Protegida e Intocable. (Editando)

51. ¿Esto es un secuestro?

(Keyla)

Salí de casa, dispuesta a caminar y despejar mi mente.

Me sentía tranquila caminando y viendo a las personas correr, niños reír y  parejas... manosearse...

Asqueroso.

Escuchaba unas de mis canciones favoritas.

One love- Justin Bieber.

Me encanta.

Salí del parque directo a doblar la calle donde regresaría a mi casa.

Mis padres no quieren que salga mucho, desde que se escuchó que habían matado al jefe de los criminales en la zona donde estábamos.

Pasé por un lugar completamente sólo, un audífono cayó de mi oreja y fue en el momento donde justo se escuchó un carro que venía a alta velocidad. Frenó bruscamente enfrente de mi abriendo la puerta de inmediato y meterme de una al auto.

Maldición.

¿Esto es un secuestro?

(Josué )

Esta mañana partiría mi vuelo, tomé mis maletas . Era hora de regresar a casa.

Subí al avión,  mi nerviosismo se hizo presente. No me esperaba regresar tan pronto y ver a...Keyla.

Oh pequeña Keyla no te he podido superar, no puedo y ni podré hacerlo. En estos meses ambos nos hemos destruido, tú por mi decisión y yo por haberte destrozado.

Mi intención nunca fue que estuvieras mal, sólo intentaba protegerte y seguro no lo hice de la mejor manera.

Pero sentí que no tenía otra opción.

Ahora estas en peligro debido a mi, debido a que te involucre en esto sin querer.

(Keyla)

—Keyla...— escuché una voz familia.

— Oh Dios... terrible susto me diste Isaí.

Sonrió.

— Disculpa, debía hacerlo.— inmediatamente se puso serio.— necesito alertarte de algunas cosas y en este momento sospecho de todos.

Me tensé.

— ¿De que estas hablando?

— Josué me pidió...— lo interrumpi.

— Tengo suficiente de Josué. — Estaba por abrir la puerta.

— No, Keyla escucha por favor.— me detuvo.

Lo miré por unos segundos, estaba harta de escuchar de Josué,  no quiero escuchar su nombre, no quiero saber de él. Me ha destrozado y no puedo olvidar que me dañó.

— Continúa — accedí.

— Regresé porque él me lo pidió,  hablé contigo aquella vez por esa razón y...— interrumpi de nuevo.

— Espera... ¿Me hablaste por que él lo pidió?

— Lo hice por él me lo dijo y porque yo quise hacerlo. Sabes perfectamente que yo encuanto a ti soy capaz de todo...— me incomodó,  sabía a lo que se refería — A pesar de todo lo que pasó con nosotros Keyla.

— Está bien...— miré hacía otra parte.

— Se que son cosas que te incómoda, pero tienes que saber que yo no te odio Keyla, siempre me importaras.

— Isaí, yo...— Esta vez él me interrumpió.

—Lo se Keyla, se que lo dirás  de nuevo. No me quieres lastimar,  que sólo me vez como un amigo. Han pasado 7 años desde la primera vez que te vi. No he podido olvidarte, a pesar de que no fuimos nada. Te quise y te seguiré queriendo y Amando como  todo. Tu fuiste todo para mi, siempre quise ver una sonrisa en ti. Y aunque me duela se que te enamoraste de Josué,  nunca vi tanto entusiasmo en ti hacia alguien como lo hacias con él, lo mirabas de una manera tan especial— agachó la mirada— Que no hubiera dado porque me miraras de esa manera.

— Lo siento, se que Josué no lo merece. — admití.

— Duele admitirlo, pero él lo merece. Se preocupa mucho por tí. Keyla... él está asustado. Hay alguien tras de ti, y sospecho que Nayeli está involucrada.

— ¿Nayeli?... ella nunca me haría  daño...

— ¿Hace cuanto no la vez? ¿Hace cuanto no hablas con ella?

— Hace semanas... pero seguro está ocupada.— lo miré con tristeza y confundida.

— Keyla, no estamos seguros. Sólo ten cuidado.

Estaba por responder pero el celular de Isaí sonó.

Miró su celular e inmediatamente me vió a mi, intentando decirme algo.

Contestó.

Luego de unos segundos, de escuchar a la persona con la que estaba hablando respondió.

— Estoy con ella.

¿Está hablando de mi?

—No creo que quiera escucharte.

respondió de nuevo.

Lo miré intrigada.

Luego de unos segundos, me miró nuevamente y me entregó su celular.

— Josué quiere hablar contigo.

— Yo...— estaba por negarme pero pude escuchar su voz a través del celular.

— Keyla por favor, necesito hablar contigo.— le escuché decir.

Una sonrisa sarcástica apareció en mis labios.

— Ahora si lo necesitas— respondí riendo sarcástica.

— ¿A que te refieres?

— Nunca llamaste Josué,  nunca quisiste preguntarme como estaba o como me sentí — sentí una patética lágrima recorrer por mi mejilla, Isaí sólo me miró con tristeza.— Estuve esperando una señal de ti, no me importó tanto el estar lejos. Sabía que era para protegernos ambos y lo entendía,  pero al menos escuchar tu voz por lo menos cada semana pudo tranquilizarme. Pero nunca quisiste, no te importé.

— No digas eso Keyla...

— Eso es lo que entendí al no saber nada de tí Josué.

— Siempre pregunté por tí,  le preguntaba casi todos los días a Nayeli por ti.  Sólo que luego de semanas ella no quiso darme ningún dato de ti. Siempre colgaba no me quería contestar — le escuché decir.— Intenté comunicarme Keyla,  no sabes lo desesperado que estaba.

— No lo sabía...

— Así que no pienses que no me importas.

— Josué...— susurré.

— Keyla...— le escuché decir.

— Te extraño.— admití.

— Mi niña hermosa — sonreí al escuchar, después de mucho tiempo.— te extraño, te necesito como no te lo imaginas. Debo irme, te prometo que nos veremos pronto.

— Está bien.

— Keyla...

— ¿Sí?

— Te amo.— le escuché decir, colgé inmediatamente .

Eso no me lo esperaba.

¿Lo dijo en serio?

¿Josué me ama?

Y yo...

Por Dios, nunca he amado a alguien. No conozco ese sentimiento, así como no conocía todo eso que él me hacía sentir.

Dicen que amar a alguien era quererlo así tal como es, con sus imperfecciones.

Josué era eso, imperfecto.

Y yo lo quiero tal como es, no me importa si es criminal,asesino. Puede ser eso y más, pero se que detrás todo eso... hay una persona sensible, y amo eso de él, no puede ocultarme nada.

Su mirada, su mirada me decía todo.

Así que si...

Si lo amo, lo amo como él me ama a mi.

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