Whatever (Yaoi/BL)

44- Veneno

-¿Creéis que Nil estará bien?- Mary avanzaba preocupada acompañada de Jake, Brad y Emmy, que le contestaron con su silencio.

-A ver... estos últimos días ha estado bastante mejor... aunque los ensayos no le han ido muy bien- dijo finalmente Brad, rascándose la barbilla y mirando hacia el cielo en el que el sol empezaba a esconderse.

-Qué mal momento para un exceso de sentimientos...- se lamentó Jake a su lado.

-Y... todo eso por que conoció a Michael...- las palabras de Emmy se tambalearon un poco tan solo con la presencia de Brad, pero no era nada comparado con el día que se conocieron.

-Ugh... aún no puedo entender cómo se pudo enamorar a primera vista de él... ¡si dan ganas de pegarle con tan solo mirarlo! Te mira de una forma...- Jake apretaba el puño mientras hablaba, pero dejó de hacerlo cuando Brad le puso una mano sobre la cabeza y despeinó su cabello para desviar su atención hacia él.

-¡Pues bien que se lo querías encasquetar a Emmy! ¡Menudo gusto tienes!

Jake le apartó la mano con rabia y empezó a darle puñetazos en el hombro que parecían hacerle el mismo daño que una suave brisa- ¡Es cierto! ¡Tengo un gusto horrible! ¡Y pensar que creí que juntarla contigo sería una buena idea!

-Pues esa vez tu instinto fue bastante acertado, sí. Aunque no precisamente para juntarme con Emmy- sonrió con sorna mientras agarraba fácilmente las muñecas de Jake para que dejara de pegarle. Éste, al entender a qué se refería, se puso rojo como un tomate y empezó a gritar cosas sin sentido mientras Brad se reía en su cara.

-¡Eh, parejita! ¡Que ya hemos llegado!- sin haberse dado cuenta habían alcanzado su destino.

Aquel era el último día de vacaciones de verano y, con lo cual, el día de la presentación final de la obra de teatro de Nil y Alan. Aquella vez había bastante más gente que en la demostración. El decorado interior estaba más conseguido también y había mucho mejor ambiente. Por suerte, los chicos encontraron una fila de sillas casi vacía. Emmy se sentó, seguida de Mary, Brad y Jake, éste último protestando.

-¿Por qué siempre me toca sentarme al lado de Brad? ¡No es justo! ¡Yo quiero sentarme con mi querida mejor amiga!- dejó de hablar en cuanto de giró y se encontró con los ojos entrecerrados de las dos chicas, mirándolo amenazadoramente.

-Tú de ahí no te mueves - dijeron al mismo tiempo. Jake tragó saliva y volvió a mirar hacia el escenario.

-¡Las chicas han hablado! ¡Tú te quedas conmigo!- Brad le pasó el brazo por los hombros y le rascó la cabeza con los nudillos. El castaño no dejaba de forcejear y emitir quejas, claramente. Hasta que escucharon la voz apurada de Emmy.

-C-chicos... ¿alguien por favor me puede cambiar el sitio?- hacía fuerza con la mandíbula y tenía un pequeño tic en el ojo. Jake y Mary sabían a qué correspondían esos síntomas, así que miraron el asiento de al lado suyo, que había sido ocupado por un sonriente niño de pelo negro que balanceaba los pies.

A ambos se les desencajó la mandíbula, pero no precisamente por el pequeño... si no por el chico que estaba a su lado mirando el móvil con evidente fastidio.

-¿E-e-empollón?- susurró Mary.

-¿Q-qué hace Michael aquí?- le secundó Jake.

-¿Eh? ¿Michael?- Brad tenía evidente curiosidad por el chico que había hecho sentir mal a Jake y al cual Mary admiraba, pero en cuanto lo vio se llevó una gran decepción- ¿Eeeeeh? ¿Ese tío con pinta de friki?

-Por favor, cambiadme el sitio...- Emmy parecía desesperada, ignorando completamente los comentarios de sus amigos. Mary le cogió de la muñeca y le cambió el sitio sin pensarlo.

