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Hubo un momento en el que estábamos Julián y yo en la cancha, contra Shawn y Maxi. Básicamente Julián estuvo haciendo el trabajo. Luego, Él le disparó a Maxi, no obstante, al mismo tiempo Espíndola le disparó a Julián. Quedamos sólo Shawn y yo.

Me escondí atrás de un paredón y se escuchó su voz desde lejos.

-¡Andá lindura, ya sal de dónde sea que estés!- y luego se escucharon las risas.

No contesté nada, y me subí a una especie de árbol sin hacer tanto ruido.
A lo lejos pude ver a Shawn caminando de lo más tranquilo, justo yo estaba detrás de él.
Sin que él se dé cuenta, me apoyé sobre una rama, ubiqué el arma con bolas de pintura, y disparé. Justo en el blanco.

Una mantequita.

Vi cómo se giraba sobre sus pies sin entender qué y cómo había sucedido. Se escuchó la chicharra que indicaba que el juego había terminado. Bajé del árbol y le extendí la mano con una sonrisa orgullosa.

-Buen juego, Mendes.- digo estrechando mi mano con la suya.

-Igual, Sabatini.- dijo aún confundido.

-Hmm, un consejo. No subestime NUNCA a una mujer.- digo seria. Es un muy buen consejo.
Le dije esto, ya que antes lo había escuchado hablar con los de su equipo sobre que iban a ganar fácil por tenerme a mí de contrincante.
Ja, idiota.

-Sigo pensando que fue pura suerte.- me dijo mientras me miraba desafiante.

-¿Ahh, sí?- pregunto cruzándome de brazos y con la mirada con odio.

-Sí.- me respondió arrogante y con una sonrisa curvada en su rostro.

-Bueno, lo que digas...- y justo cuando estaba a punto de soltarle la mano, le doble el brazo, haciendo que haga una mueca de dolor, por lo que bajó la cabeza y me ayudó a que lo pateara con la rodilla en la cabeza; acto seguido tiró la cabeza hacia atrás por el golpe, por lo que lo patee en el pecho y calló en seco al piso. -Repito, Mendes. Nunca subestimes a una mujer.- le digo mientras le ofrezco mi mano para que se levantara. Seguramente él quería tirarme, así que fui más rápida y giré al rededor del brazo, por lo que él quedó atrás mío y lo tire hacia adelante sobre mi hombro. -Estúpido. ¿Cuándo vas a aprender? Más te vale cuidar a Tofu, sino, ya te puedes considerar hombre muero. (Te quiero, TofuOliva )- ¿Vamos, Julián? Muero de hambre. Ah,Shawn, creo que sería mejor que sigas cantando sobre puntos de sutura (Stitches); y que no abras la boca para idioteces. Así te ves... Mejor.

Serrano me miraba con asombro. Obviamente, nunca se habría imaginado que la linda y dulce Sabatini haría este espectáculo.

-¿Pasa algo?- pregunto.

-¿Dónde aprendiste eso?- me respondió con una pregunta, mientras caminábamos hacia la salida.

-Hago judo (arte marcial japonesa) desde que tengo 7 u 8 años. Lo aprendí obligada, pero sirve de mucho. ¿Por?

-Es que.. WOW. Nunca me imaginé que podrías hacer eso.

-No lo tenía planeado... Pero qué se va a hacer.- le explico.

-Hmm... Por cierto, ¿Dónde estabas escondida al final?- me preguntó curioso.

-Estaba trepada al árbol. Justo lo vi delante de mí, y disparé. Estaba a espaldas del árbol.

-Ahh. Estuvo increíble.

-Gracias...

Cuando estábamos a punto de salir del acampado, me tropecé y cuando estaba apunto de caer, Julián me agarró de la cintura, por lo que caí arriba de él.

Nos reímos por un rato de mi torpeza, hasta que hubo un silencio entre nosotros. Él tomó la iniciativa de mirarme los ojos y luego a los labios. Y así sucesivamente, hasta que yo también lo empecé a hacer.

Y... Me besó. Fue más un chape, sin lengua.

Love me, Love youWhere stories live. Discover now