A las horas habíamos llegado a la fiesta.

El ambiente era algo más tranquilo que la anterior, el lugar era más amplio, olía mejor y tenía una buena iluminación. La mayoría de los chicos se disperso por la gran casa y yo me senté en el sofá junto a Heeseung.

Esté observaba la fiesta sin interés jugando con el collar que colgaba de su cuello. Yo por otro lado, estaba sentada sin realmente saber que hacer. Claro que quería bailar y divertirme, pero sentía esa molestia en el pecho diciéndome que podía pasar algo malo como la última vez.

Un chico paso al frente de nosotros y se devolvió posando su mirada en mí con atracción. Lo noté y me sentí levemente asustada. Se iba a acercar a mí, pero paro ante la acción de Heeseung.

El moreno me rodeo con su brazo, apegándomé a él y posando su distintiva mirada intimidante en el chico el cuál ni siquiera se arriesgo a hablar y siguió su camino.

— ¿Segura que todavía quieres estar aquí? —susurró cerca de mi oído y asentí observando su mano posada sobre mí.

— ¿No te vas a separar de mí? —musité y esté nego con firmeza. Oculte una sonrisa y mire a otro lado.

Era exactamente lo que quería que respondiera.
Heeseung me hacía sentir protegida sin siquiera darse cuenta.

— Creo que deberiamos divertinos un rato... ¿Quieres bailar? —Lo volteé a ver tomando de su mano y esté alzo levemente una de sus cejas, ocultando su sorpresa.

No espere a su respuesta y me levante del sofá jalándolo. El pelinegro se levantó sin resistirse y paso su lengua por sus dientes, sonriendo.

— No soy de fiestas.

— Yo tampoco, es la segunda fiesta a la que voy en toda mi vida. —Sonreí emocionada y esté soltó un suspiro negando con su cabeza.

— Vamos, se que sabes bailar. —Me cruce de brazos al ver que esté no se movía. Heeseung dejo escapar una pequeña risita y me jaló hacía a él de la mano, dándome una vuelta entre sus brazos.

— Claro que sé. —Deslizó sus manos por mi espalda y me acercó más a él, notando mi clara sorpresa—. pero creo que tú no.

— Eso no es cierto...—proteste casi en un susurró. De repente me sentía pequeña.

— ¡Pero si son Romeo y Julieta! —exclamó alegre alguien a nuestras espaldas.

Heeseung se puso serio de inmediato apartándose de mi lado y yo volteé encontrándome con el chico de cabello rosa palo, Hyunjin.

— Hola. —Iba a alzar mi mano para saludarlo pero Heeseung me paro antes.

— Vaya coincidencia encontrarlos por aquí, no pensé que eran de los que madrugan y se divierten...—Miro de reojo a Heeseung.

— ¿Deseas algo Hyunjin? Sabes que no trabajo en fiestas. —Sonrió con molestia a lo que el contrario soltó una risa pegajosa, acercándose a mi lado.

— ¿Piensas que solo me acercó a ti para comprarte? Lamento decirte que esta no es la razón... al menos no la de hoy. —Hyunjin me sonrió dándome una ojeada de arriba hacía abajo.

— ¿Quieres bailar con ella? —preguntó Heeseung con tranquilidad, a lo que lo miré algo preocupada.

— ¿Sí me dejas? —cuestionó el pelirosa, sorprendido.

— Claro, ¿Por qué no lo haría? Es solo una compañera de trabajo... —Sonrió apartándose de mi lado, lo que me hizo sentir desconcertada y a la vez desprotegida.

¿Acaso no había dicho que se quedaría conmigo?

Hyunjin lo siguió con su oscura mirada y luego se volteó, ofreciéndome su mano.

— Ahora... —alzo la voz Heeseung—. No depende de mí si rechaza tu oferta o no... es una chica con un carácter bastante difícil. —Me miró de una forma algo extraña, pero entendí el mensaje que trataba de mandarme.

Deje mi compostura de temor y la transforme en una de seguridad, tornando mi mirada a una más fuerte.

— Lo siento, pero ya baile con muchos chicos, estoy cansada.

— ¿Ah sí? Vaya... que lástima, hubiera sido un momento bastante agradable...—Hyunjin rió con algo de esfuerzo—. Pero como sea, no insistiré. Nos vemos pronto, manchitas.

Me dió una última mirada y se fue perdiendose entre las personas, sin antes mirar a Heeseung con una expresión no muy agradable.

Esté respondió con una sonrisa apagada y esperó a que se fuera por completo para acercase nuevamente a mí, con pasos tranquilos.

— Dijiste que no te separarias de mí. —Arrugue el ceño en una expresión triste.

— Y aquí estoy. —Tomo de mi mano llevándome afuera de la casa, parando en el frío y vacío estacionamiento—. Sabes que ya puso el ojo en ti, ¿No? Si piensa que estamos en algo, lo usara a benefició de él.

— ¿Los dices por qué nos llamo Romeo y Julieta? —Sonreí, pero la borré rápidamente al ver que a esté no le parecía algo agradable.

— ¿Sabes como termina esa historia, no? Hyunjin es más peligroso de lo que se ve, esta completamente loco.

— ¿Entonces por qué no solo te alejas de él y ya? —cuestione con molestia y esté solto una risa, mirándome completamente incrédulo.

— ¿De verdad estas preguntando esa basura Pandora? ¿Qué todavía no te das cuenta en la realidad que vives?  —Me alzo la voz enojado.

— Heeseung... —¿Crees que sí no hubiera tenido la oportunidad la hubiera tomado? No hay salida. No de este pequeño infierno, del cual ahora tú también eres parte, por sí no lo había notado. —Se acerco un poco más a mí, manteniendo su tono fuerte que comenzó a afectarme.

— Creo que estas siendo muy duro...— No Pandora, tú estas siendo muy débil y eso es un problema. La gente así no sobrevive, no en este lugar.

— ¿Entonces quieres que sea igual de hiriente y frío que tú? —inquirí, con mi voz algo afectada. Heeseung lo notó y recobro su compostura normal, sin cambiar su semblante serio.

— Si, sería bueno.

Pregunta random, ¿Qué canción están escuchando mientras leen esto?

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

Pregunta random, ¿Qué canción están escuchando mientras leen esto?

DIE FOR YOU / HEESEUNGWhere stories live. Discover now