-¡Hombre, Emmy! ¡Al final te sientas a mi lado!

La chica se percató de que había cavado su propia tumba. Ahora a su lado estaba Brad. ¿Cómo leches iba a poder estar tanto rato a su lado?

-¡Hola! ¿Tú eres Jamie, verdad?- todos se giraron en cuanto escucharon a Mary decir eso. El pequeño la miraba con desconfianza. El chico que se sentaba a su lado le contestó en su lugar.

-¿Cómo sabes tú el nombre de mi...? ¿¡Tú!?- Michael dejó de prestar atención al móvil y se sorprendió al ver a la sonriente chica que le saludaba con la mano alegremente al lado de su hermano.

-¿La conoces, Mike?- quiso saber Jamie, mirándola fijamente.

-P-podría decirse...- contestó él, entrecerrando los ojos sin despegar la mirada de la chica.

-¡Dime, Jamie! ¿Has venido a ver a Nil con tu hermano?- Mary parecía muy interesada, mientras Brad y Emmy ignoraban aquella conversación por completo y Jake sentía curiosidad desde dos asientos más allá.

-¡Sí! Aunque él no quería venir... ¡Me ha costado la paga de dos meses!- el pequeño ojimiel se cruzó de brazos e hizo un puchero. Mary miró a Michael con una media sonrisa.

-Bueno, pero... al final ha venido, ¿no?

-¡Sí!- Jamie volvió a estar igual de alegre y emocionado. Su hermano mayor frunció el ceño y volvió la vista a su móvil.

-Y, dime, Michael...- éste miró a Mary con los ojos entrecerrados, pero ella siguió hablando como si nada-. ¿Qué tal te llevas con Nil?- Michael resopló y bloqueó su móvil para guardarlo en el bolsillo. Así no había quien se concentrara.

-No pongo en duda que es un canguro ejemplar... siempre está dispuesto a venir y hacerse cargo de Jamie, pero...- se colocó bien las gafas por una de las dos patillas que las mantenían en su sitio-. Es un poco rarito, ¿no?

-¿A qué te refieres?- Brad y Jake dieron por hecho que había sido Mary la que había dicho eso en tono molesto, pero al ver su cara de sorpresa mientras miraba a Emmy comprendieron que no era así.

-¿¡E-Emmy!?- Jake no se podía creer lo que veían sus ojos. ¿Emmy hablando con un chico sin tartamudear, y encima con mala leche? Eso sí que era imposible.

-Pues me refiero a que cuando me presenté se me quedó mirando sin decir ni una palabra. Además, tiene 17 años y parece que tenga la edad de Jamie, ¿A caso es eso normal? Seguro que sus padres lo han mimado demasiado y ahora se comporta como un crío...- por cada palabra que salía de su boca, la ira de Emmy hacia su persona aumentaba. Apretaba los puños a ambos lados de la silla. Los otros tres observaban sin dar crédito a cómo casi se podía ver fuego en sus ojos.

-¿¡Y qué tal si antes de juzgar a las personas te esfuerzas un poco en conocerlas!?

-¿Huh? ¡Pero si no me he metido contigo!- contestó él, extrañado.

-¡Si te metes con Nil, te metes conmigo!

Mary tenía la sensación de que su mejor amiga iba a saltar encima de Michael en cualquier momento y empezaba a ponerse de los nervios al pensar que no podría hacer nada si eso ocurría. Ambos se fulminaban con la mirada sin cesar ni siquiera un poquito. Jamie también miraba a ambos lados, sintiéndose atrapado en aquella batalla mental. Por suerte, la intensidad de las luces empezó a bajar.

-¡Hey, hey, Mike, que ya empieza!- el pequeño tiró de la manga de su camisa varias veces para desviar su atención hacia él y que dejara en paz a la chica con el pelo medio azul de la que no sabía el nombre.

Jake expulsó todo el aire de sus pulmones y se dejó resbalar en la silla, aliviado. Emmy no podía hablar normalmente con nadie a parte de con él y Nil... ¿A caso había encontrado otra excepción? Y si era así... ¿Por qué narices tenían que llevarse mal nada más conocerse?