La Guardiana de la Duquesa

Cap. 1 La llegada a la Aldea

9 𝒹ℯ 𝒜ℊℴ𝓈𝓉ℴ 𝒹ℯ𝓁 𝒶𝓃̃ℴ ?

Eran las 22:00 PM, hacía un frío de los 1000 infiernos y solo escuchaba el sonido de las ruedas del carruaje seguir su camino, la lluvia golpear la suave lona que cubría el mismo y el relinchar de los caballos.
Pensé que iba hacia mi muerte, tenía frío, hambre de hace dos semanas y eso acompañado de un dolor desgarrante en mi pecho al respirar e incluso para hablar lo sentía; no sabía a dónde me dirigía en estos momentos, solo esperaba que fuera hacia mi fin ya que lo había perdido todo en esta dimensión que hacen llamarla Vida.

Los caballos se detuvieron, la lluvia comenzaba a caer con más intensidad y solo escuchaba la voz de chófer hablar con alguien que le decía: "No puedo aceptarla, ella es una mutación, no quiero poner en riesgo mi vida y mi trabajo!".
Al concluir aquellas palabras, el carruaje comenzó a moverse de nuevo, no sabía lo que quería decir aquellas palabras que dijo el señor....yo.....una mutación?, Cuánto habrá bebido ese señor para decir ello, yo no soy una mutación, soy una simple chica humana.

Seguía tratando de entender lo que quiso decir el señor hasta que el carruaje se detuvo de nuevo y escuchaba pasos caminar a la puerta para abrir el carruaje, no podía moverme, sentí miedo ya que todo estaba callado y solo se escuchaba el sonido de la lluvia y aquellos pasos que, una vez que estuvieron frente a la puerta, esta misma se abrió de golpe dejando ver un silueta negra de un...hombre, No podía ver bien, mi vista se estaba nublado y estaba a punto de caer en un sueño profundo que esperaba que fuera eterno.
Sentí como me cargaron y solo alcance a escuchar aquellas palabras de un señor: "Yo la cuidare, la haré una chica fuerte y la prepararé para que cuando llegue el momento, pueda entregarla."

Termine por desmayarme sin saber que me iba a ocurrir. Al la mañana del día siguiente desperté en un sofá con un abrigo cubriéndome y una lámpara de aceite a lado para calentarme un poco más, no sabía en dónde estaba, tenía miedo y hambre hasta que escuche la voz de aquel señor de anoche llamarme "niña", voltee hacia donde estaba y venia con una bandeja con comida y agua, se sentó en la silla que estaba enfrente del sofá y me observo detenidamente de pies a cabeza, dejo la bandeja en el otro extremo de sofá y se acercó a mi.

?: Abre la boca

-No

?: Niña por favor, abre la boca, no te haré nada, solo quiero ver algo.

-Le estoy diciendo que no, no sé quién es usted, no se que es lo que quiere de mi. Aléjese de mi! *Me encogía al tenerlo cerca además de que podía verle ni siquiera los ojos por las gafas que llevaba puestas*

?:  *Suspiró* Mira, no tengo nada para hacerte daño, solo te estoy pidiendo que abras tu boca, necesito ver si no tienes alguna herida o algo por el estilo. Abre la boca...

Después de ver qué hablaba enserio decidí hacer lo que me pedía y abrí mi boca para que pudiera verla, sintiendo como metía uno de sus dedos en ella y lo pasaba por todos mis dientes.
Una vez que sentí eso lo mordí y de inmediato saco su dedo.

-Pero que mierda cree que hace! Quien se cree para poder tocarme y meterme sus dedos en mi boca, eh!!

Estaba molesta y a la vez sentía miedo, no sabía porque había hecho eso. Tenía miedo de que me sacará mis dientes o me abriera mi cabeza a la mitad.

?: Agh! *Saco su dedo rápidamente comenzandole a sangrar por la mordida*  Veo que tenía razón, que bueno que pude detener el carruaje antes de que te llevaran al fuerte que está a las afueras de la aldea.

No entendía lo que decía, no sabía que me estaban llevando a un fuerte, la verdad no sabía nada de lo que me había pasado, solo recordaba que un día salí al campo a montar a caballo y unas personas que vestían ropa como de "guerra" me rodearon, dispararon a mi caballo y al caer de él me golpee en la cabeza y quedé inconsciente, solo tengo recuerdos borrosos de un lugar que parecía un laboratorio...?, No se, no tengo memoria firme de ello.
Lo mire y se empezó a reír, se levanta y camino hacia la ventana mientras fumaba un cigarro.

-Porque se ríe?

?: *Prendió su cigarro y volteo a verme*  Tu piensas que eres un chica normal, verdad?

-Claro que si, porque lo soy! Porque debería de dudar sobre ello?

?: Una chica normal crees que sea capaz de hacer esto?

Me mostró el dedo que le había mordido y prácticamente le había arrancado una parte de él. Quedé en shock al ver su dedo, yo no pude haber hecho eso, no soy ni siquiera capaz de poder hacer ello.
El se acercó a mí y me dió un pedazo de espejo roto.

?: Abre tu boca y obseva....ahí te darás cuenta que no eres una chica normal.

Tomé el pedazo de espejo y lo acerque a mi rostro un poco, abrí mi boca la cual me temblaba un poco y al ver unos enormes colmillos llenos de sangre, solté el espejo y termino de desmoronarse en el suelo.
Voltee a verlo con miedo y él solo me lanzó una nube de humo a mi cara.

?: Eres un lobo, una mutación que aquí en este lugar es más que normal pero no tan normal ya que en mujeres es raro que se den este tipo de cosas.

-Yo no puedo ser esto, esto es una broma o algo, alguien me pudo haber puesto estos dientes, a lo mejor les dieron filo a mis dientes y quedaron así.

?: No es así...acéptalo, eres una mujer lobo, aún está en desarrollo ello ya que ayer fue luna llena y no cambiaste de forma. Así que quiero cuidar de ti para observar como va la evolución contigo, ya que...eres muy similar a mi.

Logró armar una esfera con trozos de metal, sin haberlos tocado, como si fuera magia, no sé cómo lo hizo pero se que eso es algo inhumano.

?: Lo ves? No quiero hacerte daño, tu y yo somos iguales, no somos normales, tenemos poderes únicos e inhumanos que dominándolo bien, serás imparable y un gran peligro para la humanidad.
Déjame cuidar de ti, te ayudaré con tu mutación, a como controlarla, a como dominar tu fuerza y otras habilidades que puedas desarrollar.

Aceptas querida?

Me extendió su mano como prueba de confianza, yo no sentía prueba de confianza con él, pero si sabe que es lo que tengo y que fue lo que me pasó, ser más fácil para mí poder encontrar una cura y volver a ser normal.
Estire mi mano y la estreche con la de él sin antes quedarme con una duda.

-Si viviré con un señor que usa unas gafas oscuras dentro de un lugar algo oscuro, un abrigo y un sombrero, por lo menos debería de saber como se llama...

Sonrío y se quitó sus gafas mirándome.

H: Me llamo Karl.....Karl Heisenberg....pero solo llámame Heisenberg.

Continuara...