Capítulo 24

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-¿Violada? -Susurro mirando fijamente la imagen.

Una joven, aparentemente rubia, tendida sobre las mantas rosas de lo que parece ser una casa normal, de paredes blancas en su tiempo -ya que ahora unas cuántas manchas de sangre las decoran dramáticamente- desnuda y abierta... vulnerable...

-Dios... no puedo... no puedo creerlo... -Lele vuelve a su lugar limpiando su boca con papel higiénico.- ¿Cómo... ? Oh Dios...

-¿Entonces saben quién es el asesino? -Pregunta Thom.

-En el artículo del diario de ésta mañana dijeron que si el asesino no ha usado protección, puede que logren extraer ADN. -Afirma Cris asintiendo.

-Pueda ser que lo atrapen... ¿Quién es capaz de dejar de esa forma a una pobre joven? ¡Dios! ¡Es que ese tipo está realmente loco! -Exclama ella cubriendo su rostro.

-¿Dónde la encontraron? -Pregunto volviendo a mirar de reojo la imagen.

-En su casa -responde Cristopher- y eso es otra pista para atraparlo. ¿Qué si ella conocía al asesino? Es decir, ¿Cómo pudo ingresar a la casa sin forzar las puertas o ventanas? Además no tenía indicios de haber luchado con el agresor o algo similar... al menos esa es la información que brindaba el artículo.

-Buen punto. -Acota Thom.

Asiento estando de acuerdo. Quizás él cometió el peor error al haber... abusado a esa joven. Quizás se ha descuidado y la Policía ya tiene el ADN.

La esperanza brota.

Mientras Thom, Lele y Cristopher hacen sus conclusiones, miro a Christian que ha permanecido en silencio. Su vista vaga perdida en su teléfono celular mientras da lentos tragos a su café. Al parecer no le interesa en absoluto todo este asunto, aunque debería. Vamos, ¡Un asesino casi me mata!

Oh, pero esto no quedará así. Tú y yo tendremos una larga charla Christian.

_____

Lo primero que hago al volver a casa es subir a mi habitación y cambiarme de ropa solo como excusa para tomar valor y enfrentarlo como se debe. Sin miedo, decidida e intimidante.

Terminarás cayendo a sus pies.

¡Agh! ¿Desde cuándo mi conciencia no me ayuda?

-Vamos Emma, sólo dirás lo que tienes que decir y...

-Emma... -volteo drásticamente hacia la puerta de mi habitación viéndolo recargado en el umbral.

-¿S-si?

¿Ves? Te lo dije.

-¿Podemos hablar?

Asiento terminando de ponerme las zapatillas y me dejo caer en la cama. Él avanza lentamente con las manos metidas en los bolsillos de sus pantalones y en mi mente esa simple acción se ve como si un importante modelo internacional estuviese desfilando en mi habitación. ¡Maldita imaginación!

-¿De qué quieres hablar? -Pregunto tratando de salir del trance.

Se sienta en un extremo de la cama y suspira.

-De nosotros, de lo que nos sucede. -Dice mirándome a los ojos al fin.

Oh no, no quiero comenzar con eso de nuevo. ¿Por qué mejor no hace las cosas fáciles y hace de cuenta que nada ha sucedido?

¿Porque te dijo que él no ocultaria mas lo que siente?

Cierto.

-No hay nada de que hablar Chris.

M.H ~Parte 1 -2 -3 ~ [En Edición]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora