Capitulo 26 - 2° Parte

5K 478 38
                                    

MATT'S POV

Salgo del despacho de mi padre un poco más aliviado. Hemos logrado conversar como adultos, por una vez. He podido convencerlo, no sólo de que no quiero reemplazarlo en la compañía, sino también de que sería un mal movimiento para sus negocios.

Estoy llegando a la sala cuando la voz crispada de Brooklyn me hace comenzar a correr. La sangre se me paraliza cuando la veo poniéndose el abrigo y alejándose en dirección a la puerta principal.

Lanzo una mirada a mi madre, sólo para descubrirla con una sonrisa calculadora en su perverso rostro.

-Brook- grito, intentando detenerla.

-Lo siento- solloza, mientras toma su bolso y lo cuelga de su hombro-. No puedo Matt; no puedo seguir con ésto.

-¿Qué sucede nena?- susurro cuando llego a su lado. 

Ni siquiera se da la vuelta. Ni siquiera me mira cuando me rompe el corazón:

-Ya no te quiero- susurra.

Sus palabras hacen que me detenga abruptamente. Dolor; dolor puro y duro en mi pecho.

Esto no puede estar pasando. 

La observo salir por la puerta principal sin poder moverme.

Sin embargo, yo sé que ella me ama. Lo siento en cada hueso de mi cuerpo. Repito sus palabras en mi cabeza, la manera en que las dijo... Podría, podría haberlo creído, si no fuera porque su voz se quebró en la última sílaba.

Intento ir tras ella pero un apretón en mi brazo me detiene.

-Déjala- dice mi madre al tomarme por la muñeca-. Déjala irse, no te merece.

-No sabes nada- siseo, soltándome.

Mi madre me ha costado la única oportunidad que tenía de alcanzarla. Cuando consigo salir fuera, Brookyn ya ha atravesado la reja de entrada en mi auto. Corro hacia la cochera y cojo el auto de papá que afortunadamente tiene la llave en el contacto.

Acelero a fondo y comienzo a seguirla, mientras intento llamarla por el móvil. Suena una, dos, seis veces, pero no lo coge.

Adelanto una camioneta, forzando al motor a su máxima potencia. Ya puedo verla delante de mí.

***********

BROOKLYN'S POV

Puedo ver a Matt tras de mí.

Sin embargo, no tengo fuerzas para enfrentarlo. Acelero un poco más.

Tuve un mal presentimiento todo el día; un sentimiento de pérdida, dolor... muerte. No imaginé sin embargo, que ésto sucedería.

No pensé que Andrea, a pesar de ser una madre estricta, difícil, podrías llegar a esto. Rememoro nuestra conversación, la frialdad de sus ojos avellana, tan parecidos a los de Matt. Mi estómago se aprieta por lo que estoy a punto de hacer.

No quiero irme, no quiero dejar a Matt. Tampoco a Dom. Pero hay cosas más importantes que mi felicidad. 

Cuando alguien amenaza a las personas que más amo en este mundo, soy capaz de todo. Incluso si eso significa dejarme a mí misma en el camino.

La conversación que me espera al llegar a casa, el momento de anunciar que dejo a nuestra familia para siempre, pesa sobre mi cabeza. No me deja respirar...

Mi móvil suena una vez más. Es Matt. Pero no puedo hablar con él aún...

Acelero un poco más, sólo un poco más, y lo veo... 

Frente a mi, el camino se bifurca, un árbol en el centro; voy lo suficientemente rápido para saber que no lograré girar a tiempo. 

Sólo me da tiempo a cerrar los ojos antes de sentir el impacto.

¿Quién dijo que el amor es de a dos?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora