Había escuchado que las citas en el cine no son una buena idea, pero creo que esa frase es por razones completamente diferentes a esta situación. Cuando terminamos de ver la película, y estábamos por salir del estacionamiento, la camioneta se negó a encender; más tarde nos dimos cuenta que el depósito de gasolina estaba vacío.
Nos habíamos sentado en silencio por varios minutos, hasta que Ashton apareció, asomando su cabeza por la ventana de Luke, preguntando qué estaba mal. Resulta que él y su novia habían ido también a ver la película y reconocieron la camioneta del rubio, aunque Luke me dijo que seguro lo habían seguido, porque conocía a sus amigos.
Ashton se ofreció a llevarnos a nuestras casas; dijo que Luke podía resolver ese problema al día siguiente.
Así que ahí estábamos, en el asiento trasero del pequeño auto del rizado, esperando a que la luz roja que nos detenía cambiara a verde; era la única manera en que Ashton y Lana dejarían de comerse la cara del otro.
-Lo siento, esto no era lo que tenía en mente-se disculpó Luke en un susurro mientras se quitaba la gorra y se pasaba una mano por el cabello. Parecía bastante decepcionado de sí mismo. Y había algo en el perfil de su rostro con esa expresión que me hacía querer abrazarle.
-No importa, me gustó mucho la película.-me encogí de hombros, tratando de hacerlo sentir mejor.
Un asomo de sonrisa apareció en su rostro, aunque no llegó a concretarse. Escuché las bocas de Ashton y su novia separarse; el semáforo estaba en verde al fin. Las luces de la ciudad pasaban detrás de Luke por el cristal de la ventana. De alguna manera, cuando las cosas eran de colores neón y borrosas, la vista era hermosa, y el perfil del rubio en la toma sólo lo mejoraba.
-A mí también.-respondió de pronto.
Yo nunca había sido buena con las palabras. Nunca me salía lo que de verdad quería decir, y tenía que esforzarme demasiado para mantener una conversación viva, por consecuente no sabía que más decir. Supongo que a veces es mejor no decir nada; la mano de Luke se deslizó sobre la mía dulcemente, entrelazando nuestros dedos. Me giré para verlo. Él también me veía, y a pesar de que no sonreía abiertamente, su hoyuelo estaba marcado en su mejilla.
Me alegré de que Ashton y Lana estuvieran parloteando y hubiera música ambientando el viaje, porque si estuviéramos en silencio, tal vez todos en el auto podrían escuchar los latidos de mi corazón.
-Entonces, chicos ¿les gustó la película?-preguntó Ashton. Su voz era diferente a la de Luke, más aguda y parecía que estaba riendo siempre.
-Si-respondí. Luke no le contestó, pero tampoco soltó mi mano.
-No creí que fuera a terminar así. –negó Lana con la cabeza- Pero fue muy lindo.
-Es totalmente de los 90's, había olvidado lo mucho que me gustaban esas películas- completó Ashton-, deberíamos venir más seguido.
-Casi nunca me gustan esas películas, pero esta estuvo bien.
-Podemos volver después si quieres. Aunque hay que ver la cartelera, escuché que va a estar Terminator y sé que no te gusta.
Lana se acercó y le dio un pequeño beso en la mejilla.
-A veces eres el mejor- le dijo y Ashton rió como niño pequeño.
-A mí me gusta Terminator-susurré.
-Terminator es genial- me apoyo Luke finalmente con una sonrisa de lado.
Sentí como la velocidad a la que íbamos bajaba, acto seguido el auto paró. Miré por la ventana, estábamos frente a una casa linda, era alta y color azul claro, o gris, no podía distinguir bien debido a la iluminación. El alumbrado público no era la mejor iluminación para poder definir un color.
