— Pues ahora que lo dices. . Creo que ambos tienen eso en común. — Diría la joven riendo un poco.

Sun se unió con Chica riéndose ya que ambos sabían que lo que decía era verdad.

— Oh, por cierto, ¿no deberías estar trabajando?

— Me sacaron de la cocina porque me estaba comiendo la pizza, es que no puedo evitarlo, ¡es deliciosa! Pero no te preocupes querido, volveré dentro de poco para preparar la sopa que me habías pedido.

— Gracias, no me gusta pedir favores... Pero estoy preocupado por Moon, ¿y si está muy enfermo? Quizás la fiebre empeore, ¿debería llevarlo con un doctor? ¿Qué debería hac-.

— Relájate amigo, te estás preocupando demás, ¿y si mejor te concentras en los niños que están desordenando todos los materiales de dibujo?

Al decir aquello Sunny rápidamente volteó a ver, efectivamente, había dos pequeños niños malvados que estaban tirando todo el material que hace unos minutos Sun se encontraba acomodando con tanta dedicación y tiempo.

— Suerte compañero, volveré a la cocina, te esperaré ahí cuando tengas tu descanso.

Y así Chica se despidió del pobre solecito que estaba batallando con la idea de sacar a esos niños por estar acabando con su paciencia, extrañaba a Damián en momentos como ese, él era capaz de regañar a los niños por sus malas acciones pero Sun no podía hacerlo, adoraba tanto a los niños que no tenía el valor para alzarles la voz y regañarles.

Les pidió amablemente a los niños que dejaran todo el material y se fueran a jugar a otro lado, por suerte hicieron caso. Sun nuevamente se encontraba acomodando todo, eso le tomaría un buen rato.

El tiempo había pasado rápido y para cuando se había dado cuenta había llegado la hora de su descanso, entregó a todos los niños a sus respectivos padres y de ahí fue directamente a la zona de descanso, necesitaba saber urgentemente como se encontraba su novio.

— ¿Cómo se encuentra mi lindo novio?

Al entrar se había encontrado con Moon recostado en la misma cama de antes con su celular en mano, quizás estaba viendo sus redes sociales para no aburrirse, por otra parte estaba Bryan sentado en una de las camas también con su celular en mano. No había ninguna señal de que se hubieran peleado o algo, simplemente hicieron cómo si él otro no estuviera en la habitación.

— Hey. . — Saludó Moon en voz baja.

— Moooony, ¿cómo te sientes?

— Si te soy honesto, bastante mal, creo que la fiebre empeoró.

Decía mientras apuntaba un pequeño paño mojado que tenía en su frente, Bryan se había encargado de ponérselo, ambos iban a omitir la parte en que casi se ponían a pelear con las almohadas todo porque Moon no quería que lo tocara, no querían que Lyan se enojara.

El rostro de Sun pasó de estar feliz a estar preocupado, tocó la mejilla de su pareja con cuidado y podía notar como su temperatura había aumentado, ¿no le había dado suficiente medicamento? Había hecho algo mal, la culpa empezaba a hacerse presente, no podía siquiera cuidar se su pareja.

— No te preocupes Sunny, por lo menos ya no me siento tan cansado.

— Ah... Eso es un alivio, aún así necesitas reposar, no quiero que te levantes a menos de que sea necesario.

— Si si, lo que digas, solecito.

— ¡Oh! Esperame un momento, debo ir con Chica a la cocina, ¡no tardo! Y Bryan, si quieres ya te puedes ir, me tomé el tiempo de pedir el resto de la tarde libre después de mi descanso... Así que ya no necesito que cuides de Damián.

ꞋꞌꞋ  El Sol y la Luna  ꞋꞌꞋ   Donde viven las historias. Descúbrelo ahora