𝐘𝐨 𝐬𝐢𝐞𝐦𝐩𝐫𝐞 𝐠𝐚𝐧𝐨 // 𝐎𝐥𝐢𝐯𝐢𝐚 𝐑. 𝐚𝐧𝐝 𝐘𝐨𝐮.

✧Vídeo explícito✧

📍: Universidad ****.
(J 🏀)

- ¡Buen trabajo chicas, es todos por hoy!. ¡Vayan a descansar y recarguen energía para el día de mañana!. ¡La directora confía en nosotros así que tenemos que ganar en honor a la escuela!.- escuché el grito de nuestra entrenadora mientras caminaba a los vestidores.

Hoy no di mi mejor rendimiento y por suerte la entrenadora no me llamó la atención pero tampoco podía seguir así y todo por lo de ayer.

El estar pensando en Jenna y la noche que pasamos...juntas, no me ha dejado descansar en paz. Se que miente y como lo he dicho anteriormente, encontraré la forma en que ella me diga la verdad.

Cerré mi casillero y brinqué del susto al ver a mi lado a Jenna. Esta traía una gran sonrisa en su rostro junto con un Gatorade de naranja.

Vaya, mi menos favorito...Junto a mi persona menos favorita.

- Hola guapa, estuviste increíble en tu entrenamiento. Te traje tu favorito y unas lindas palabras motivacionales.- me entregó la botella.

- Gracias, pero... creí que ayer todo estaba aclarado.- comenté incómoda.

- ¿Ayer?. Oh, no me di cuenta pues solo tenía en mente aquella bella imagen de que me besabas.- trató de acercarse así que me alejé.- Pero bueno, no venía nada más a eso. Vengo a qué des el siguiente paso.- la miré confundida.

- ¿Que paso?.

- Duh, que me pidas ser tu novia.- celebró.

Dios, ¿En qué me he metido?.

- No, no Jenna. Oye, lo de ayer te lo recompensaré...No lo sé, tal vez siendo tu apoyo emocional pero no puedo ser tu novia. No me gustas, no te amo y dudo que lo haga en un futuro.- admití.

- Bueno, si tú no lo quieres hacer porque le temes al éxito, yo lo haré. ¿J, puedo ser tu novia?.

- Jenna, basta. Por favor.- no quería lastimarla pero ella tampoco apoyaba.- No es no, por favor, comprendelo. Lo siento, me tengo que ir. Tengo que trabajar.- me di la vuelta para empezar a alejarme.

- ¡Espera J!.- me volteé cansada y noté como Jenna se acercaba nuevamente a mí pero ahora con su celular en mano.- Ten tu regalo.- me entregó su celular al haber picado la pantalla y que apareciera un vídeo.

Mi cara era todo un poema. Pues lo que mis ojos estaban viendo, jamás me lo perdonaría. Jenna y yo, besándonos en su habitación sin unas buenas intenciones. Lo único bueno es que el vídeo no tenía sonido pero se veía en sus expresiones. Jenna me tenía atrapada y sin escapatoria. Sin duda, soy una gran imbécil.

- ¿Y bien?.

- ...Bien.- murmuré después de que Jenna me haya arrebatado su celular. Por suerte no seguí viendo o me mataría ahora mismo.

- No guapa, no es así de fácil.- la miré confundida.- Si me voy arriesgar, que sea por el premio mayor. Quiero que me pidas ser tu novia después del partido de mañana.

- ¿Qué?.

- Si guapa.- me guiñó el ojo.- Quiero que me dediques la canasta final y tú victoria  también. Después de eso me pedirás ser tu novia de rodillas y en frente de toda la escuela.- negué rotundamente.