08: Victoria para la humanidad.

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08

La caída de Trost: "Victoria para la humanidad".




Hacia unos momentos su corazón había vuelto a unir pequeñas piezas, donde una parte de ella se sentía feliz y con un peso menos de encima al ver a su hermano vivo. Pero ahora todo en ella estaba alerta. Analizaba por todos lados, pero ninguno de los cuatro tenía escapatoria. Estaban acorralados. Todo por el temor de no saber que era en realidad Eren. El era un enemigo para la humanidad en ese momento. Y ahora ellos también podrían serlo defendiéndolo. Aunque a ninguno le importaba en realidad, no se alejarían de él.

— Los mataré.

— El hará que nos maten si sigue abriendo la boca.— susurró Selene.

Estar en esa situación era algo estresante. Y aunque tratarán de huir seria imposible. La única opción posible era intentar dialogar con ellos, pero sería algo muy difícil, el capitán de las tropas estacionarias estaba demasiado loco. Más que claro que no los escucharía. Miro a Mikasa y noto que estaba en la misma situación que ella. Ambas sabían que si todo salía mal, tendrían que acabar con unos cuantos soldados. Eren abrió los ojos con asombro, recién recordaba la conciencia.

— ¿Puedes moverte, Eren? ¿Estás consciente? Cuéntales todo lo que sepas. Seguro que lo entenderán.

Selene en un instante sacó sus cuchillas al escuchar los murmuros de los soldados. No iban a escuchar a Eren y lo mínimo que dijera lo usarían en su contra. Y los mataría  a los cuatro. No imaginaba esa muerte, pero suponía que si ella y Mikasa atacarían daría tiempo de que Armin y Eren escaparan.  De alguna forma ella dos se las arreglarían. Aunque sabía de primera que de seguro Mikasa podría con todos.

— ¡Reclutas Jeagers, Akerman y Arlert! ¡Sus acciones se interpretarán como una traición! Les quitaremos la vida si es necesario. Si tratan de engañarnos o se mueven de ahí, dispararemos un proyectil de alto poder explosivo sin dudarlo. ¡Lo preguntaré directamente! ¿Qué eres? ¿Eres humano o un titán?

— ¡No entiendo la pregunta!

— ¡Repite eso, monstruo, y te haremos pedazos! ¡No tendrás ni tiempo de mostrar tu verdadera forma!

Al parecer Eren no recordaba nada de lo que había pasado. El no estaba consciente de que había salido del cuerpo de un titán. O más bien que el era un titán, todo en el se había quedado en el momento que salieron de la base. Eso a Selene no le agradaba para nada. Más aún que el tipo desaliñado que les estaba hablando estaba dispuesto a matarlo sin dialogar con el. Y si no pensaban algo rápido no serían más que unos cuerpos sin vida.

— ¡Disparare el proyectil sin pensarlo dos veces!

— Mi especialidad es cortar carne.— dijo Mikasa dando unos pasos hacia adelante.— Y la chica al lado mío, les puede sacar la cabeza en un instante. Si fuera necesario, se los mostraremos cuando deseen. Si alguien quiere exterminarlo, que sea el primero en acercarse.

Selene no pudo evitar sonreír de lado, podía jurar que la chica de pelo negro logró que varios se hicieran pis en los pantalones. Aún así con toda la diversión acomodó una de las cuchillas en dirección del desaliñado capitán, en menos de unos segundos si lanzaba la cuchilla esta se clavaría en su cuello. Su especialidad sin duda era la puntería.

— Mikasa, Selene, Armin, ¿Qué está pasando?— preguntó Eren. Selene lo miro de reojo y le asintió para que se calmara. En donde se alterará un poco le volarían la cabeza.

The end of the world | Jean KirschteinWhere stories live. Discover now