Only in your dreams

Extra

Allyson

—Despedida de soltera—repito y con mi tenedor pincho otro pedazo de fruta de mi plato—No creo que a mamá le guste tener una.

—Creo que merece festejar antes de amarrarse a alguien para toda la vida—al habla la chica alérgica al amor y al matrimonio.

—Ky no sé si te enteras pero no son dos adolescentes—no imagino a ninguno de los dos en una fiesta de esas. No es que sean viejos o anticuados, pero ambos son adultos, han tenido suficiente diversión por su cuenta por años, supongo que él sí porque.. realmente mamá no ha tenido mucho de ello en su vida, ha estado demasiado ocupada intentando sobrevivir — No sé, tal vez sí podamos hacer algo con ella, una noche de chicas o algo así. Tomarnos unas copas. Salir de compras.

—Elijo las copas, no crees que sería raro ver como la mamá de tu mejor amiga compra lencería para usarla con fines pervertidos, me niego—me atraganto, es una maldita desgraciada de mente sucia, es casi peor que Steven. Casi.

Estamos en el depa que compartimos Steven y yo, Ky ha venido a visitarme esta mañana y a contarme sobre la propuesta de trabajo para la que ha sido aceptada. Prácticamente me ha arrastrado de la cama. Estaba durmiendo como marmota agarrada a una almohada, Steven me hace levantarme exhausta todos los días de este mundo y yo soy re feliz por ello.

Hoy la abogada Mc Lean tiene un caso importante e iremos juntas a la corte. Estoy emocionada de la confianza ciega que ha depositado en mí a pesar de no haber terminado mi carrera. Asistirla me ha hecho mejorar infinitamente mis notas, se me ha hecho sencillo como respirar. Como si realmente Dios me hubiese creado para esto.

—Le he escrito a mi papá sobre el trabajo— me mira con desconsuelo y me asusta, Ky siempre sonríe, hace bromas, pero nunca se ve así— no ha respondido. Solo espero que no me odie eternamente, que algún día me mire y se sienta orgulloso de mí por quien realmente soy. Odio ver en lo que se convirtió All, odio que se haya convertido en ese monstruo frío conmigo. Quiero... quiero—le tiembla el labio inferior, dejo el plato en el suelo y la acerco a mí—quiero que me devuelva a mi papá.

Nos abrazamos. Me duele tanto. Porque ambas tenemos nuestras heridas, diferentes pero heridas al final. Odio totalmente que alguien no la cuide y la ame como se merece. Lo odio. Su padre es un idiota cegado que no quiere ver el talento que tiene su hija. Perdió a su madre y también perdió a su padre. Sé que esa chica dura es solo apariencias, así ha tenido que andar por la vida, con un escudo en alto para evitar que la lastimen aún más y por eso me estruja tanto el corazón verla así. Kyoto está llorando y esto es duro de asimilar, aquí la que llora soy yo, no ella.

La abrazo por un tiempo y vemos un peli de terror que termina traumando mi mañana y devolviendo a su cara el humor de perros que siempre trae. Su máscara.

No quería que se marchara pero se fue asegurándome varias veces que ya había descargado lo negativo y que se encontraba perfectamente para irnos de tragos y ser la chica de siempre.

Quedamos para la noche salir con mamá y las chicas a un bar. Mamá se lo ha comentado a Julian y él y su bolsillo asquerosamente repleto y su amor desbordante nos han rentado el primer piso de un bar enterito para nosotras. Viva el desmadre que haremos juntas.

Desde que Ky se ha marchado no ha parado de darme vueltas la cabeza con ideas locas. Es injusto que su padre intente forzarla a una vida programada por sí mismo, es tan injusto que la haga infeliz. Es la primera vez que la veo llorar desde que nos conocemos, verla así ancló dentro de mí un sentimiento que no olvidaré jamás. Quiero que sea feliz, como todos nosotros, hemos sufrido, pero poco a poco toda ha ido tomando su lugar, quiero eso para ella, quiero que sane, que lo supere. Pero. ¿Cómo convencer a un padre testarudo?