ꞋꞌꞋ El Sol y la Luna ꞋꞌꞋ

▶ Celos

— Hmph, nunca cambia.

La Luna jura que pudo darle un infarto en ese momento, tan concentrado estaba viendo a su compañero que no se dió cuenta del joven que se encontraba a su lado y parecía que estaba viendo a su compañero de trabajo con una pequeña sonrisa.

El joven era de la estatura de Moon, podría ser un poco más bajo pero casi no se notaba, su cabello era completamente negro, traía un pantalón negro un poco rascado junto a una camiseta de cuadros roja, además portaba una chaqueta alrededor de su cintura.

— ¿Vienes por alguien..? — Preguntó la Luna un poco confundido, no se supone que dejen entrar a los adultos a la zona de juegos, solamente debían dejar a sus niños en las puertas de la guardería y ambos trabajadores se encargarían de ellos. Además era raro que alguien viniera a recoger un niño si habían abierto nuevamente hace unos minutos.

— No, solamente venía a saludar.

El chico miró a la Luna directamente a los ojos, sus ojos eran de un color amarillo bastante suave, tanto así que podría decirse que eran del color de la miel, por alguna razón tenía muy malas vibras sobre ese chico; La Luna siempre tenía malas vibras sobre las personas así que no le sorprendía que tuviera sospechas de este chico.

— ¡Mooooooon!

Una escandalosa pero melodiosa voz había llamado por su nombre, salvándole así de una incómoda situación.

— ¿Pasa algo? — Preguntó el rubio una vez había llegado hasta ambos jóvenes que no parecían hablar mucho.

Sun se quedó viendo al chico de ojos amarillos y después de un par de segundos hizo un gesto de sorpresa, después de lo que pareció una eternidad en silencio el solecito se había lanzado a los brazos de es desconocido abrazandole con fuerza.

— ¡Bryan!

— Mm, Lyan, ¿cómo estás?

— ¡Oh no puedo creer que estés aquí! Pensé que no volvería a saber nada de tí, ¡jamás respondiste mis mensajes tonto!

Ambos jóvenes se miraron directo a los ojos y la Luna solamente les observaba, el más alto de los dos había acomodado un poco el cabello del menor poniéndolo detrás de su oreja y después acarició su mejilla con tanta confianza, Sun disfrutaba de las caricias ya que inclinó su cabeza en dirección a la mano de ese tal Bryan pidiendo más caricias. A la Luna no le gustaba esto, se levantó de su asiento con algo de furia casi cayendo de la silla por hacerlo y se acercó un poco más a ambos.

— ¿quién eres? — Preguntó, cierta molestia se podía notar en su tono de voz.

Ambos chicos salieron de su burbuja y se alejaron un poco, Sun sonrojado de la vergüenza de distraerse de esa manera y el otro solamente sonreía.

— ¡Oh es verdad! ¿Recuerdas cuando te dije que tuve varios compañeros antes que tú? — Moon asiente con la cabeza. — ¡pues te presento a Bryan! Él era uno de mis compañeros, puedo decir que es con el que mejor me he llevado y lo considero como mi mejor amigo, aunque hace tiempo que no hablabamos, Bryan, él es... ¿Moon?... Supongo, ¡es mi nuevo compañero!... Bueno, llevo trabajando con él desde hace dos meses y medio.

Es verdad, en ningún momento le había mencionado cuál era su verdadero nombre al menor, de cualquier manera el chico rubio tampoco le había dicho su verdadero nombre.

— Mmmh, un gusto Bryan. — Dijo casi de manera forzada, por suerte Sun no pareció darse cuenta de eso.

— Un gusto, ¿puedo saber tu nombre? Creo que será mucho más fácil para ambos, también estoy acostumbrado a que me digan Moon.