║ El Chico Selfie ║ ©

Bonus Capítulo 14☆

Yoseob se sentía un poco estúpido. Había caído en una de las mismas trampas que había hecho para Andrea y Kikwang. Cuando se dio cuenta de que Kikwang no estaba herido y que además Jihun estaba con él ya era demasiado tarde para huir.

Su pulso se disparó por los aires al hacer contacto visual con Jihun. Hacía meses que no le veía ni sabía nada de él, pero seguía teniendo el mismo efecto en su cuerpo.

Aunque trató de enfadarse con Kikwang por haberle engañado, no podía hacerlo. Sabía que Kikwang lo había hecho por él. Y no podía montar ningún número delante de Jihun.

- Solo hablen un rato. -dijo Kikwang- Yo estaré dentro, podéis hablar tranquilamente. -añadió antes de darle un pequeño apretón en el hombro a Yoseob y marcharse, dejando a solas a ambos chicos.

Jihun dio un paso hacia Yoseob, este apartó la mirada pero no retrocedió.

- ¿Has estado comiendo? -preguntó tímido Jihun. Oír su voz de nuevo hizo que el corazón de Yoseob latiera con fuera.

- Sí. -murmuró Yoseob mirando fugazmente a Jihun antes de volver a apartar la mirada. Estaba más nervioso que en su primera cita.

Jihun inició una conversación con Yoseob de temas cotidianos, como si fueran un par de amigos que hacía tiempo que no se veían. Como si nunca hubiera pasado nada entre ellos. Como si a ninguno le doliera estar frente al otro. Pero Yoseob solo le respondía con monosílabos y frases cortas, no estaba dispuesto a abrirse. Jihun le miró con melancolía.

- Te he echado de menos. -dijo Jihun dando otro paso más hacia Yoseob.

Yoseob abrió los ojos de par en par, sorprendido ante sus palabras. Abrió la boca con la intención de decir algo, pero la dulce sonrisa y la melancólica mirada de Jihun se lo impidieron. En su lugar, solo pudo abrir y cerrar la boca varias veces como un pez fuera del agua.

- Se que te preocupa que Dujun no acepte nuestra relación, pero a mí me da igual. No me importa lo que diga él. -dijo Jihun agarrando a Yoseob por los hombros. Era el primer contacto físico que ambos tenían desde que cortaron, y eso hizo que Yoseob sintiera una corriente eléctrica al sentirlo. Pero Yoseob no quería permitirse sentir.

- No podemos estar juntos. -murmuró Yoseob notando cómo un nudo se formaba en su garganta y las lágrimas empezaban a agolparse en sus ojos. Acto seguido apartó las manos de Jihun de sus hombros con un rápido movimiento. Jihun dio un paso atrás, sorprendido.

- Yo todavía te amo. -confesó Jihun haciendo que Yoseob sintiera una patada en el estómago.

Yoseob no había olvidado ni uno solo de los momentos que pasó con Jihun. Y tampoco había podido deshacerse de sus sentimientos por él. Le seguía amando como el primer día. Pero era inútil.

- Nunca podremos estar juntos. -sollozó Yoseob tras mirar directamente a los ojos de Jihun, que estaba visiblemente decaído.

- ¿Por qué no? -preguntó Jihun mientras sus ojos se ponían igual de rojos que los de Yoseob- Yo te amo. ¿Tú no me amas?

- ¡Claro que te amo, Jihun! -exclamó Yoseob dejando fluir las lágrimas, cayendo de rodillas al suelo. Jihun se arrodilló frente a él y le abrazó. Yoseob dejó salir todas sus lágrimas y, con ellas, todos sus sentimientos reprimidos.

- ¿Entonces cuál es el problema? -sollozó Jihun liberando a Yoseob de su abrazo después de varios segundos.

- Dujun, Beast, tu carrera... -murmuró Yoseob antes de limpiar las lágrimas que descendían por sus mejillas- Todo se vería afectado.

- ¡Me da igual! -exclamó Jihun- No me importa lo que la gente diga de nosotros. Nada podrá cambiar mis sentimientos por ti. -añadió antes de robarle un beso a Yoseob.

Los ojos de Yoseob se abrieron como platos por la sorpresa. Tardó dos segundos en reaccionar y apartó a Jihun con un golpe en el pecho. Jihun lo miró con unos ojos llenos de tristeza.

- Supongo que esto es un adiós. -susurró Jihun dedicándole a Yoseob una triste sonrisa.

Yoseob no podía aguantarlo más. Se levantó rápidamente del suelo y caminó con paso firme hacia el interior de la casa. No podía volver siquiera a mirar a Jihun, pues su corazón estaba desgarrándose y amenazando con terminarse de romper.

Su amor por él no era lo demasiado fuerte como para poder defenderle. Y lo último que quería era que la carrera de ambos se viera afectada por su culpa. Yoseob seguía creyendo que no estaba a la altura de ser la persona ideal para Jihun.

Cuando Yoseob se subió en el coche de Junhyung y llegaron a la autopista, Yoseob dejó caer su cabeza contra la ventana. Todos había intentado animarle, Andrea incluso lo había logrado. Por algo era una de sus mejores amigas.

Pero aún así, Yoseob no podía dejar de pensar en Jihun. Además, parecía que se había vuelto más atractivo si aquello podía ser posible.

Aún sentía en sus labios la dulce presión del beso que Jihun le había robado. Siendo Jihun, aunque fuera un beso tan forzado para Yoseob significaba mucho.

Andrea podía tener razón. A lo mejor debía permitirse ser feliz con Jihun. Aunque eso supusiera problemas para sus amigos. Dujun tendría que aceptarlo.

Yoseob no dejaba de suspirar y revolverse en el sitio. Estaba incómodo e inquieto. No sabía qué hacer, ya que las respuestas que le daban su corazón y su cabeza eran diferentes.

Cuando llegó a su piso, fue directo a su habitación y se dejó caer en la cama sin siquiera cambiarse de ropa. Sacó su móvil para leer un mensaje de Kikwang, que le informaba de sus avances con b2uty, como le había empezado a llamar Kikwang a Andrea. Una sonrisa iluminó el rostro de Yoseob. Se alegraba muchísimo por sus dos amigos. Y se le había ocurrido una extraña idea.

Cerró kakaotalk y abrió su instagram. Acto seguido tecleó el nick de usuario de Jihun y abrió su última foto, subida hacía escasos minutos.

Ahí tenía su respuesta. La respuesta que no lograba encontrar entre su cabeza y su corazón. Había estado ahí todo el tiempo.