Capítulo 162: Un golpe realista

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La brisa nocturna se estaba enfriando, y el sudor de las palmas de las manos acababa de salir, pero el calor que quedaba se lo llevaba la brisa nocturna, haciendo que el frío picara.

Las comisuras de los ojos de Chen Li estaban ligeramente enrojecidas y su respiración era desordenada.

Abajo, Duan Yi miró a Chen Li durante mucho tiempo antes de decir con voz muda: —"Li Li..."—

La garganta de Chen Li se movió, y la sonrisa de su rostro se tiñó de amargura: —"Duan Yi, no sabes cuánto te echo de menos"—

—"Pero echo de menos al Duan Yi de hace tantos años, aquel cuyos ojos se enrojecían de dolor cuando me hacia un pequeño corte e iba a todas partes a buscar tiritas; aquel cuyos ojos estaban llenos de esperanza aunque estuviera acostado conmigo en una habitación alquilada; aquel que ganó la primera gran suma de dinero y se apresuró a comprarme un anillo de boda para cumplir su promesa"—

—"A veces pienso que si hubiera sido ese Duan Yi, no me habría dejado solo en casa para sufrir y habría salido a divertirse, y no me habría pegado por otra persona. Nunca...se hubiera preocupado por otros y siempre me hubiera tenido presente"—

—"Echo mucho de menos a ese Duan Yi, pero hace años que se fue y nunca volvió"—

Duan Kang escuchó las palabras de Chen Li, sin ninguna razón, su corazón parecía apuñalado por algo lleno de dolor.

No sentía nada más por Chen Li, pero cuando pensaba en Chen Li, que había estado con Duan Yi durante tanto sufrimiento, había sido abandonado en esa casa oscura, mientras Duan Yi se llevaba todo lo que Chen Li y él habían trabajado y pasaba la noche con su amante, se sentía acartonado y enfadado.

—"Li Li",— dijo Duan Yi cada vez más ansioso, —"No lo digas, me disculpo, admito mi error. Ven a casa conmigo, te trataré bien en el futuro y nunca ..."—

Chen Li cortó la llamada.

Se quedó allí, mirando la cara de decepción de Duan Yi bajo la luz de la calle durante mucho, mucho tiempo.

Sólo cuando Duan Kang le dio una palmadita en el hombro, salió de sus pensamientos, asintió y se dio la vuelta en silencio, sumergiéndose en la luz de la casa.

Chen Li volvió a su habitación y cerró la puerta sin encender la luz.

En la oscuridad, sacó un grueso álbum de fotos del fondo de su cajón y se sentó en el frío suelo junto a la puerta.

Cuando abrió el libro, vio todos los recuerdos.

Vio cuando se habían mudado a una pequeña y destartalada casa alquilada, pero eran risueños y felices.

Cuando habían ganado dinero juntos vendiendo bocadillos, y Duan Yi se divertía con su dinero ganado con esfuerzo.

En el día de San Valentín, cuando no podían permitirse el lujo de ser románticos, Duan Yi le cocinó una comida, y su cocina no era muy buena, pero la sensación de que su corazón se llenaba de felicidad era algo que Chen Li aún recordaba...

Miró las fotos con fascinación, con las puntas de los dedos temblando.

Los años que pasaron juntos en la miseria no fueron nada comparados con los años que pasaron juntos en la riqueza.

Los sentimientos con los que lucharon juntos en las dificultades no valían la pena ante la piel fresca del exterior.

El profundo amor en tiempos desesperados fue destrozado por la realidad.

Duan Kang despidió a Duan Yi y, tras pensarlo, se dirigió a la puerta de Chen Li. Llamó dos veces a la puerta: —"Chen Li"—

No hubo respuesta en la puerta.

—"Chen Li",— Duan Kang siguió llamando a la puerta, —"¿está todo bien?"—

Nadie hablaba.

Duan Kang entró en pánico, temiendo hacer algo impulsivo si le provocaban, y se apresuró a pulsar el pomo de la puerta para entrar en la habitación.

En la habitación poco iluminada, Chen Li estaba tumbado en la cama, con la cabeza medio cubierta por una colcha, en silencio.

Duan Kang se sintió aliviado al ver que todavía estaba vivo y bien.

Cuando miró a su alrededor, se dio cuenta de que había un desorden en el suelo.

A la tenue luz del día, vio un montón de fotografías rotas por la mitad y apiladas de forma desordenada.

Sus ojos se oscurecieron y suspiró mientras miraba a la persona en la cama que se hacía la dormida sin decir una palabra, pero al final no dijo nada que la molestara y salió de la habitación en silencio.

Era mejor dejar a Chen Li solo, pensó Duan Kang.

Volvió a su habitación, se duchó y fue a ver que Duan Yuhang se acostara de nuevo.

Después de que todo estuviera solucionado, reflexionó durante un rato y luego volvió involuntariamente a la puerta de Chen Li.

Esta vez no abrió la puerta, sino que se quedó un rato fuera de ella y escuchó.

Al principio, no se oía nada y la casa estaba en silencio.

Sin embargo, pronto se oyó un leve gemido en su interior.

El sonido de este quejido fue acompañado por la brisa nocturna, que inexplicablemente le hizo sentir un escalofrío.

Tal vez porque nadie estaba escuchando al final de la noche, los gemidos continuaron durante un tiempo, y los gritos se hicieron más fuertes. Duan Kang estaba afuera de la puerta, escuchando a Chen Li llorar como un niño en la habitación, y su corazón naturalmente le dolió.

NT: Solo diré: Only love can hurt like this </3

Castigar al Playboy a partir de AhoraWhere stories live. Discover now