Causa Perdida┊Juan Pablo Villamil┊

Capítulo 19

Lo siento

2019
Villa

—No tienes que quedarte —me repite.

—Ya lo sé, pero quiero hacerlo.

—Si quieres estar incómodo, adelante.

Decidí quedarme con ella las noches en las que esté aquí, me empezó a decir que era mala idea.

—Descanse, yo estaré aquí —digo sentándome en un sillón.

Todo se queda en silencio, a excepción de todos los ruidos que hay en un hospital.
Miro el techo que en estos momentos es lo más entretenido del mundo.

—Villa —me llama.

—Mande.

—¿Podemos hablar?

Me siento mejor para verla.

—¿De qué?

—Del bebé.

Suspiro, pero luego asiento.

Estira un poco su mano para alcanzar algo que esta a su derecha.

—Toma, tenía cuatro semanas.

Me entrega una pequeña foto del ultrasonido, inmediatamente mis ojos se empañan.

—¿Cómo se enteró?

—Después de que Matt muriera, especialmente dos semanas después. Después de ver a mi doctor no pensé en estar embarazada, pero luego tuve más náuseas y me hice el test, lloré por todo. No sabía cómo reaccionarias, ni que harías así que no te lo dije. La primera vez que me embarace no tuve tantos cambios de humor, fueron los mimos síntomas y casi no se notó el crecimiento.

—Tenía tres semanas cuando se enteró —recuerdo.

—Sí, supongo que fue unas semanas después del cumpleaños de Simón, cuando tenías una junta y estábamos en el estudio de mis papás.

Rio un poco.

—Recuerdo ese día —suspiro—. Lamento haberle gritado, es que… no todos los días te dicen que ibas a ser papá, no es excusa para haberle gritado así, lo sé. Estaba molesto conmigo mismo, porque yo también le mentí.

Me mira con el ceño fruncido.

—Sí, volví a ver a Gaby, pero solo me movió un poco. Estuve mucho tiempo con ella y hace un tiempo no la veía, solo eso. Estaba enamorado de usted, creí que solo porque ella llegó y me sentí extraño debíamos volver. No fue así porque la seguí amando y extrañando con cada parte de mi ser, de verdad siento no haber estado ahí, me hubiera gustado mucho que nada de esto pasará, tal vez si no se hubiera ido faltaría menos para que fuéramos papás y tampoco estaría aquí —digo llorando.

—Villa, no pudiste haber hecho nada, cuando terminamos prácticamente el bebé ya no tenía oportunidad, por eso me sentía mal. Y lo de ahora, da igual, de hecho ya se me había hecho tarde para hacer unas cosas. Hubiera pasado de todas formas. 

—Sigo enamorado de ti cómo no tienes idea, así que me quedaré contigo todos los días de mi vida si es necesario, porque nunca me cansaré de decirlo, te amo.