"Nacionales 2" parte II

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Y Atsumu había pensado que Hinata estaba intenso ayer... Sí.


Desde el momento en que salieron a la cancha, Hinata prácticamente había vibrado con una tensión que era difícil de nombrar para Atsumu. No era como si Hinata estuviera ansioso, no había problemas estomacales misteriosos hoy. Y no estaba demasiado callado, después de haber discutido en voz alta la calidad de los huevos con Gin en el desayuno esta mañana. Estaba concentrado, pero eso no era todo. Era... era como-


Como durante cada momento del calentamiento y cada segundo del primer set, sin importar lo que estuviera haciendo, Hinata tenía la misma mirada en sus ojos que ponía cuando estaba subiendo por un remate. Esa misma demanda ardiente de excelencia. Ese 'Vas a lanzar para mí, ¿verdad?' expresión por la que Atsumu se encontró a sí mismo viviendo. Era como si Hinata estuviera caminando, hablando y jugando, suspendido para siempre en ese momento entre latidos del corazón donde esperaba que la pelota viniera hacia él. Donde lo exigió. Recepción, bloqueo, pases, picos... Todo ello. Hinata nunca había jugado mejor.


Era jodidamente eléctrico, eso es lo que era.


Atsumu no era exactamente una persona fundamentalmente honesta. Pero incluso él podía admitir que odiaba jugar contra Shiratorizawa. Ushiwaka era lo suficientemente molesto como para lidiar con él: el pobre Akagi saldría hoy con carne molida por brazos, eso era seguro. Pero fue el maldito Tendo lo que más molestó a Atsumu: arruinó su día/vida/sueños/planes para el futuro. Tendo era el peor, con sus risitas agudas y sus extraños dedos largos que le gustaba mover como un titiritero, y esos ojos grandes que parecían perforar el alma de Atsumu. También se supone que el bloqueo de conjeturas es fácil de manejar para un buen colocador.


Tendo no era fácil de manejar.


Es como si se hubiera infiltrado en el cerebro de Atsumu, sacando del aire cada uno de los pensamientos perdidos de Atsumu, leyéndolo cuidadosamente y luego riendo como un maníaco al ver a través de las mejores fintas de Atsumu. Su única gracia salvadora, como Atsumu sabía que sería, era Hinata.


Cada vez que comenzaba a sentir demasiado el pellizco de Tendo, lanzaba un tiro afilado como cuchillo, rápido para que Hinata hiciera un ataque amplio, lanzando una sonrisa de suficiencia a Tendo, porque no había forma de que ese bastardo pudiera seguirle el ritmo a Hinata, y ambos lo sabían. Atsumu siempre se aseguraba de darle a Tendo su sonrisa más agradable cuando Hinata anotaba, ofreciendo una educada advertencia de lo que Hinata podía hacerles ese día si querían.


Tal vez, tal vez un poco, había irritado, solo un poco, ver a Hinata salir a la cancha para calentar y comenzar a saludar de inmediato a Tendo como un maníaco. "¡Tendo-san, hola!".


"¡Fennec-kun es un titular! Quién diría~" Era la cosa de cantar canciones que hacía Tendo lo que siempre ponía los pelos de punta en la nuca de Atsumu. Tragándose su orgullo, Atsumu le había dado a Kita una mirada suplicante para que hiciera retroceder a Hinata; alguien tenía que interrumpir la conversación animada de Hinata con el jugador más aterrador de voleibol de la escuela preparatoria, y como el infierno, iba a ser Atsumu. De ninguna manera le estaba dando a Tendo oportunidades adicionales para colarse en el cerebro de Atsumu. No señor.


Por supuesto que Hinata era amigo de Tendo. Por supuesto. Se haría amigo de Sadako mientras ella salía del pozo, solo porque podía. Uno de estos días alguien necesitaba sentar a Hinata para explicarle que tenía que haber límites para la amistad.


La comisura de la boca de Kita se arrugó brevemente mientras caminaba hacia la red para interrumpir la conversación, claramente divertido por lo desagradable (patético) que estaba siendo Atsumu. Siempre dispuesto a aprovechar las oportunidades a medida que se presentaban, Atsumu giró la cabeza para mirar a Osamu "Eso contó".

FOX IN THE HOLE Traducción | AtsuhinaWhere stories live. Discover now