Adrienne Lively se enorgullece de ser inteligente, remilgada y correcta. Ella no va en contra de las reglas de la sociedad y se niega incluso a tomar un trago de tequila. En otras palabras: conservadora y tradicional.
Landon Downey, el soltero más b...
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Adrienne Lively:
Cuando llego al departamento de Jay, mis amigos pueden notar que algo nada mal ya que me encuentro pálida y temblorosa.
—Chicos, me acabo de enterar de algo terrible —confesaría tratando de controlar el temblor de mis manos.
—¿Qué pasa? ¿Te hizo algo? ¿Dónde está? Lo voy a matar Adrienne —exclamaría Jay levantándose del sillón y brincando como si fuera todo un boxeador.
—Adrienne cariño, tienes que decirnos qué pasa —agregaría Kath con una mueca preocupada en su rostro al ver que no puedo decir ni una palabra —Por favor no me digas que lo encontraste engañándote con alguien más...
—No, no me estaba engañando —diría con mi voz temblorosa.
—Entonces, ¿qué pasa? —preguntaría Jay deteniendo sus intentos de golpes de boxeador al aire.
—Landon no me está engañando chicos, él está engañando a alguien conmigo —exclamaría en un pequeño grito ahogado.
—¿Qué? —exclamarían ambos al unísono, totalmente impactados por la noticia.
—Estaba en el elevador de mi edificio y vi a una pareja mayor, eran los padres de Landon.
—¿Pero no viven en Chicago? ¿No es esa la razón por la que Landon viaja allá seguido?
—Yo creo que estaban aquí para una visita sorpresa, parecían estar confundidos sobre dónde estaba Landon aunque sospechaban que estaba en el aeropuerto. La cosa es que los escuché hablar...resulta que Landon tiene un matrimonio arreglado, está comprometido con alguien que eligieron sus padres y parece que es una heredera hermosa y millonaria, sonaban muy molestos de que él estuviera perdiendo el tiempo con alguien como yo...
—¿Qué crees que esto signifique para su relación? No creo que haga esto a propósito —cuestionaría Jay con incertidumbre.
—¡Landon nunca te haría eso Adrienne! Al menos, eso creo... —comentaría Kath.
—Bueno en estos momentos me encuentro demasiado confundida y consternada por lo que le depara a nuestra relación. Ha estado comprometido todo este tiempo y ha tenido miedo de decírmelo o simplemente eligió no decir nada.
—De ninguna manera, él está loco por ti Adrienne y por lo que me has dicho él ya ha aguantado mucho. Eso no suena como un hombre que no esté interesado.
—Jay, escuché a sus padres con mis propios oídos, está comprometido —diría con resignación.
—Dijiste que se veían molestos, quizá cambió de opinión y les dijo que no podía seguir con el compromiso o algo parecido.
—Me dijo que tenía una obligación familiar hace tiempo, no quiso decirme de qué se trataba y siempre cambiaba el tema, estoy segura de que era esto —aceptaría con enojo.
