ꞋꞌꞋ El Sol y la Luna ꞋꞌꞋ

▷ ¿Boda?

— ¡Miren! Se ven tan lindos juntos.

Ese pequeño grito hizo que La Luna se removiera de nuevo, lamentablemente eso había causado que se despertara, abrió sus ojos lo más lento posible y con cuidado se sentó en la cama dejando a Sun algo triste mientras se sentaba nuevamente ya que no tenía caso seguir recostado.

Ni siquiera había notado a los niños que estaban viendoles, estaba mirando directamente a los ojos a su compañero, no quería hablar ya que seguía adormilado y seguramente sonaba gracioso.

— Buenos días, Moon, ¿cómo dormi-

Sin tiempo de dejarle acabar su frase, la Luna lo había abrazado y lo obligó a acostarse nuevamente mientras el enseguida apoyaba su cabeza en el pecho del contrario acomodandose nuevamente para dormir, Sun tenía que relajarse o se daría cuenta de que su corazón iba demasiado rápido.

— M-Moon, creo que ya es hora de abrir la guarde-.

— Shhh.

El solecito tragó saliva en silencio, les hizo señas a los pequeños niños para que fueran a recortarse, el se haría cargo de que el contrario se levantara, aunque no le gustaría hacer esto ya que seguramente se molestaría con él.

Con cuidado puso su mano en el gorro de dormir que llevaba el contrario y lo quitó suavemente, esperó alguna queja, al ver que esto no había pasado dejó el gorrito en la pequeña mesa que estaba a un lado de la cama y su mano fue directamente a los cabellos bicolor dando suaves caricias, Moon tarareo feliz y se acomodó para seguir durmiendo.

¿Qué estaba haciendo? ¡Se supone que tenía que despertarlo!

En cuanto notó su error dejó de darle caricias y alejó su mano, rápidamente el contrario tomó su mano y la puso nuevamente en su cabeza, hizo un pequeño sonido de queja pidiendo de esa manera más caricias.

— Moon, debemos levantarnos.

— Yo no... Tú sí.

En eso tenía razón y no se lo iba a negar, suspira dando suaves palmaditas en la cabeza ajena y lo empujó suavemente para poder levantarse sin problema alguno. Moon se quedó recostado pero esta vez con los ojos abiertos y viendo al solecito con una sonrisita.

Oh no, que dejara de mirarle así por favor, ¡le estaban ganando las ganas de querer recortarse de nuevo con él! Se mordió el labio inferior, desviando la mirada un momento viendo la hora, aún tenía un para de minutos antes de que tuviera que arreglarse. Rápidamente se recosto para abrazarlo nuevamente y seguir con las caricias en el cabello del contrario.

De ahí ambos se quedaron dormidos nuevamente, despertando tarde y recibieron una queja de su jefe por esa gran error que cometieron ambos. Moon no quiso volver a repetirlo o seguramente lo despedirian.

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Moon estaba algo avergonzado de solo pensar que le había pedido al contrario que se recostara de nuevo con él ese día, por eso no quería recordarlo.

— No volverá a pasar.

— ¿Y si me vuelvo a poner malito?

— Ese ya es otro caso.

Sun sonrió al escuchar eso mientras un ligero brillo se podía notar en sus ojos.

— Oh no, ni se te ocurra hacer algo a propósito, ¿de verdad crees que es divertido cuidar alguien mayor que no sabe cuidarse a sí mismo?