Castigar al Playboy a partir de Ahora

Capítulo 20: Entonces me disculparé

Al otro lado de la ventana, las luces de la casa se encendían en un resplandor de gloria.

Frente a la ventana del suelo al techo de su habitación de hotel, Zhao Xianghai se sentó solo.

Al otro lado del teléfono, Xiao Lele seguía hablando en voz baja: "Papá, si estás triste ven a casa, antes me contabas cuentos, hoy también puedo contarte cuentos y cantarte".

Zhao Xianghai rió suavemente, "Lele es tan buena hoy".

"Papá", la suave voz de Xiao Lele llegó desde el otro lado del teléfono, "No estés triste. Si te intimidan puedes devolverles el golpe. No importa lo que diga la gente, yo sigo amando a mi papá".

Zhao Xianghai frotó la alfombra de felpa: "Papá también te ama".

"Entonces tienes que volver pronto", Xiao Lele bostezó, con cara de sueño, "quiero verte mañana, ¿esta bien?".

"Sí", aceptó Zhao Xianghai suavemente, "Entonces, Lele, ¿buenas noches?".

"¡Buenas noches Papá!", dijo Xiao Lele y luego colgó.

Zhao Xianghai escuchó el pitido al otro lado del teléfono antes de colgarlo con desánimo.

Cogió el teléfono y pensó en Xiao Lele durmiendo dulcemente bajo el edredón.

Se sirvió otra copa de vino y abrió el álbum de su teléfono mientras bebía. Tras un momento de duda, se dirigió a la portada del álbum y encontró una foto.

En ese momento, los padres biológicos de Xiao Lele acababan de morir en un accidente de coche, así que él y Xiao Ye decidieron hacerse cargo de la niña.  Los dos hombres, que nunca habían cuidado de un bebé, estaban tan agotados y confundidos que Xiao Ye le gritó "bebé" al trasero de Xiao Lele durante mucho tiempo, lo cual era ridículo.

Más tarde, Xiao Lele creció con dos padres y una niña, como una familia de verdad.

Los tres hicieron excursiones al bosque, acampadas para ver estrellas fugaces y paseos por el mar...

También asistieron a las reuniones de padres y profesores de Lele con Xiao Ye. Cada vez que terminaban de hacer el amor en la cama, hablaban y se ponían a pensar en la encantadora princesita que sería su hija en el futuro...

Zhao Xianghai tomó un sorbo de vino y entrecerró los ojos.

Esos últimos siete años fueron tan felices como un sueño.

Pero los sueños, son sueños despues de todo y tienen que despertar al final.

La familia fue destrozada por la arrogancia y el dominio de Xiao Ye y su afán por intentar salir al paso del asunto.

Sólo cuando se despertó se dio cuenta de que Xiao Ye era un perro tan prepotente, infantil y poco razonable.

Zhao Xianghai sacudió la cabeza burlonamente mientras se servía un vaso de vino.

Había bebido demasiado vino y su cabeza estaba un poco mareada. Dejó la botella de vino que ya estaba en el fondo a un lado y se levantó sujetándose la frente para irse a tumbar a la cama.

Podría ser perseguido por Xiao Ye durante mucho tiempo después, pero esta noche sólo quería dormir tranquilamente.

Estaba cansado.

...

"Bang, bang, bang..." << ya se nos vino la reina del drama

A última hora de la noche, se oyó un violento golpe en la puerta.

Zhao Xianghai era de sueño ligero y se despertó bruscamente al oír los golpes, estaba tan somnoliento y enfadado que cogió el teléfono móvil que tenía al lado y vio que eran las 3 de la madrugada.

¡Maldita sea!

¿Quién demonios se atrevería a llamar a su puerta a mitad de la noche?

El sonido de los golpes se hacían cada vez más urgentes y pesados.

Zhao Xianghai se levantó de la cama con un fuerte toque de atención, se puso las zapatillas y se dirigió a la puerta abriéndola para echar un vistazo.

Xiao Ye.

Contuvo su ira y apretó los dientes: "¿Qué diablos quieres?".

¡Se había ido a dormir al hotel y mágicamente Xiao Ye lo había encontrado!

Su sueño fue interrumpido bruscamente y estaba tan enfadado que quería agarrar la boca de Xiao Ye y alimentarlo a la fuerza con docenas de botellas de peligroso y fascinante paraquat (herbicida altamente toxico) para matarlo.

Xiao Ye jadeó mirando a Zhao Xianghai delante de él y tiró de él para que se detuviera: "Te he estado buscando toda la noche".

Zhao Xianghai se frotó las sienes con las cejas fruncidas.

Xiao Ye se acercó a la puerta y entró a la fuerza a la habitación de Zhao Xianghai, tirando de él hacia el dormitorio.

Había una gran cama en el centro con una sola almohada y nadie más en la habitación.

Zhao Xianghai no estaba en la cama con nadie.

En cuanto vio que no habia nadie, el corazón de Xiao Ye que había estado tenso, se relajó de repente.

Dios sabia que al principio era un poco reacio a llamar a Zhao Xianghai.

Pero Zhao Xianghai no sólo le dijo que se había ido a una habitación, sino que le colgó el teléfono repetidamente haciéndole sentir cada vez más confuso e incómodo como si todo su cuerpo se hubiera metido en una sartén.

Cada vez que pensaba que alguien podría estar tocando los músculos de Zhao Xianghai y besándolo, su cerebro parecía que iba a explotar y su pecho se llenaba de celos, ¡queriendo destrozar a cualquier hombre que se atreviera a tocar a Zhao Xianghai!

Llamó a todas partes para preguntar por el paradero de Zhao Xianghai, pero nadie lo sabía y el ayudante Wang incluso actuaba como un paciente con un ataque de epilepsia, hablando deliberadamente de forma incoherente.

Xiao Ye buscó en un hotel tras otro sin sentir sueño, buscando como un loco durante horas en medio de la noche y finalmente lo encontró.

"Ya no mires, no hay otros hombres", gritó fríamente Zhao Xianghai, "¿Ya has tenido suficiente? ¿Qué demonios estás haciendo en medio de la noche?".

Xiao Ye se relajo y se dio la vuelta mirando con ojos oscuros a Zhao Xianghai que sólo llevaba ropa interior: "Zhao Xianghai, sé que provocarte ya no funciona. ¿Es posible que solo vayas a casa conmigo si cedo y me disculpo?". <<Hai dale con la silla para que al menos pueda pensar :)