— Charles, déjalo. La ambulancia ya está por llegar, no va a hacer nada malo, míralo... — Había interrumpido otro oficial un poco más relajado.

Ambos voltearon a ver a la parejita, el rubio no dejaba de susurrarle cosas a Moon para mantenerlo distraído, lo único que hacia el mayor era tratar de no cerrar sus ojos mientras escuchaba el menor, no tenía fuerzas para hablar y el dolor que sentía por todo su cuerpo era inexplicable. Damián no recordaba nada del accidente apesar de que estaba en el suelo y herido. No duró ni un minuto estando consciente, su vista se torna borrosa, sus ojos se fueron cerrando lentamente hasta finalmente caer inconsciente.

— No no no no... ¡Moon, por favor! — Su voz se quebró nuevamente, su vista se tornó borrosa y sus manos tomaban al mayor de las mejillas.

Lo estaba perdiendo.

La ambulancia ya podía escucharse en el fondo, había tardado un poco en llegar ya que ocurrían varios accidentes por el lugar gracias a causa de la lluvia. Lyan estaba furioso por lo mucho que había tardado y podría agarrarse a golpes con los mismos paramédicos, por ahora no lo haría ya que su pareja estaba en peligro. Pudo haberlo perdido a él. Pudo perder lo único que amaba.

Cierra sus ojos por unos segundos.

────ೋღ 🌙 ღೋ────

Estaba de regreso en el Pizza Plex.

Lyan había despertado repentinamente y se sentó rápidamente en la cama. Tenía la respiración agitada y sudaba por completo, una vez había logrado regular su respiración mira alrededor notando que estaba en su habitación.

Había sido todo una pesadilla.

— Moon... ¿Dónde está?

Rápidamente se levanta de la cama cayendo al instante por levantarse tan repentinamente, rápido se levanta y mira ambas camas que ahora estaban vacías. Empieza a entrar en pánico al ver que el mayor no estaba, su corazón estaba acelerado y no había más señales de vida dentro de aquella habitación, solo estaba él. Las lágrimas amenazaban con salir de sus ojos y su visión se había tornado borrosa.

— No no no, fue solo un sueño, ¿dónde está? ¡Moon! Por favor no me hagan esto, M-Moon...

No iba a darse por vencido y aunque ahora estuviera recién despertado no iba a perder el tiempo, se acerca a la puerta de la habitación con intenciones de salir de esta misma si no fuera por una voz que lo había interrumpido.

— ¿qué te pasa?

Al escuchar la voz de su amado rápidamente voltea a ver en dirección de dónde venía, había salido del baño. Que tonto de su parte el no haber revisado el baño. El alivio y felicidad de verlo completamente intacto y sin heridas habían causado que se lanzara a él para poder abrazarlo con fuerza aunque aún seguía algo ansioso y preocupado.

— ¡Wow! ¿Y eso a que viene? Solo me levanté para buscar una pastilla para el dolor de cabeza, ¿tanto me extrañaste? — Decía Damián sonriendo por el abrazo.

— ¡Estás bien! ¡No estás lastimado! — El rubio había tomado al mayor de las mejillas y empezó a revisar todo su rostro, lo había jalado para que se agachara y también empezó a revisar su cabeza por alguna razón que el más alto no entendía.

— Ehm... Sí... Con resaca pero bien. — El de ojos rojos no sabía de que estaba hablando.

— E-Estás bien...

ꞋꞌꞋ  El Sol y la Luna  ꞋꞌꞋ   Where stories live. Discover now