Love me, Love you

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-Mucho gusto, vos no sos de Nueva York, ¿no?

-Nono, soy de Bueno Aires, supongo que por tu tonada sos del interior. ¿O me confundo?

-No, no te confundís...-de repente se veía muy nervioso. No entendí, pero él se me hacía muy familiar...

-Contam...- no puede terminar ya que una azafata (las personas que trabajan en aviones) nos interrumpió.

-Disculpen interrumpirlos, pero le pido por favor que tomen asiento, no queremos que ocurra ningún accidente. ¿Hay algún inconveniente?

-No, todo tranquilo por acá. Muchas gracias.-le contestó con una mirada pícara Julián a la mujer; no sé porqué, pero me agarró un poco de celos...

Ella era alta, parecida a mí, rubia y ojos encandilantes. Muy fácil de estar envidiar; miraba a Julián con una cara de que lo deseaba, y mucho.

Julián no se quedaba atrás; parecía una lucha de miradas, entre quién hace el primer paso entre ellos.

Me siento muy incómoda, no es una situación en la que me gusta estar. Por lo que toso, falsamente, para poder llamar la atención de alguno de los dos, sino que se presentan. Esto no podía ser peor, ¿No?

-Soy Julián, ¿Nos conocemos?

-Sabrina, me sorprende que no te acuerdes mí...

-¡¿Sabrina?! ¿Qué hacés tanto tiempo?- le preguntó con alegría.

-Tardaste en caer; con que pensaste que iba a ser una de tus gatas?-esperen, ¿QUÉ?

-Shh, noooo. Nunca, solo hablaba con Ornella ¿No?- con que ahora me da bola, y de la peor manera.

-No. Soy Oriana, mucho gusto a los dos.- les digo con una sonrisa falsa.