Todas las noches de mi vida [J.Jonas]

Capítulo LV

           

*[_____________]

El impacto hizo que Joe cayera al suelo y yo, con una mezcla de valentía y coraje me lancé contra la rubia una última vez, ella volvió a disparar, pero la pistola solo emitió un pequeño chasquido, la miré y torcí la boca en una cínica sonrisa, se había quedado trabada.

—¿Qué se siente, Emily? ¿Qué se siente saber lo que hiciste? — Emily miró hacia Joe y sus ojos se llenaron de lágrimas

—No...

—Si... tu locura es tal que solo te has dedicado a lastimar a la gente... realmente lo siento tanto por ti...— me acerqué, apretando un vidrio que había recogido del piso, apretándolo tan fuerte que cortó la palma de mi mano— Basta, Emily... se acabó— murmuré con voz débil, ya estaba fuera de juicio

Las luces de varias linternas nos alumbraron y un disturbio de gritos nos rodeó, pero mis oídos ya no aguantaban, mis rodillas dieron contra el suelo y solté el vidrio al piso, escuché como Joe gritaba algo y como alguien me tomaba por los hombros y me sostenía mientras yo caía al piso y golpeaba mi cabeza contra este.

Las luces me lastimaban la vista, titilaban como foquitos de navidad, había agua tirada en el piso... toqué mi muslo y miré mi mano, era mentira, no era agua: estaba encharcada en mi propia sangre, que estaba bajando por mi pantalón lentamente, o sabrá Dios de quien más era. Entre muchas manos comenzaron a ponerme cosas frías sobre el cuerpo y a apuntarme con lamparitas a los ojos. Las voces decían algo, pero por mucho que intentaba seguirlas, el pitido de la cabeza era más agudo.

Unas manos más fuertes me alzaron del piso y mi cuerpo fue depositado sobre algo no muy cómodo para ser sinceros, me cubrieron la mitad de la cara con algo y mágicamente comencé a avanzar.

...

*Joe*

La pequeña figura se dobló y cayó al suelo, en el momento justo en que Nicholas tomaba su cuerpo, la levantó un poco y un par de hombres llegaron a su lado, tomando sus signos con rapidez y levantándola rápidamente.

Mi vista era borrosa, estaba borrosa de tantas lágrimas, la impotencia me corría por las venas mientras la sangre seguía surgiendo de mi brazo, apreté más fuerte, causándome dolor y ganas de salir corriendo detrás de ella.

—Las manos donde pueda verlas— dijo alguien con voz severa, mirando y apuntando a Emily, que estaba lívida y me miraba a mí, con ojos brillantes

—Joe...— suspiró, al tiempo que alzaba los brazos— pudimos ser tan felices...

Fue esposada al tiempo que vi como subían a ____________ a una camilla y la movían rápidamente con una máscara de oxígeno en la boca. Nick corrió hacia mí, seguido de un paramédico que cargaba una bolsa.

—Joe... Joe, respóndeme, por favor...

Pestañeé varias veces seguidas y miré a mi hermano, estaba mudo, el paramédico me miró y comenzó a examinarme, era como un muñeco, que se dejaba agarrar y mover, retiró mi mano y aplicó una compresa que me hizo gritar de dolor.

No sé realmente como, pero de un segundo a otro, nos movíamos por la carretera con una velocidad que no debería estar permitida, iba subido en algo que no recuerdo, Nick a mi lado, con la mirada más preocupada que puede haber, mirándome y apretando mi mano, la voz no lograba salir por mi boca.

...

—Joseph, Joseph...— mi madre me miró y me tomó la cara entre las manos