Castigar al Playboy a partir de Ahora

Capítulo 148: Otro enamorado no correspondido

 Chen Li fue hospitalizado.

Con la ayuda de la medicación y la autorregulación, su estado mental había mejorado. Pero después de todo esto, y sin saber qué más había hecho Duan Yi, la mente de Chen Li se había vuelto a lesionar y experimentaba síntomas similares al coma y a la negativa a responder.

—"Ante esta situación, el paciente debe ser hospitalizado rapidamente"— El médico le dijo solemnemente a Duan Kang: —"Si lo dejamos pasar, puede que un día desarrolle tendencias suicidas"—

Duan Kang se aterrorizó al escuchar esto.

Jamás podría haber imaginado que su hermano podría haber abusado de alguien hasta el punto de casi llevarlo al suicidio por depresión.

Con el corazón encogido, ingresó a Chen Li en el hospital y pagó el dinero.

—"He estado ocupado estos últimos años como para preocuparme por ellos",— dijo Duan Kang con una mirada grave, como si le hablara a Xiao Ye, —"En aquel entonces, Duan Yi fue quien me juró que se quedaría con Chen Li por el resto de su vida, aunque sabía que el camino de la homosexualidad no era fácil. Pero realmente no esperaba..."—

Xiao Ye acarició el hombro de Duan Kang como gesto de consuelo.

—"Originalmente pensé resolver el problema entre los dos rapidamente, pero ahora parece ser mucho más complicado de lo que pensaba",— Duan Kang entrecerró los ojos, —"Supongo que tendré que quedarme aquí por un tiempo"—

—"¿Cuáles son los planes de Duan?"—

—"De momento no tengo que preocuparme por la empresa",— dijo Duan Kang, con un nudo en la garganta que subía y bajaba. Primero voy a alquilar un hotel aquí.

—"Tengo algunas casas en la ciudad cerca del hospital, así que si no te importa, puedes quedarte ahi"—

Duan Kang dudó un momento y suspiró: —"Gracias"—

Xiao Ye asintió y se dio la vuelta para mirar a la persona que yacía en la sala.

El primer hermano causó este tipo de problemas, y al final, tuvo que tener ayuda para limpiar su desastre.

Era obvio que Duan Kang y Duan Yi crecieron juntos, pero ¿cómo es que Duan Kang era como un buen plantón que tomaba los nutrientes y crecía hasta convertirse en un árbol tranquilizador, mientras que Duan Yi se convertía en una persona tan codiciosa, egoísta y viciosa?

Xiao Ye no podía entender.

Miró su reloj y vio que se hacía tarde.

Tras unas breves palabras con Duan Kang y despedirse, se levantó y salió del hospital, con la intención de volver primero a la compañía.

Antes de conducir, Xiao Ye sacó su teléfono móvil y llamó a Zhao Xianghai.

Después de ponerse al teléfono, con calma explicó todo lo que sucedió hoy en su totalidad.

Zhao Xianghai escuchó, no habló durante mucho tiempo y finalmente suspiró: —"Es la desgracia de Chen Li haber encontrado a Duan Yi. Pero está bien, con Duan Kang cerca, supongo que este asunto se puede resolver rápidamente y Chen Li no tendrá que ser herido nunca más"—

—"Sí",— respondió Xiao Ye, —"Duan Kang ha decidido quedarse aquí un tiempo más hasta que se resuelva el asunto. Tiene un mayor sentido de la responsabilidad que Duan Yi, así que Hermano Hai, puedes estar tranquilo"—

Zhao Xianghai dijo: —"Eso es bueno"—

El silencio se apoderó de nuevo del teléfono.

Justo cuando Xiao Ye no pudo resistir el impulso de abrir la boca, Zhao Xianghai dijo: —"¿Tienes algo más que decir?"—

El corazón de Xiao Ye dio un vuelco.

Ayer, había estado despierto toda la noche, y el nudo en su corazón había quedado sin resolver. Ahora que Zhao Xianghai estaba escuchando al otro lado del teléfono, quería tener una buena charla con él.

Sin embargo, cuando abrió la boca, Zhao Xianghai dijo secamente: —"Si no hay nada, colgaré primero, tengo otros asuntos que tratar aquí"—

Antes de que Xiao Ye pudiera decir mil palabras, un frío pitido sonó al otro lado del teléfono.

Se movió durante mucho tiempo y arrojó en silencio su teléfono móvil en el asiento del copiloto.

Era evidente que Hai habia vuelto con él, que ya había dormido con él bajo la misma manta.

¿Pero por qué seguia haciéndose esa pregunta en su mente?

Xiao Ye frunció el ceño y apretó el volante, cuanto más pensaba en ello, más sentía.

Xiao Ye se sentó en la oficina hasta la noche.

De hecho, no había nada que hacer, pero se sentía pesado, y los pies también le pesaban, y no quería hacer nada.

Se quedó mirando el retrato de su familia que estaba en la esquina de su escritorio, con una mirada profunda.

En la foto, él y Hai estaban juntos, sonriendo alegremente, y Hai sostenía a Xiao Lele en sus brazos.

Estiró la mano y tocó suavemente la cara de Hai en la foto.

Condujo sin rumbo, y cuando vio un bar más adelante, se lo pensó y paró el coche.

No había mucha gente en el bar y el ambiente era bastante tranquilo.

Xiao Ye se sentó en la barra y pidió una bebida.

En medio de la conversación, varios hombres y mujeres se acercaron a él, con cautela o con descaro, pero Xiao Ye los ignoró, diciendo que tenía una esposo y alejo a todos.

Mientras bebía su vino, miraba fijamente el reloj que colgaba de la pared.

Eran las ocho, las nueve, las diez.

El camarero que está a su lado miro con extrañeza al hombre que seguia bebiendo, observando cómo miraba el reloj y revisaba su teléfono móvil en otros momentos. Pero a medida que pasaban las horas, el rostro del hombre se volvía cada vez más pálido y decepcionado.

—"Señor..."— Eran las once y media y el camarero no pudo evitar decir: —"Cerraremos dentro de media hora"—

Xiao Ye se quedó atónito por un momento y luego asintió.

—"Usted..."—El camarero parecía preocupado: —"¿Se encuentra bien?"—

Xiao Ye bebió el último vaso de vino que quedaba en la copa, se levantó y cogió la llave: —"Sí, estoy bien"—

El camarero miró la espalda del hombre mientras salía del bar y frunció el ceño.

Se veía tan pálido, su expresión tan perdida, y todavía estaba bien.

—"Otro enamorado no correspondido,  ¿verdad?"—

El camarero sacudió la cabeza, rió y murmuró, y guardó su vaso.