12. Amanecer en Ciudad Hoja de Nieve

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La ceremonia matrimonial entre Liu Mai y el Rey de Fuego fue la primera en llevarse a cabo. Tal como lo habían acordado, Shi utilizó el Reemplazo de Apariencia para tomar el aspecto de su hermana y se matrimonió con Hou Yi. Para la boda de Lan Shang, Fang Yin se posesionó del cuerpo de Liu Mai y usó el Reemplazo de Apariencia, luciendo como la princesa sirena. El mayor obstáculo apareció a la hora de la noche de bodas, pues el Rey de Fuego insistió en tomarlas a las dos al mismo tiempo.

—Maldito depravado —masculló Liu Mai muy colorada, en parte por la rabia y en parte por la vergüenza.

—No te preocupes, jiejie —manifestó Lan Shang—. Yo lo distraeré hasta que Ying Kong Shi me sustituya, así que no tendrás que hacer nada.

—¿Estás segura, Lan Shang? —Liu Mai arqueó una ceja con sorpresa, la sirena siempre había sido demasiado delicada para su gusto—. ¿Te sientes capaz de hacerlo?

Lan Shang asintió con energía, sonriendo.

—Sí. Siempre me has protegido, y ahora es mi turno de hacer algo por ti.

—Bien, entonces. Gracias, Lan Shang.

La princesa sirena se las ingenió para hacer su mejor esfuerzo y distraer a Hou Yi con caricias coquetas, cumpliendo su cometido. Un rato después, Lan Shang escapó hacia el baño, donde Shi se cambió por ella usando el Reemplazo de Apariencia, dándole la oportunidad de escapar junto a Liu Mai. Mientras Shi entretenía al Rey de Fuego, los líderes de las tribus se habían reunido en el Palacio de Hielo con el pretexto de asistir a las bodas; pero en realidad, esperaban que Shi debilitara a Hou Yi, ofreciéndoles un chance de atacar y derribarlo.

Shi agarró la mano del Rey de Fuego y le lanzó magia de hielo para neutralizar el punto débil del Encantamiento Escudo; mas las cosas se descontrolaron y el príncipe fue poseído por Hou Yi, atacando a sus aliados tras fingir que había vencido al malvado rey. Una idea de Huang Tuo logró despojar al príncipe de hielo de esa influencia maligna; pero Hou Yi arrojó su significativo poder contra los líderes, derribándolos a todos. Al ver lo que sucedía, Fang Yin tomó el cuerpo de Liu Mai y entró en acción para cumplir con su promesa.

Con un ágil movimiento de su mano derecha, Fang Yin envió una oleada de hielo en dirección a Hou Yi, obligándolo a retroceder. Luego movió sus manos en forma de triángulo para crear un escudo protector frente a los líderes tribales caídos, protegiéndolos.

—Es bueno comprobar que aún me mantengo en forma —se dijo a sí misma la misteriosa inmortal.

—¿Quién eres? —cuestionó Hou Yi, notando aquel ajeno brillo de oro en los ojos de Liu Mai, ahora transformada en Fang Yin.

—No necesitas saberlo; te prometo que tu cabeza estará clavada en la pared dentro de poco —replicó Fang Yin, al tiempo que el Rey de Fuego le lanzaba una potente llamarada—. Pues fuego contra fuego será.

La innortal de ojos dorados extendió su mano izquierda y movió los dedos, ocasionando que unas enormes llamas explosivas surgieran de ellos. Estas no solo contrarrestaron la llamarada de Hou Yi, sino que las superaron por completo y lo impactaron directamente, mandándolo a besar el suelo. Sin embargo, el Rey de Fuego se levantó casi de inmediato, sin dar muestras de haber sufrido daños significativos. Entonces, Fang Yin usó su Cambio de Posición a una velocidad tal, que incluso podía crear clones de sí misma. Todos los jefes tribales observaban la pelea con los ojos abiertos a más no poder.

—¡Es increíblemente poderosa! —se admiró Liao Jian.

—Debe ser por eso que la princesa Liu Mai aceptó el trato con ella —comentó Chao Ya.

La Princesa de Hielo entre redes de sueñosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora