ꞋꞌꞋ El Sol y la Luna ꞋꞌꞋ

▷ ¿Boda?

Podrá ser un idiota malhumorado y que no le agradan mucho los niños, pero Sun esta vez tenía la razón, le debía un favor y tenía que cumplirlo.

— Maldit... Ugh, solo hagámoslo.

— ¡Yeeeiii! Ya tenemos todo arreglado, ¡será divertido!

Dos pequeñas tomaron las manos de la Luna llevandoselo un poco lejos, quizás para arreglar algo antes de la supuesta boda, Sun se quedó mirando en el mismo lugar de antes con una pequeña sonrisita.

Pasaron un par de minutos y Sun estaba esperando a que las pequeñas regresaron junto con Moon, él ya estaba en el pequeño altar improvisado que habían hecho los niños, estaba un poco chueco y algunas flores que le pegaron empezaban a caerse, de todos modos Sun creía que era bastante hermoso y que los niños hicieron un gran trabajo, a veces se preguntaba que tanta imaginación tenían para hacer ese tipo de cosas, además también se preguntaba como es que lo habían hecho tan rápido y sin que se diera cuenta.

— ¡Regresamooos!

El rubio rápidamente dirigió su mirada al frente para ver a Moon.

Oh.

Oh...

¿Tenía un velo de novia? Le quedaba bien.

Ahora entendía por qué se habían tardado, Moon seguramente se habría negado a llevar eso cuándo Sun era el más indicado para ser la novia en esos casos, por suerte son pequeños niños inocentes que solamente buscan divertirse y no lo hacen para burlarse de él.

El más alto avanzó lo más rápido que pudo hasta el altar improvisado y se puso al lado de su compañero con los brazos cruzados, mantenía el ceño fruncido y en su rostro se podía notar un ligero sonrojo.

— No digas nada.

— Te ves bien.

— Te dije... No digas nada.

— Sigo creyendo que te ves bien. — Susurró por último Sun mientras que un niño se acercaba para empezar con la pequeña ceremonia. — Oh, mejor me callo, ya va a empezar.

El principio fue una pequeña presentación de que todo esto era una pequeña obra de teatro en dónde los principales actores eran los mismo trabajadores de la guardería. Más niños empezaron a juntarse ya que al parecer les había llamado la atención.

Todo fue muy rápido ya que los pequeños no estaban al tanto de como era una boda realmente, en el inicio ya se había pasado a la entrega de los anillos. Al momento de hacer entrega de los anillos Sun no pudo evitar reír un poco al notar que los anillos eran de dulce, tomó uno de estos y con cuidado lo puso en el dedo de Moon quién trataba de no mirarle ya que era demasiado absurdo a su parecer. Moon tuvo que hacer lo mismo solo que fue un poco más rápido, mientras más rápido se acabara esa pesadilla sería mucho mejor.

— Señor Sun, ¿aceptas al señor Moon como tu novio?

— Esposo. — Corrigió Sun mientras miraba al pequeño que estaba dirigiendo la "boda".

— ¡oh sisi! Perdón, ehem... Señor Sun, ¿aceptas a Moon como tu esposo?

— Acepto. — Dijo sin pensarlo dos veces mientras miraba emocionado a su compañero de trabajo.

— Señor Moon, ¿aceptas al señor Sun como tu esposo?

— Como sea. — Miraba a otro lado como si no le importara la situación.

— ¡Tienes que decir que sí! — Gritó una pequeña niña en el fondo.

— ...Sí, acepto. — Dijo entre dientes, obligado por la multitud que estaba frente a ellos, solamente lo hacía por el bien de su trabajo.