Capítulo 7

53K 2.7K 438
                                    

-Emma...vamos, despierta... -Mis ojos pesan pero aún así los abro lentamente. -Vamos dormilona, llegarás tarde al Instituto.

¡Oh! Dormir con él no va a volver a suceder.

Mi mente me reclama con voz sarcástica.

-No quiero ir. -Digo tapándome la cabeza con las sábanas ocultando mi notable vergüenza por no haber prevenido este momento.

-Bien, puedes quedarte durmiendo.

Me incorporo rápidamente mirándolo atónita. Él sigue en su lugar, sonriendo como si supiera a qué se debe mi sorpresa.

-¿Dejarás que me quede?

Bien, ¿Qué puede llegar a pedirme? Nunca me ha dejado faltar.

-Sí, no te preocupes por mamá, no le diré nada. -Dice levantándose para caminar hasta la puerta y apoyarse en el marco.

-No entiendo... ¿cuál es el trato? -Pregunto desconfiada y me cubro mas con las mantas al sentir frío.

-No hay trato hermanita.

Y aquí va de nuevo.

-Bien... ¿gracias? -Respondo aún con el ceño fruncido.

Me guiña su ojo antes de salir de la habitación y me dejo caer hacia atrás tapando mi rostro con la almohada.

¿Qué significa todo esto? Primero lo de anoche y ahora su inexplicable compasión conmigo al dejarme quedar durmiendo sin ir al Instituto.

Oh presiento que algo grande se viene, y siendo sincera no estoy para nada preparada.

...

Pasé toda la mañana en su habitación escondida de Dori para que no me descubra. Obviamente se enojaría si se entera que falte. Chris se quedó conmigo todo el tiempo ya que al parecer no debía asistir a clases. Dudé de que eso fuese verdad cuando me lo dijo, pero me resulta difícil creer que él ha decidido tener una falta en su asistencia perfecta sólo por mí.

Dormí una hora más luego de que Chris se marchó de la habitación, aunque al despertarme lo primero que vi fue a él recargado en la puerta observándome. No pude evitar sentirme incómoda y menos con la conversación que surgió luego.

*-¿Qué sucede?  -Pregunte sonriendo nerviosa.

-Nada. Solo pensaba. -Dijo en un suspiro mientras mantenía la sonrisa plasmada en su rostro.

-¿Se puede saber en qué?

Me senté en la cama y comencé a ponerme las zapatillas.

-En lo hermosa que te ves en mi cama. -Dijo al fin causando que mis movimientos se congelen.

Me costó tiempo llevar mi vista hacia él. Pero no pude responder nada esta vez.

-Anda, levantate. Distraere a Dori. -Dijo al fin saliendo de la habitación.*

Me negaba a salir de la habitación y tener que verlo nuevamente. Esa frase quedó en mi mente durante todo el día. Pero debía entrar en algún momento a la casa si es que había asistido a clases, por lo que en un momento de distracción en el que Dori salió a la parte trasera a limpiar entré a la cocina e hice como si recién había llegado. No sospechó nada así que le agradecí con la mirada a Chris que me miraba divertido mientras almorzábamos.

Bajo hacia el salón de gimnasia y dejo la toalla para secarme el sudor a un lado. Ha pasado mucho tiempo de que no hago mi rutina de ejercicios y ya siento culpa por dejarme estar. Mamá me había instruido bien y estaba conforme con mi voluntad en continuar a su ritmo. Pero desde que comenzó a ausentarse por cenas u otros motivos del trabajo, he abandonado todas las rutinas que había comenzado. Ella estaría algo decepcionada si lo supiera, pero como he dicho, no tiene idea de lo que sucede en esta casa.

M.H ~Parte 1 -2 -3 ~ [En Edición]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora