M.H ~Parte 1 -2 -3 ~ [En Edición]

II

No responde. Permanece de pie frente a los pies de la cama, con medio rostro oculto por la oscuridad y la otra mitad apenas visible por la claridad entrante desde la ventana. Aún así puedo ver su sonrisa, una sonrisa perversa, muy diferente a la que conozco.

-Chris... -susurro apretando mas los brazos contra mi pecho. Mi boca se seca cuando su lengua juega entre sus dientes perversamente, con una intención sucia.

Ladea su cabeza un poco y rodea la cama, en silencio, solo oyéndose mi respiración cada vez más irregular y acelerada.

¿Qué es todo esto?

-Christian... háblame... ¿qué haces aquí? -me animo a preguntar.

Lentamente se detiene a unos pasos de mí y lleva su indice a los labios pidiendo silencio.

Enmudezco inexplicablemente.

Se sienta en la cama hundiendo el colchón y retrocedo por instinto. Esto es muy extraño, él se comporta muy extraño.

-Shh... guarda silencio. -Dice por primera vez con su voz ronca.

Ahogo un grito al sentir su dedo ascender desde mi pantorrilla lentamente por la extensión de mi pierna. Aferro mis manos a las mantas olvidando por completo lo que quería decir. Mi cuerpo parece reaccionar con el tacto que sube quemándome la piel desde adentro. Al llegar a mi muslo su mano completa se pega a mi y de un momento a otro me arrastra hacia abajo logrando dejarme acostada. En tan solo segundos que logro parpadear él está sobre mi con ambas manos a los lados de mi rostro. Mirándome intensamente poniendo mis sentidos nulos fácilmente, sonriendo perverso, como si no fuese realmente el Christian que creía conocer.

-Es bueno saber... -roza con su nariz la mía haciendo un pequeño recorrido por mi mejilla izquierda- ...que ahora que sabes como soy... -sus labios alcanzan a tocar los míos quitándome un jadeo y haciendo que cierre mis ojos incapaz de reaccionar-...no necesito fingir contigo. Sé lo que te gusta. -Concluye evadiendo mis labios hasta que siento su lengua correr por mi mentón hasta finalmente sentir como sus labios presionan, succionan y muerden mi cuello.

Abro los ojos rápidamente ante la sorpresa que me hace arquear la espalda y gritar al no poder respirar. La claridad de la habitación me recibe quemándome los ojos.

-¡Mierda! -Grito y me tapo la cara con la almohada.

____

-¡Es en serio! -exclama Morgan- Los extraterrestres andan entre nosotros simulando ser humanos. ¿Acaso no ven los documentales? Nos estudian para descubrir nuestras debilidades y en un abrir y cerrar de ojos ¡Boom! Nos asesinan a todos.

-Alguien mira demasiada programación basura emitida por el Estado para desviar a la gente de los verdaderos problemas de la realidad. -Dice Lucas sonriendo mientras toma su café.

-¡Oh, vamos! Si uno intenta raptarte no te ayudaré. Sólo me reiré en tu cara y me iré a mi refugio. -Dice cruzándose de brazos como niña pequeña.

-Y tiene un refugio, Dios mio. -Dice golpeando su frente con la palma mientras niega.

Todos reímos menos ella que rueda los ojos al no recibir apoyo a su gran teoría conspirativa.

Desvío la mirada hacia la ventana viendo el sol descender de a poco. El cielo forma un hermoso espectáculo, creando arte con todo tipo de colores tiñendo las nubes, pero mi atención se centra involuntariamente en un BMW negro que avanza lentamente por la calle.

Calma, no es él. No todo maldito BMW negro que vea es él.

Trato de convencerme de ello repitiéndolo una y otra vez en mi mente, pero ya es tarde. Mi corazón se acelera estúpidamente ansioso.