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Se ve que él se percató de mi mirada, por lo que se dio vuelta y me miró, me miraba de una forma tierna. A lo que me sonrojé; y obviamente mi mejor amiga se percató de esto.

-¿Qué onda vos con ese pibe, eh?

-¿Eh? Ahh, nada. Me lo crucé en el aeropuerto.

-Te aviso; él, como seguro ya sabés, es Julián Serrano. Chico que tiene babeando a un 80% de las chicas. No estoy en esa lista, obvio. Y como toda escuela de artes, hay de todo. Trabas, Gays, Lesbianas. Así que supongo que te va a gustar estar acá.

-Sí... Eso creo también yo. Además que ODIO eso de las discriminación por gustos. Osea, no es que sea racista ni nada, solo que yo odio a la mayoría del mundo. Jajajaj. Pero eso no quiere decir que no me pueda caer alguien bien.

-Buen punto. Vamos, te llevo a tu habitación.

-Dale. ¡A! ¡Esperá! Me olvidé que me quedo en lo de mi tía. Uh, tengo que avisarle al decano.

-Que lástima... Hubiese sido lindo estar más tiempo juntas.

-Sí, pero tranquila nos vamos a ver todos los días. ¿Me espera un minuto que hablo con la secretaria del decano así le avisa?

-Dale.

Fui a avisarle a la señorita. Era simpática, se veía que no era tan mayor, seguro de uno o dos años mayor. Se llama Abril, igual que la chica del grupo, y mi enfermera.

Fui a buscar a Azu, estaba sentada con las valijas y poniéndome el chip en el celular, un amor.

-Listo Ori.

-Gracias Azuuuuu. Bueno, tengo que llamar a mi tía para avisarle que ya estoy en New York.

Y luego de decir eso, escucho una voz atrás mío.

-Disculpa, ¿vos sos Oriana Sabatini?

-Sí, ¿Por? ¿Nos conocemos?

-Sí, bueno, en realidad no; soy Abru, la del grupo de Whatsapp.

-¡¡¡¡ABRILLLL!!!! No puedo creer que seas vos!

-JODEME que sos Abril, y nunca lo supe.

-Espera, ¿Azu, vos estás en la Mafia?

-¿Vos lo estás?

-Sí. Yo soy la que todo el tiempo manda un mensaje y separes desaparece.

-Chicas! Dios Azu, Ori, no puedo creer que las conozco.

-Yo no puedo creer que ustedes estuvieron en el mismo edificio y nunca se dieron cuenta quiénes eran.

-Mucha razón.

-Sí, demasiada.

Tiempo más tarde, ya estaba en la casa de mi prima con mi tía y su gato. Extraño a mi hurón.

Love me, Love youWhere stories live. Discover now