PINK BOY - (SUNJAY) (ADAPTACIÓN)

27

Los padres de Jake llegaron a casa cerca de las once de la noche con obsequios para su único y adorado hijo, sacaron el pastel de la nevera, encendieron las velas y Jake pidió sus tres deseos, luego de algunas fotografías con su familia y amigos se despidieron para ir a descansar permitiéndoles a los adolescentes continuar con la celebración.

Jugaron en la terraza donde Yeonjun, el primo de Jake, terminó tirando las cartas en la mesa quejándose por haber perdido más de diez veces seguidas, al final Beomgyu jugó por él y pudo ganar.

La noche siguió con un divertido y escandaloso karaoke preparado por Jungwon quien les brindó un asombroso espectáculo que cautivó a Riki.

Llevaba tres años enamorado del chico de Hoyuelos.

Tres años siendo su mejor amigo.

Sonriendo al oírlo decir con emoción que se había enamorado de alguien más, aconsejándolo y protegiéndolo cuando le rompían el corazón.

Lo ayudaba a reconstruirlo y lo cuidaba para que lo volviese a entregar.

No tenía oportunidad y tristemente se había resignado.

Un poco más tarde eligieron la película de terror, Jake y Yeonjun entraron a la sala con dos recipientes de palomitas y gaseosas mientras que Heeseung se encargaba de apagar las luces y los demás buscaban donde sentarse, Jongseong y Sunoo estaban separados, uno en cada extremo. La película los atrapó de inmediato, estaban tan sumergidos en la interesante trama que ninguno se movía.

Por su parte Jongseong intentaba mantener la mirada fija en la televisión, estaba tan asustado que sabía que iba a tener pesadillas al dormir.

Quería controlar su miedo pero palomitas de maíz que tenía en la mano salieron volando cuando la chica de cabello largo y negro gritó haciéndolo gritar a él también.

Jake se escondió en el cuello de Heeseung, Riki le cubrió los ojos a Jungwon y Beomgyu junto a Yeonjun intentaban no reírse a carcajadas por la graciosa reacción de Jongseong.

—Iré por un vaso con agua —Avergonzado y con su corazón acelerado, Jongseong se levantó como pudo y salió rápidamente del lugar.

—¿Estás bien? —Preguntó Sunoo en el marco de la puerta de la cocina.

—Sí —Parpadeó rápidamente al contestar y Sunoo sonrió al darse cuenta de ese pequeño detalle, no era primera vez que lo hacía, Jongseong parpadeaba de esa manera cada vez que mentía —Sí —Repitió sacudiendo sus largas pestañas.

Volvieron a la sala y Sunoo tomó la mano para que se sentara a su lado, la chica volvió a aparecer en la pantalla, apenas la vio Jongseong abrazó sus piernas y apoyó la cabeza en las rodillas mirando a un lado.

—Te diré cuando acabe la escena —Le susurró el pelirosa.

—Gracias —Dijo cerrando los ojos.

Sin pensarlo demasiado Sunoo abrazó sus piernas y apoyó la cabeza en sus rodillas, mirándolo.

—¿Ya acabó? —Preguntó Jongseong en voz baja.

—No —Musitó elevando ligeramente las comisuras de sus labios —Aun no.

Jongseong abrió los ojos encontrándose con la dulce y cálida mirada de Sunoo, se quedaron en silencio en medio de la oscuridad, a una corta distancia, contemplando sus rostros y mezclando sus respiraciones, memorizando sus lunares y dibujando el borde de sus labios.

Pasada la media noche, después de limpiar y ordenar Beomgyu y Yeonjun fueron los primeros en irse, fueron seguidos por Jungwon y Riki, Heeseung iba a quedarse unos minutos más porque quería tiempo a solas con su novio, estar en el jardín, conversar, tomar su mano y decirle lo mucho que lo amaba. Jongseong y Sunoo se despidieron de la pareja, agradecieron la invitación y salieron de la casa.

De pronto el mayor se adelantó y tomó su bicicleta, en ese momento Sunoo notó que tenía una nueva rejilla en la parte de atrás.

—Conozco un lugar donde venden las mejores malteadas que probarás en toda tu vida —Habló Jongseong.

—No traje dinero — Sunoo colocó las manos en los hombros de Jongseong para no perder el equilibrio y se sentó de lado quedando con los pies en el aire, sus manos bajaron hacia la cintura del mayor y apretó los puños alrededor de su ropa.

—Es que... —Dudó un momento en continuar —Es una invitación —Giró el rostro hacia un lado y Sunoo levantó la cabeza, mirando su perfil —¿Aceptas?

—Sí —Respondió y un cosquilleo recorrió su cuerpo al ver la sonrisa de Jongseong.

—Afírmate bien —Colocó los pies en los pedales y Sunoo rodeó su cintura, uniendo las manos en su abdomen, apoyó su mejilla en la espalda de Jongseong y el mayor comenzó a pedalear.