Capítulo 27

559 87 12
                                    

•🧿•

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

•🧿•

—Perdí a mi padre en un horrendo accidente de auto. —mi voz sale baja y rasposa como secuela del llanto—. Es irónico que no murió como un soldado, sino como un civil.

(T/n)______ mantiene sus ojos en las velas mientras yace sentada en la orilla de mi cama. Tiene las piernas estiradas, los brazos cruzados y una terrible postura vertebral.

—Yo nunca conocí a mis padres reales. —me confiesa y no puedo evitar ver sus rizos que caen sueltos, casi rozando el colchón—. Una anciana se encargó de criarme junto a varios niños más, obviamente teníamos que hacer todo lo que ella dijera o quisiera; nada es de grátis en las calles.

—¿Viviste en las calles siendo una niña? —pregunto bastante sorprendido.

—No es como si hubiera tenido más opciones.

—¿Y por qué no fuiste a un orfanato?

—Los odiaba. —expresa con un tilde de desprecio—. No quería que nadie me adoptara para llenar un vacío emocional o ser el hermanito mascota de otro.

—Si lo dices así, tiene todo el sentido del mundo. —me escucha y luego ella sonríe en el mismo momento que centra sus ojos en los míos.

Ambos nos mantenemos donde estamos, sin apartar la vista. Creo que han pasado una o dos horas desde que llegó. No logré contar cuanto duramos abrazados pero una cosa que tengo segura es que le estaré agradecido por el resto de mis días.

(T/n)______ Vargas me sostuvo en uno de mis momentos más débiles. Lo hizo sin importarle las actitudes que había tenido con ella, sin importarle las advertencias de sus padres y sin querer recibir algo a cambio. Ahora, las emociones se han apaciguado pero yo no puedo sacarme de la cabeza sus palabras, su contacto y lo bien que se sintió tener su cuerpo junto al mío.

Cuando me estaba preparando para dormir no podía dejar de pensar en cuanto extrañaba la buena relación con mamá, en cuanto hubiera dado por ser yo quien hubiera muerto ese día en el accidente que se llevó a mi padre y en que ojalá hubiera hecho más por ayudar a Natasha. Me estaba resignando a que solo estaría lleno de perdidas y que pasaría otra tormentosa noche de pesadillas.

Por lo menos, eso fue lo que pensé hasta que ella apareció.

Con sus rulos más esponjosos de lo habitual, con una ridícula caja y una discreción poco común. (T/n)______ apareció para darme una noche sin tormento y mostrarme una tradición que me ha ayudado a curar el alma.

Y yo jamás olvidaré esto.

Nos rodeamos por un tranquilo silencio mientras las velas se consumen. Estamos relajados pero mi cuerpo parece ser muy consciente del suyo. El contacto de nuestras piernas se siente cálido y su brazo roza con el mío desnudo.

En la mira [Soap x Tu] (#2) Where stories live. Discover now