25-Fiesta con Ruth

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-A mi no me amenazas.- dijo Leon, con la mandíbula tensa.

-Y tu a mi no me llamas puta y te quedas tan tranquilo.

-Eso es lo que eres- espetó Leon. -Soy un hombre que se anda sin rodeos. Un hombre que dice lo que siente y lo que ve.

-Me das lastima Leon- Ruth se alejó.

Miré a Leon y luego a Ruth.

-Vamos, Nat- me llamó.

Fruncí el ceño. -¿Adonde?- pregunté.

-No, Natalia, se queda conmigo.- exclamó Leon, iracundo.

-No seas estúpido.- Ruth rió sin gracia. -Las visitas se terminan dentro de cinco minutos y Natalia es una visita.

Leon me miró, con una ceja fruncida y expresión confusa. -Estoy seguro de que alguien puede quedarse.- musito.

-¿Que?- Ruth se rió nuevamente. - ¿Acaso te da miedo quedarte solito?

-Joder. Ya lárgate.- Leon señaló la puerta.

-Me largo pero con Natalia- se acercó a mí, y me agarró del brazo.

Me jaló hacia la puerta, sin tener en cuenta las advertencias de Leon.

-¡Que la sueltes!- repitió Leon, pareciendo frustrado.

-Debe irse. Quieras o no.- dio media vuelta y se alejó cuando salió por la puerta. -Te espero Natalia- gritó.

Miré la cara de Leon. -Debo irme.

-¿Te irás sin despedirte?- preguntó Leon, parecía molesto.

-Espero que tengas una buena noche.- Me acerqué a Leon. - También espero qué te sientas mejor para mañana.- susurré, incliné mi cara hacia la suya, y planté un pequeño beso en sus labios.

Cuando estaba a punto de alejarme, Leon me cogió de la nuca y me besó nuevamente, A diferencia del beso anterior, este era salvaje y lleno de necesitad.

-Te amo, Nat- Leon rompió el beso con delicadeza. -No lo olvides.

Yo también te amo. Quise decirlo, pero simplemente no podía. Ni siquiera sé el porque accedí a besarme con él. Esto afectaría mis planes.

-Descansa Leon- no correspondí a sus palabras anteriores. Caminé hacia la puerta.

-Eres solamente mía.- lo oí decir, antes de que pudiera salir.

Cerré los ojos con fuerza y di un grito ahogado.

Cerré la puerta, y me contuve. ¿Eso fue todo? Lo eché a perder. Una vez más me había dado cuenta de que en los planes de Leon no estaba cambiar. Él no iba a dejar de presionarme con su posesividad. Nunca.

-Vamos.- me dirigí a Ruth.

+++

Me tiré a la cama luego de que salí del baño. Me había dado una larga ducha, y efectivamente había logrado olvidarme de los problemas por unos minutos. Alcancé el control remoto y encendí la televisión. Pasaban I knew you were trouble de Taylor por Mtv.

-Now i'm lying on the cold hard ground. Oh, oh, trouble, trouble, trouble.- tarareé.

Estaba a punto de levantarme para ir al baño cuando recibí una llamada, miré la pantalla, me di cuenta de que era Ruth y contesté.

-Hola Ruth.

-Hola Nati.- saludó, parecía animada. -¿Adivina qué?

-¿Qué?- fruncí el ceño.

Oí que se rió. -Acabo de encontrarme con unos viejos amigos. Estamos pensando en ir a una fiesta. Nada formal, es en una hora.

-¿Tan temprano?- solté.

-Sí.- informó. -Arréglate, estamos debajo de tu casa.

Me sorprendí. -¿Qué?- exclamé.

-Sí.- carraspeó. -Sabía que me dirías que no, así decidí venir.

-Ruth... No creo que sea prudente luego de lo que ha pasado con Leon.

-El maldito de Leon está bien. - escuché enojo en su voz. -Arréglate y baja.- colgó.

Maldije, y me levanté de la cama. Caminé hacía la ventana, y miré a través de la persiana. Observé un auto negro, era deportivo. Observé adentro y vi a Ruth acompañada de otros tres chicos, a los que no les pude distinguir. No los conocía.

¿Adonde se supone que íriamos? ¿En que estaba pensando Ruth?

He aquí después de tanta demora uwu, ya aparecerá alguien a quien amamos ahr

Nos wachamos más tarde en el otro capítulo, bais.

EX NOVIO POSESIVO | Leon GoretzkaWhere stories live. Discover now