Capítulo 37

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Kurt

Golpeo de nuevo su rostro, un golpe seco que deja a mi rival K.O. Su cuerpo golpea el frío suelo de la asquerosa habitación. Los gritos de los numerosos hombres que se encuentran en el lugar se hacen presentes, dando por finalizado el combate.

Puedo ver la sonrisa de mi hermano cuando recibe los innumerables billetes de los presentes. Nadie apostaba por mí, demasiado tiempo fuera, lo que ha generado desconfianzas, muchos piensan que he perdido mi toque pero es mentira, siempre sabré luchar, demasiado tiempo haciéndolo para olvidarlo.

Mi hermano golpea con su mano mi espalda como señal de que está contento con mi trabajo, y como todas las noches de este miserable último año, terminamos en el local de Brad Michaelson, el hijo de puta que mandó pegarle la paliza a mi hermano, de la cuál fue mi madre quien terminó por recibirla.

Ya se encuentra mucho mejor, está recuperada de todo, aunque los primeros meses fueron bastantes difíciles, entre otras cosas porque tenía que enterarme de lo que le pasaba por teléfono, no podía verla, abrazarla y decirle lo mucho que la quería. Mi hermano y sus irresponsabilidades me han quitado todo lo importante de mi vida, me ha alejado de mi madre, de la mujer a la que amo y de mi hermosa hija.

Cada pocos días recibo un mensaje de Liam, en ese mensaje veo a mi hija, numerosas fotos de ella haciendo distintas cosas, aunque sin duda, mi favorita fue la de la última semana. Lea y Rachel vestidas con la misma ropa, sonrientes observando la cámara. Me habría gustado estar ahí, ser yo el que sacase la foto para posteriormente enseñársela a todos mis conocidos, para echarles en cara que mi futura mujer y mi hija son las mujeres más hermosas del mundo. 

Si, he dicho futura mujer porque así lo pienso. En cuánto tenga la oportunidad de salir de toda esta mierda se lo pediré, le pediré que se case conmigo y que pase el resto de sus días a mi lado. Por su puesto también le haré miles de hijos e hijas más, porque después de ver el ser tan hermoso que hemos creado tan sólo pienso en hacer más y más.

De repente la visión de Lea llamándome loco si le hago tal declaración se hace presente en mi cabeza.

-¿Por qué sonríes así Kurt?

La voz de Brad se hace presente en el lugar. Levanto la vista y de nuevo vuelvo a esa pose gélida del Kurt del principio, de aquel hombre que no era feliz, aquel ser que no tenía nada importante por lo que luchar.

-Por nada- carraspeo y miro a otro lado.

Brad se limita a observarme durante unos 5 minutos, después se ve interrumpido por la llegada de Cory, el cuál sujeta a dos mujeres por la cintura.

-¿Qué pasa? ¿Por qué tan serio hermanito? Hoy ha sido tu noche.

-Vaya si lo ha sido, habéis conseguido mucho dinero, pero Cory, sigues en deuda conmigo, y lo sabes.

La sonrisa de mi hermano desaparece de su rostro y asiente lentamente.

-De todas formas no voy a ser un aguafiestas, disfruta de la noche y de las mejores mujeres Cory, y tu también Kurt.

-No me interesan.

Miro hacia otro lado mientras escucho la enorme carcajada de Brad.

-Vaya, cualquiera lo diría, según tengo oído antes sólo pensabas en ellas cuando terminabas una pelea.

-Ya no soy el de antes.

-Ya veo- dice mientras coloca una de sus manos en su barbilla y comienza a observarme.

Brad es un hombre mayor que Cory y que yo. Tendrá cerca de unos 40 y algo de años, rapado, con barba de unos escasos días. Es un hombre fuerte como yo, y los años le han dado la capacidad de saber como actuar y defenderse, dándole el aura de un ser dominante y desconsiderado, un tirano de los pies a la cabeza.

Déjame Vivir #Wattys2017Where stories live. Discover now