XXVIII. Lo correcto puede ser erróneo

21.3K 2K 53
                                    

Sentí una gran necesidad de salir, cuando miré entre los árboles y noté el gran pelaje dorado de un lobo. Supe que la atracción era algo que no podía evitar. Salí con mucho cuidado de que alguien me viera, después simplemente corrí al bosque con la mente en blanco y un abrigo largo, cuando ya me encontraba a unos metros del principio del bosque me detuve.

¿Qué estoy haciendo? Ya no era la joven que buscaba su propia historia con una pareja destinada. ¿Por qué tenía esos impulsos de querer seguir, sabiendo que llegar solamente quererlo es un riesgo para un corazón que desconoce del sufrimiento al romperse? Hasta eso momento solo se había lastimado, y había llorado tanto por unos rasguños. Pude notar que todo este tiempo luchaba conmigo misma.

Lo que pensaba era muy diferente a lo que él quería.

Retrocedí dos pasos antes de volver a verlo, apenas me miraba. Caminó lentamente en mi dirección, cuando estuvo cerca tocó mi mejilla con mucho cuidado, estaba muy frío, tanto que dudaba de sus condiciones. 

Su frente cayó en mi hombro derecho, realmente estaba congelado.

—Kaseem —susurré.

Era la primera vez que lo llamaba por solo su nombre, tal vez esa era la razón por la que de pronto se había puesto tan rígido.

Descendimos poco a poco para sentarnos en la húmeda hierba cerca de un árbol, extendí un poco de mi abrigo para cubrirlo. Por unos minutos solo el silencio nos acompañó.

—Hacer lo correcto no siempre es lo mejor —murmuró con una voz muy suave. Parecía dormido, pero su respiración era tan inestable que la preocupación vencía mi necesidad de alejarme.

—La forma en que vemos las cosas es tan distinta que lo correcto puede ser erróneo al mismo tiempo.

Inhaló pausadamente mis manos, me miró directamente analizándome. Luego se paró y me extendió una mano para hacerlo también. Noté una leve felicidad en su expresión.

—Ahora tendrá que ser usted quien me disculpe por mantener este especioso vínculo.

—Soy yo quien se niega a romperlo y dejarlo ir su majestad ¿Por qué querría conservar...?

Callé abruptamente, asumir lo que intentaba decir era más grave si me equivocaba, pero...

Lo solté bruscamente y me di la vuelta para irme antes de hacer o decir algo que no quería. No trataba de huir, solo necesitaba pensar.

Mas sus brazos detuvieron mi marcha liberando lo que sentía.

—Se va a casar —grité ofendida, — ¿acaso no está satisfecho de anunciar su compromiso? —estaba furiosa. Cambiar tan drásticamente lo dejó pasmado por un momento, aún se encontraba adormecido, atribuí a su estado la falta de respuesta de los siguientes minutos.

—Creí que podría —dijo por lo bajo —Pero es más fuerte que yo, más importante que hacer lo correcto.

Solté sus brazos de mi cuerpo, al darme vuelta solo pude ver como se desplomaba nuevamente en el piso.

—Él tampoco la dejará ir, parece que es más obstinado que yo, traerme hasta aquí de esta manera podría ser imperdonable.

¿Kaseem deliraba?

— ¿Él? ¿Acaso alguien más se encuentra aquí? —Levanté la mirada hacia las sombras, era demasiado oscuro, de igual manera no podía percibir otro olor diferente al delicioso perfume de Kaseem.

—No... Solo es el animal que habita en mí.

—Creo que no se encuentra bien, debería llevarlo a palacio para que pueda ser tratado de la manera correcta.

Intenté levantarlo sin éxito cuando él me detuvo:

—No. Solo deme un momento para recuperarme, es la pesadez de la bebida al parecer. Supongo que un calmante de plantas extrañas para un dolor de cabeza no fue la respuesta correcta.

Me senté a unos metros de él, aún quería alejarme.

"Mantener el vínculo"

Estaba segura de que no aceptaría, no esta noche, ni mañana. Podía cambiar de opinión, aunque dudaba de lo que fuera a pasar después. Le había pedido tiempo a mi madre y ahora mantener mi propuesta era un riesgo, una nueva guerra podía lograr nuestro fin. Probablemente terminaríamos como los pocos que decidían marcharse y empezar su propia manada, pero sin alguien de la familia real serían débiles. Nuestro futuro era angustiante en este punto.

De pronto mientras divagaba entre mis pensamiento se puso de pie ágilmente, acomodó mi abrigo para que me cubriera de mejor manera y caminó unos pasos a la profundidad del bosque.

—Fue un gusto volver a verla Lady Alizze. —Fue lo último que dijo antes de convertirse y marcharse.

Respiré su aroma y volví a mi dormitorio con cuidado. No lo entendía, me sentí tan impulsada a salir a su encuentro que de alguna forma no me reconocía.

 No lo entendía, me sentí tan impulsada a salir a su encuentro que de alguna forma no me reconocía

Ups! Tento obrázek porušuje naše pokyny k obsahu. Před publikováním ho, prosím, buď odstraň, nebo nahraď jiným.

Hey. Solo ha pasado una semana y siento que ya va un mes jajaja.

Capítulo random, no sé cómo escribí esto xd, estoy segura de que no estaba planeado.

Gracias por estar aquí un año después de que empezara con esta historia :) y también por saludarme en mi cumpleaños.

Las quiero y espero que se cuiden.

Bye.

Corona de lobosKde žijí příběhy. Začni objevovat