Protegida e Intocable. (Editando)

15.Te lo prometo mi niña

(Keyla)

Había pasado ya una semana, seguí con mi promesa.

No lo busqué.

Hoy era día que tenía que visitar a mis abuelos.

Iba con mi amiga a casa de mis abuelos. Ella dijo que quería llevarme ya que teníamos tiempo de no estar juntas.

Salimos de casa y vi al chico... si al chico que me ha vuelto loca todo este tiempo.

Josué...

No supe que hacer cada vez estábamos más cerca y todo regresó de nuevo, empecé a temblar, mis manos sudaban, mi corazón estaba por salirse de nuevo.

¡Oh Dios! ¡Por favor no! pensé.

Mi amiga volteo a ver y sonrió.

—Ahí está—dijo mirándome.

—Lo sé—dije nerviosa —y se está acercando—dije asustada

—Tranquila..

Tomé mi celular, no sabía qué hacer, estaba muy nerviosa y escuché saludar, era él.

—Hola.

—Hola JO-SU-E —Dijo mi amiga resaltando su nombre para que yo pusiera atención, debido a que no lo hice me dio un codazo

—Hola— dije asustada.

El solo rió

—Ya regreso- dijo él y fue a una tienda que estaba cerca.

—Está bien— respondimos en unísono

Cuando él se alejó vi a mi amiga y ella volteo a ver para otra parte como si nada.

—¿Este era tu plan? —dije seria

—¿Te gusta? —dijo riendo.

—¿COMO SE TE OCURRE? —respondí gritándole.

—Tranquila mujer —rió

— ¡Me hubieras dicho, me hubiera arreglado más!

—No te preocupes, así te ves perfecta nena — respondió él justo atrás de mi, me asusté.

—Oh... Gracias— dije apenada.

Lo miré y sonreí... era la primera vez que lo tenía cerca, después de tanto tiempo.

—Y bien... —dijo mi amiga rompiendo el silencio que se había formado —¿Irás? —dijo mirándolo y yo lo vi confusa.

—¿Cómo? ¿Don...donde? — dije asustada

—Antes de irnos a donde tus padres iremos a comprar — Respondió Nayeli —ahí es donde él nos acompañará.

—¿En serio? — respondí sorprendida.

— Sí— afirmó él sonriendo.

Bien, ahora si que mataré a esta tonta.

¿Cómo se le ocurre hacer planes sin decirme?

Fuimos y mientras mi amiga compraba yo estaba viendo que llevar, me había dejado sola con él ¡Genial! quiere que me muera, estaba demasiado nerviosa, en serio.

—Y bien... — dijo él intentando entablar una conversación

—¿Si...? — dije intentando evitar su mirada.

— ¿qué tienes? — preguntó mirándome confundido.

—Nada...solo que— no sabía que decir, estaba muriendo, literalmente lo estaba —me siento un poco rara—dije y él rió.