Un mil usos

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Olivia abrió los ojos lentamente, mirando hacia el techo en penumbra. Se alegró de que finalmente fuera el fin de semana. Sintió que la tensión de la semana se desvanecía y se sentía bien.

Sus ojos se movieron hacia abajo mientras se sentaba sobre sus cocos. La cosa era que, por mucho que lo intentaba, no podía dejar de pensar en sus padres. La última vez que estuvo allí fue cuando falleció la mamá de Julie. Y aún así, apenas los vio, y cuando lo hizo, estaban peleando entre ellos.

Olivia se quitó el edredón y deslizó las piernas hasta el frío suelo de madera. Ella encendió la pantalla de su móvil, viendo que eran las nueve. Levantó las cejas, un poco sorprendida de que no fuera temprano. Su habitación seguía un poco oscura para ser las nueve de la mañana. Ella supuso que probablemente estuviera nublado.

Ella se levantó, pasando sus dedos a través de su pelo mientras abría la puerta, cerrándola detrás de ella. La puerta de Julie seguía cerrada, y una pequeña sonrisa se curvo en su cara mientras caminaba hacia ella.

Olivia giro la manivela, empujando la puerta ruidosamente y corriendo y saltando encima de Julie. —¡Sol de la mañana!— Prácticamente gritó y Julie dejó escapar un gemido de dolor y molestia. Olivia se rio mientras luchaba debajo de ella, tratando de empujarla.

—Es demasiado pronto para esto.— Refunfuñó Julie, mirándola con los ojos entrecerrados mientras se sentaba sobre los codos. Olivia se rio mientras rodaba de las piernas de Julie y se sentaba a su lado.

—Nunca has sido una persona mañanera.— Olivia se rio y Julie ladeó la cabeza. 

—Um, nunca has sido una persona mañanera. Esto es impactante.— Ella replicó, frotándose los ojos. Olivia inclinó la cabeza en señal de acuerdo, recordando todas las veces que Julie tuvo que despertarla para ir a la escuela. No era culpa suya que no pudiera levantarse.

—Como sea. ¿Puedes creer que ahora somos parte de Sunset Curve?— Olivia se rio y se llevó las rodillas al pecho. Julie negó con la cabeza, sentándose derecha. 

—Bueno, probablemente el nombre tendrá que cambiar. No necesitamos que la gente lo busque y vea todos esos titulares sobe su muerte.— Ella señaló, y Olivia asintió, olvidándose de eso.

—Supongo que tendremos que escribir nuestras propias canciones.— Dijo Julie, vislumbrando la caja de sus sueños. Olivia asintió de nuevo, abrazando sus piernas un poco más fuerte.

—Supongo que entonces deberíamos ir al estudio. Los chicos probablemente se mueren por empezar.— Dijo, mirando a Julie. Ella sonrió antes e suspirar.

—Esto es loco.— Dijo, sacudiendo la cabeza mientras se levantaba de la cama.

—Cuéntame sobre eso.— Olivia arqueó las cejas mientras saltaba y se dirigía hacia la puerta.

— Olivia arqueó las cejas mientras saltaba y se dirigía hacia la puerta

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Después de comer y vestirse, las chicas se dirigieron al estudio. Olivia abrió una de las puertas del garaje, permitiendo que Julie entrara antes de seguirla. Los chicos estaban sentados en el sofá, Luke y Reggie tocando sus guitarras en silencio, y Alex golpeando la mesa con sus baquetas.

𝐆𝐇𝐎𝐒𝐓𝐋𝐘 𝐌𝐈𝐒𝐓𝐀𝐊𝐄𝐒 | Luke (traducción)Where stories live. Discover now