"Ojos que mienten" (Camren)

Capítulo 20

"Tú, puedes ir ahora contándonos las cosas que has vivido" fueron las palabras que interrumpieron a la castaña sobresaltando su estado cardiaco cuando entro el ruido de golpe a su oficina, Dinah seguida de su amiga Normani quien cerró luego la puerta después de su entrada. "Lo único que he sabido de ti después de este fin de semana fue hoy en la mañana tu mensaje diciendo que no podrías recogerme porque tu alarma no había sonado, ¿puedes decirme donde está la verdadera dueña de éste cuerpo y que hiciste con ella?" preguntó la polinesia ofendida por el comportamiento de su amiga y pronto imito los pasos de la morena de pelo negro al sentarse en las sillas frente al escritorio. "¿No vas a responder?" preguntó nuevamente cuando el silencio se apoderó del lugar y una Camila al parecer confundida detenía con sus dientes aún un lápiz.

"Mila, estamos preocupadas por ti, ni siquiera contestaste alguna llamada, no fuiste simplemente a buscarme al aeropuerto" más que reprochar sonó preocupada al comentarlo Normani.

"Chicas... yo... lo siento" por fin habló después de quitar el lápiz de su boca para mirar a sus amigas "lo siento ¿vale?" se disculpó una vez más y ordenó los papeles sobre su escritorio más como una excusa para no mirar a los ojos a sus dos amigas.

"Entonces ¿Qué paso?" cuestiono nuevamente Dinah "ni siquiera fuiste a almorzar, Camila ¿está pasando algo?"

"Nada" negó la psicóloga terminando por ordenar las carpetas y documentos en uno de sus cajones con seguro "Estuve un poco ocupada el fin de semana, algo de ¿vida familiar?"

"Mila, puedes hablar con nosotras, ¿Por qué no has contestado el celular?" pregunto la morena "¿Estabas tan ocupada como para no decirme algo? Hola, he vuelto de mi viaje y quería pasar tiempo con mis dos mejores amigas, una escena con ellas esperando mi regreso hubiese sido la imagen perfecta"

"Lo lamento tanto Mani, he sido una egoísta" se disculpo la castaña mientras fruncía el ceño "¿Puedo compensar esto?"

"¿Como ir por una pizza ahora mismo?" animó Normani a sus amigas.

"No puedo" negó Camila vulnerable "tengo que ir a la clínica...por... mi paciente" pronuncio vulnerable, sintiéndose atrapada con las miradas juzgadoras de sus amigas. "Puedo ir al departamento de Dinah, Dinah ¿podemos hacer una pijamada hoy? Yo invito la pizza" se adelantó a decir cuando la polinesia la miraba fijamente en silencio.

"Escondes algo" pronunció Dinah sin dejar de mirar aquellos ojos marrones.

"¿Qué?" preguntó alarmada la castaña jugando con sus dedos sobre el escritorio, golpeando sus uñas en la madera.

"Mila ¿debemos enterarnos de algo?"

"¿Qué? Chicas... no" negó la castaña.

"¿Debo enterarme de algo?" preguntó Dinah disfrutando de las pistas que le daba su amiga de pronto nerviosa.

"Si no quieres contarnos a ambas puedo dejarlas un tiempo a solas"

"Mani no" negó nuevamente Camila "Chicas, confío en ambas por igual, por favor, no piensen lo contrario"

"Entonces suéltalo" ordenó Dinah.

"Chicas" se escuchó casi como una súplica el susurro de la castaña, dos par de ojos mirándola atentamente mientras el reloj marcaba la hora al parecer con la lentitud que precisamente no quería, no debía ir a la clínica hasta una hora después, su último paciente antes de terminar la jornada en el hospital había cancelado su sesión producto de un resfrío.

"Debemos jugar a adivinar entonces" una impaciente polinesia amenazó.

"Dinah, no la fuerces" reprimió Normani, la persona neutral en este momento, a veces no queriendo ser parte de alguna de las diferencias que solían tener las menores.