~Platillos que enamoran~Sanji y tu~

Platillo 22

Sanji

Sus mensajes me habían tomado por sorpresa, aunque en realidad todo el día había sido una locura. "Lamento mucho tomarme tantas libertades", pero a decir verdad, incluso aunque las lamentaba no podía negar que me encantaba tomar esos pequeños riesgos. Empezando el día con un desayuno complicado...

Decir lo que había en mi mente... "P-pero... Tu... Ya te ganaste mi confianza, Sanji...", su mirada parecía desconcertada en ese momento. La conversación fue una montaña rusa de emociones, no podía predecir lo que vendría luego... "Ya... ya no tengo mucho que perder", era la primera vez que la veía llorar. Siempre parecía ser tan fuerte, y realmente era admirable, pero verla llorar en ese momento hizo que sintiera como si el piso fuera a desaparecer. 

Era un sentimiento extraño, me gustaban sus lagrimas, su esfuerzo en taparlas, como caían suavemente por sus mejillas y como las secaba bruscamente con la manga de su camisa. Pero tampoco me agradaban, eran tristes, llenas de un extraño dolor que no podía entender, mil emociones sin filtrar que no podía controlar, incluso aunque muriera por saberlo. Eso generaban sus lagrimas, esa extraña sensación en mi pecho que no podía quitar.

"E-eres un tonto, Sanji", rio mientras secaba las ultimas lagrimas que sus ojos almacenaban, no sabia que eso era posible... Un momento atrás parecía asustada, triste, o con cual fuera el sentimiento que almacenaban sus lagrimas... Pero luego de todo volvió a sonreír, con esa radiante sonrisa mientras soltaba una suave risa ante mi comentario. 

Me preguntaba el por que... ¿Cuál era su relación con ese tal "Erick"? ¿Por qué no lo quería denunciar? Claramente la había maltratado, le hizo daño... Pero su mirada parecía perdida, como si no supiera que hacer. "Es que...realmente... Erick es un asco de persona y créeme que lo denunciaría... ¿Pero no parece muy problemático solo por esto?". "Usted tiene la última palabra, Ma'am. Puede elegir la opción que quiera.", eso fue lo que respondí porque no era mi vida, no sabia que sucedía y parecía que no iba a saberlo, pero lo que realmente quería decir no se asemejaba a las palabras que salieron por mi boca.

Y para mi mala suerte la conversación quedó allí, sin que ninguno de los dos volviera a mencionar el tema. El tiempo comenzó a pasar entre conversaciones de todo tipo, desde lo mas vergonzoso que podías imaginar hasta lo mas extraño que su mente pensara. Ella era tan fascinante, brusca y descarada, sensible y dulce, complicada y simple. Era ser enredado una y otra vez por sus lazos de papel y cinta. Te atraía y te dejaba, te llamaba y te hacia dudar, se podía apoderar fácilmente de tus pensamientos y no dejarte descansar en paz, pero a fin de cuantas cada uno de sus complicados lazos te dejaban desorientado haciendo que caigas otra vez con facilidad.

Y sus mensajes... Realmente mentiría si dijera que no había estado esperando a que llegaran. Realmente me encantaba que me siguiera el juego luego de que le dijera ma'am, el sir detrás de sus palabras hacia que una pequeña alegría subiera a mi pecho. Pero realmente no entendía que era lo que ella planeaba. "Es que si veo a Erick mañana... Quiero decirle algunas cosas, y no me gustaría estar sola luego de eso.", eso realmente no sonaba a un encuentro de casualidad... No entendía que pasaba por su mente. ¿Qué todavía no le bastaba con todo lo que había sucedido? La cortadura, el abuso físico en el estacionamiento, y lo que sea que ella hubiera estado soportando antes de eso.

Me tire sobre el sillón cansadamente mientras pensaba y prendía un cigarrillo sin ganas de abrir la ventana antes. Era una locura... "¿Podrías recogerme del trabajo el lunes?", pero pronto lo entendería... Podría entender cada una de las cosas que sucedían, pero dudaba... No me gustaba la alarma de peligro que gritaba mi consciencia al pensar en esto, y no era realmente por mi... "y no me gustaría estar sola luego de eso.", luego de eso... ¿Ella no pensaba hacer nada mientras estuviera presente? ¿Qué planeaba hacer en primer lugar?

"Quería creer que podía hacerlo por mi cuenta...", "Yo... Pronto lo solucionare". Era lo mas probable... Ella lo único que desea era saber que podía tener las cosas bajo su control, era algo poco notable en ella, pero incluso con su extraña actitud tenia un lado muy minucioso que pocos entenderían. Querer tener todo bajo control, por mi cuenta, yo también era así... Supongo que fue Luffy y los chicos quienes me mostraron que no siempre se puede controlar todo... Pero tal vez T/N todavía no terminaba de entenderlo, y era comprensible

Suspiré mientras tomaba el celular y revisaba los mensajes. El viejo decrepito me pedia explicaciones que realmente no quería dar, pero que seguramente mañana tendría que hablar. El grupo con los chicos estaba tan abarrotado de mensajes como siempre y no tenia mas que algunos mensajes de Luffy y unos de Nami... Abrí su chat sin pensarlo mucho, era Nami a fin de cuentas...

Chat con Nami <3

-Hey, Sanji

-Perdón por la hora

-El próximo fin de semana vamos a salir todos a comer.

-Les quería presentar a mi amiga.

-¿Estas libre el sábado por la noche?

Buenas noches, Nami.-

Realmente no lo se...-

Estoy...teniendo unos problemas últimamente.-

-Oh...

-Que mal...

-¿Estas bien?

-Sucedió algo malo?

Realmente es demasiado para explicar...-

Pero si ya todos coordinaron me la puedes presentar otro día.-

A fin de cuentas dudo que Luffy deje pasar la oportunidad de obligarnos a juntarnos mas seguido.-

-Tienes razón.

-Espero que puedas solucionar las cosas.

-Me avisas si cambias de opinión.

Esta bien-

Nos vemos en otro momento, ma'am.-

-Adios, Sanji

Realmente... Todo lo que estaba pasando probablemente se solucionaría para ese día, pero tenia la vaga impresión de que no iba a poder asistir. Tal vez era por cansancio, pereza, o porque las preguntas que atormentaban mi cabeza comenzaban a agobiarme. Me sentía cansado, abrumado, extraño, como si de la nada todo comenzara a verse mas brilloso, pero que aun así mantenía sus toques opacos. "No todo es color de rosas, Sanji. Los sabores fuertes siempre seguirán estando incluso aunque parezcan desaparecer en la mescla", supongo que últimamente le estaba encontrando el sentido a algunas cosas que las personas me decían en el pasado...

Intentaba entenderme, entender todas estas cosas que a menudo se descontrolaban en mi pecho, como en una guerra, pero no conseguía captar que era. Si se tratara de Nami o Robin seguramente exclamaría que era por amor... Pero T/N... Éramos vecinos, solo eso. Amigos que eran vecinos. Era algo que mi mente repetía desde el momento en que la vi salir por su puerta aquella mañana, desde que sus llamativos ojos cruzaron con los míos por primera vez, pero aun así no podía evitar que mi mente se hiciera inútiles ideas.

-Me estoy tomando demasiadas libertades con usted, milady...- Hablé en voz alta incluso aunque sabia que esas palabras no llegarían a sus oídos y apague mi cigarrillo en el cenicero antes de dirigirme a abrir la ventana y a lavar mis dientes antes de dormir. 

Un domingo... Solo deseaba que pasara volando para llegar al lunes e intentar saciar mis dudas, porque de otra forma estaba completamente seguro de que no podría...