado hacía poco con su novio pero ya tenía un sustituto en mente. Ella estudiaría periodismo. María era la que tenía las ideas más claras y la más centrada del grupo, también estudiaría periodismo. Andrea, bueno, ella había suspendido algunas asignaturas pero aún así había pasado. Mis padres se habían vuelto más atentos hacia nosotras y mis amigas de mi pueblo natal, Yolanda y Sam se habían separado por completo de Clara, quién no hacía mucho había descubierto que Marc le engañaba con otra, y se habían vuelto amigas mías de nuevo. Se lo tenía merecido.

Corrí con los tacones en la mano hasta la entrada del gimnasio. Iba totalmente arreglada con un vestido corto de volantes violeta y unos tacones altísimos. Me dirigí por el estrecho pasillo con la mirada de todos posada sobre mí y me senté en mi silla. Vi a Alex sonriéndome cuando llamaron mi nombre. Subí las escaleras que llevaban al pequeño escenario que habían montado días antes. Pude ver a mis amigas emocionadas con sus diplomas ya en la mano, a Alex sonriendo, a mi madre llorando y pude ver también a la Marta que había llegado a Madrid orgullosa de mí, a un Carlos que me sonreía desde la lejanía de mi mente y a una vida que me sonreía para seguir avanzando, porque cada caída es una lección y cada alegría una recompensa.

                                       ¿The end…?

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NOTA DE LA AUTORA: HOLAAAAAAAS, me estoy planteando en hacer una segunda parte. Como un recorrido de Marta por la universidad y en este tiempo pienso seguir mi otra novela y editar ésta. Bueno, pues aquí acaba Mudanza a Madrid. Espero que votéis y comentéis y que me sigáis leyendo en mi otra novela. Vuestros comentarios significan mucho, gracias. Ah, y gracias a esas maravillosas lectoras que me han apoyado desde el principio. Respondo a cualquier pregunta sobre la novela o los personajes.

PD: nos ‘’veremos’’ pronto en mis otras novelas, así que esto no es el fin.

Gracias a:

natadg17

ReyesDirectioner

Maria_5SOS

SamRivas

Mermaid17

LauBuscaAventuras

AlejaRios

erisaegipt1

gemma_pm

maria_araga99

esther_ac

carolinaseru

Isabellita5

Mudanza a MadridDonde viven las historias. Descúbrelo ahora