Bonus Extra capítulo 14☆

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Leo todavía no sabía qué hacía allí. Ya había dicho que no iba a asistir. Y no quería entrar a una casa de alguien que no conocía, a una fiesta para alguien que tampoco conocía. Por mucho que Lizzie estuviera dentro, Leo seguía negándose a entrar a aquella casa.

Aunque al fin y al cabo había llegado hasta la mismísima puerta de la casa. Pero solo por ella. Solo por verla.

Llevaba más de media hora allí, recorriendo la calle de arriba a abajo mientras trataba de decidir qué hacer y deseaba que Lizzie saliera. Podría ni siquiera estar allí, ya era tarde, había oscurecido cuando decidió ir. Pero tenía el presentimiento de que ella seguía allí.

Unas voces procedentes del interior de la casa le sobresaltaron y se escondió tras un coche cercano. Yoseob y Junhyung salieron y se dirigieron calle abajo sin notar su presencia.

- Maldita sea. -se quejó Leo dándole una patada a una pequeña piedra en el asfalto cuando ambos chicos desaparecieron de su vista. Su corazón se había acelerado de solo pensar que podría ser Lizzie la que hubiera salido de aquella casa. Realmente quería verla. Quería hacerle cumplir su promesa.

Leo se apoyó ya cansado de esperar en un pequeño muro de la casa situada frente a la puerta que observaba aún con esperanzas. Sus piernas empezaban a entumecerse y sus manos estaban frías. Pero no quería irse. Todavía no.

Metió sus manos en los bolsillos del abrigo y dejó escapar un gran suspiro. Entonces lo escuchó. El sonido de pasos acercándose. El sonido de tacones.

La puerta se abrió otra vez y Kikwang salió de la mano con la amiga de Lizzie, seguida de la misma. Leo se quedó boquiabierto y paralizado al ver a Lizzie. Aquella noche estaba más guapa de lo que su mente la recordaba. Al ver su sonrisa, su corazón dio un salto, situándose en su garganta.

Sin pensarlo, dejándose llevar, sus piernas empezaron a caminar hacia Lizzie, hasta situarse frente a ella. Cuando Lizzie se dio cuenta de su presencia volvió a reaccionar como siempre lo hacía. Sus mejillas se ruborizaron y clavó su mirada en los ojos de Leo. Además, Leo observó que Lizzie agarró el brazo de su amiga, nerviosa, lo cual le divertía pero tuvo que obligarse a retener una sonrisa. No quería que nadie más la viera, solo quería darle ese privilegio a Lizzie.

- Hola, Leo. -dijo Kikwang devolviéndole al mundo real. Leo le saludó con una pequeña reverencia y una sonrisa tímida. Kikwang era un buen tipo. Simpático, sincero, y que sobre todo respetaba el espacio personal de Leo. Además, le había concedido un viaje en coche con Lizzie.-¿Llevas mucho tiempo aquí? -preguntó Kikwang.

- No. Un poco. -mintió Leo. No veía necesario decir la verdad, que llevaba un buen tiempo esperando poder ver a Lizzie. Aquello no pegaba con la imagen que se había formado de él mismo.

- ¿Quieres que te acerque a tu casa? Voy a llevarlas a su piso. -le ofreció Kikwang.

Lizzie dio un pequeño salto en reacción a las palabras de Kikwang, haciéndole cada vez más difícil a Leo controlar una sonrisa abierta. La verdad era que la oferta de Kikwang era muy tentadora, ya que la última vez no había podido averiguar dónde vivía Lizzie. Pero no quería compartir ni un solo segundo a Lizzie. No en aquel momento. No después de haber esperado tanto. Ahora estaba ansioso de poder estar a solas con ella.

- Prefiero acompañar yo solo a Lizzie. -dijo Leo clavando su mirada en la de Lizzie. Ella se quedó boquiabierta, sorprendida por la sinceridad y brusquedad de Leo.- Si no te importa. -añadió Leo para suavizar sus palabras, con miedo de que Lizzie se negara.

- ¿Qué opinas, Lizzie? -preguntó Kikwang.

Lizzie buscó con la mirada a su amiga, quizás en busca de respuestas, quien le hizo un gesto con la cabeza dando su aprobación y consentimiento.

║ El Chico Selfie ║ ©Where stories live. Discover now