Platillo 6

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Sanji

Un sábado, una mañana, un desayuno, una situación extraña. ¿Cómo eso podía generar una tormenta incontrolable de pensamientos?

"¿Que pasa, Sanji?", su voz resonaba en mi cabeza mientras recordaba. Su cabello despeinado, su ropa arrugada y una mirada cansada, me sentí mal por haberla despertado. "A menos que quieras comer en el piso del corredor", fue la primera vez en mucho tiempo que alguien bromeaba conmigo.

"Ahora tendrás que aguantar el declive que dejan mis cafés", la primera vez en mi vida que conocí a alguien que preparaba un café que inundaba la boca de un sabor agrio y amargo, pero que luego parecía ser tan dulce. "Jajajaja, te dije que era malo", hacia tiempo no me cruzaba con alguien que riera de esa forma ante sus defectos.

"¡Sabe genial!", Una sensación de cálida felicidad había invadido inconscientemente mi pecho, desde hace bastante tiempo no encontraba esas reacciones de la gente que probaba mi comida. "Tendrás que sobornarme", Nunca había encontrado a alguien que me hablará tan descaradamente como Zoro. "Te haré llorar rogando que lo diga", Cambiaba de humor rápidamente, se adaptaba o me obligaba a adaptarme a la conversación y los giros que daba.

"¿Y si apostamos, Sanji?", fue después de mucho tiempo, que esta mañana me había divertido. Sus palabras y acciones siempre dejaban un espacio en blanco que rellenaría con un ingrediente inesperado. Ella... simplemente sorprendía. "¡Oh, esa es la mejor parte!", ella también parecía divertirse. "No te la dejare fácil", parecía hablar absurdamente seria sobre esa apuesta, pero yo ganaría. "De compensación te envenenare con otro café", ella era...

"Es un poco cansador ser normal siempre. ¿No crees?", "Claro, si que lo es...", "Esta... No parece para nada una conversación entre vecinos.", "Jajaja. Si, no lo parece para nada"... Recordé vagamente la conversación.

Hacia tiempo no hablaba tan amigablemente con alguien, incluso... ¿Cuándo fue la ultima vez que hable con una mujer de esa forma? Simplemente sentía...que no debía comportarme como siempre hacia. ¿Pero por qué?

"¡Claro que debería ser imposible, Coby! ¡Ese es un proyecto muy importante, por eso lo hice formato HouseClose!", no comprendía bien de que hablaba, lo único que pude hacer era mirar confundido la situación mientras ella parecía realmente alterada, hasta que la llamada finalizó.

"Necesito una galleta, también un café envenenado.", "¿Problemas?", "No, estoy bien. Estoy perfectamente bien". No sabía cómo interpretar sus palabras, tal vez tomarlas como válidas, o tal vez no. Parecía que estaba enojada, frustrada, en el fondo de su mirada mostraba una impotencia dolorosa, la cual se ocultaba tras el brillo de sus ojos y una sonrisa. ¿Por que hacia eso? La rodeaba un aire de seguridad y fuerza que nadie se atrevería a atravesar, sin embargo luego de las gruesas capas de hierro se encontraba el frágil hielo a punto de derretirse.

Tal vez, quería ayudarla. ¿Pero cómo? ¿Qué podría hacer su simple vecino de enfrente? Solo éramos eso, simples vecinos. Sería realmente extraño mostrar tanto interés, incluso podía incomodarla. Porque a fin de cuentas...nos habíamos conocido ayer. Nuestra relación no era de amistad, apenas llegaba a conocidos. Ahora era yo el que no entendía, el que se sentía confundido, como cuando confundes la azúcar con la sal, incluso luego de haber confirmado que lo que ponías en la mescla era lo correcto.

Me sentí perdido, de un segundo a otro y como si fuera poco, no podía encontrarle un sentido a estos pensamientos. ¿Por que me importaba? Parecía una damisela en peligro, la cual no quería ser salvada. ¿Eso era lo que me atraía? O tal vez... Parecía una persona autentica, tanto como las nubes que cambian de formas mientras se mueven por el cielo, pero... ¿Era eso, o... Solo me llamaba la atención lo parecidas que eran?

Esta reunión...terminaba aquí. "No te preocupes... Solo...será otro día largo. Adiós, Sanji.", su voz...era dulce, incluso aunque parecía agotada ella...simplemente sonrió. Su voz resonó a lo largo del pasillo antes de dejar todo en silencio mientras la puerta del ascensor se cerraba por completo. Pase mi mano por mi cabello desordenándolo a su paso mientras suspiraba cansadamente, las preguntas simplemente rondaban por mi cabeza, había algo...algo que no encajaba o que no lograba hacer encajar en la situación.

Entre a mi departamento y mire la hora, eran las 10:27. Hoy entraba al trabajo a las 11:00. ¿Cómo el tiempo pasó tan rápido? Desearía llegar tarde, tal cual todos los sábados con la excusa de quedarme dormido, sin embargo hoy no tenia nada mejor que hacer. Pasar el día cocinando, aunque a veces parecía frustrante, en días como este, donde la incertidumbre o la confusión inundaban la mente, todo se olvidaba con un poco de certeza. La cocina era el mejor lugar para olvidar confusiones, nunca había nada incierto, todo parecía seguro y certero.

Tome mis cosas y salí por la puerta intentando olvidar todo, o por lo menos una pequeña parte de lo sucedido. No era como si me molestara, o me incomodara, simplemente sentía que...esto no era solo confusión, aunque realmente no sabia como llamarle. ¿Qué era...? No entendía, simplemente no entendía, incluso aunque buscara en mis pensamientos, nada tenia sentido. Todo parecía lejano y cercano al mismo tiempo, antiguo y viejo, como una película cliché las que vez mas de diez veces pero la quieres seguir viendo.

Simplemente me preguntaba mientras el ascensor bajaba y prendía el primer cigarro del día.

Esta película... Tan extraña y confusa... Cliché y molesta... Tan nueva y fascinante... Quería escapar y mantenerme quieto... Deseaba avanzar y retroceder en cada momento... No encontraba punto fijo...

Esta película... Sin comienzo... ¿Cuándo fue? ¿Cuándo será? Que esta película tan sin sentido y sin pulso que marque los cambios y los giros, las confusiones y las desgracias. Simplemente esta película... Me lo seguía preguntando mientras las puertas se abrían y el frio viento de una mañana de otoño golpeaba a mi cuerpo. Lo seguía preguntando. Una simple pregunta, de la cual no sabría si la respuesta me alegraría o entristecería sin importar la respuesta que tendría.

¿Esta película...cuando terminaría?

~Platillos que enamoran~Sanji y tu~Unde poveștirile trăiesc. Descoperă acum