Compañeros/ Yoonmin

Quedate conmigo Parte 2// Yoongi

Cada beso que Jimin depositaba sobre su piel sonrojada, era una invitación a excitarse y a volverse loco. Pensaba que ya no volvería a caer por un Jimin que llegará a sus brazos necesitado de su cuerpo, pero en vez de ello, cayó por uno que llegaba imponente como nunca lo había visto antes, exigiendo de él lo que le pertenecía.

—Cariño —logró pronunciar, entre los gemidos entrecortados que ambos callaban uniendo sus bocas en besos desesperados y llenos de lujuria —. Ve despacio.

Su lobo interno estaba casi tan enloquecido como él y pedía por más sumisamente, a pesar de ser un alfa más fuerte de los que puedan haber en su especie. Este se rendía y se dejaba manipular, pero también le gustaba jugar a su manera con ese chico que con sus manos trazaba su cintura por sobre la ropa y con sus labios hacía maravillas en su cuello, liberando así un poco de su perfume natural, para que este perdiera su cordura lentamente.

—No.

Yoongi entonces disfruto de sentirse deseado por ese hermoso León entre sus piernas,  realmente amaba sentir la desesperación que ese enorme alfa tenía por poseerlo y la misma desesperación por su lobo interno de tenerlo dentro por segunda vez, desde que sus encuentros sexuales habían comenzado.

—Al menos no rompas mi panta... —Yoongi no terminó su oración, al sentir como una corriente de aire frío golpeaba en su trasero y confirmó que Jimin lo había vuelto a hacer, con sus fuertes garras de León había rasgado sus pantalones de la parte necesaria para tener placer —. Mmm. Estos eran mis favoritos.

Iba a seguir quejándose, cuando sintió que Jimin le depositaba suavemente en la cama  y le dejaba boca abajo aún posicionando sus manos en su trasero y amasandolo de tal forma que aunque él no lubricaba como un Omega, podía sentir como se humedecia al tacto de su querido alfa.

—¿Quieres un beso?  —le preguntó de la nada Jimin y él se sintió extraño, pero asintió de igual forma preparándose mentalmente para recibir un beso demoledor que en su imaginación, dejaría hinchados sus delgados labios, pero eso nunca paso. En lugar de recibir su ansiado beso en los labios, sintió un extraño cosquilleo en su trasero que le dejó viendo ángeles sobre su cabeza —. Apuesto a que esto te encanta.

La voz ronca de Jimin viajaba rápido por su sistema nervioso en forma de descargas eléctricas que le hacían sentir en el cielo. Como alfa que era, eso debería enfadarle y masacrar a golpes al otro que le estaba dando un puto beso negro, que ni siquiera los dioses podían otorgar sensación más gratificante y caliente que esa; la de sentir la caliente y húmeda lengua jugar con su entrada.

—Me encanta —gimió a ronca voz, viendo como el cabello de su lindo alfa se esponjaba de los nervios, tal y como él le hacía sentir, nervioso... muy nervioso, con sus increíbles atenciones —. Quie-quiero más —exigió excitado y lleno de un deseo que quería explotar como una bomba de tiempo, dentro de sus entrañas y llenarlo todo de los jugos de su más grande placer.

Jimin entonces cumplió con su demanda, separando ambas nalgas de color blanquecino entre sus pequeñas y calientes manos, por sobre su pantalón rasgado, que le raspaba la piel y le hacía sentir al borde de todas las sensaciones placenteras que le recorrían. Jimin escupió entonces en su entrada y él  sintió como aquel poco de saliva se abría paso hacia su interior para luego sentir la lengua de este entrar y jugar con sus entrañas nuevamente, moviéndose de forma exacta y lubricando todo a su paso, mientras un curioso dedo índice jugaba alrededor del anillo y la lengua dentro suyo.

—S-si —siseo extasiado, cuando el primer dedo entró en él y comenzó a moverse de forma lenta de adentro hacia afuera, siguiendo en el proceso tres dedos más —. Te amo —gimió no pudiendo más con todos los sentimientos que siempre tenía que contener en su interior para luego arrepentirse por no decir los en voz alta —, adoro esto, cariño.

Lo sabía, era un alfa fuerte que si lo deseaba podía tomarlo sin problema alguno y sentir apenas un poco de ardor, pero Jimin estaba inusualmente grande más que la primera vez y entonces lo supo: Jimin le había inducido a un celo prematuro y él aroma de ambos reinaba en su habitación, mientras era atravesado por el enorme falo caliente de su lindo alfita.

Jimin entraba con delicadeza en las primeras embestidas y lo hacía sentir importante y deseado, la lentitud con la que lo tomaba y gemia a ronca voz en su oído, con tanto deseo como el que él mismo tenía en su cuerpo.

—Desnudame —dijo parando con las embestidas lentamente hasta detenerse y causar un millón de estragos en su cuerpo —.  También quiero sentirte.

Jimin salió de él  con una lentitud que le volvió más loco y animal de lo que se sentía por aquella petición que se encargaría de cumplir a la perfección, pues para su alfa todo de él siempre sería bueno y sincero, alejándose de él,  se desvistio rápidamente y comenzó a desnudar y a dejar sin prenda alguna el cuerpo de su cálido chico al descubierto, disfrutando de cada milímetro de piel tersa y acaramelada que estaba a su disposición, besando y tocando todo cuanto pudiera y finalmente insertando su necesitada erección en la entrada de su amado, quien sólo sintió un pequeño escozor que pronto fue calmado, con todo el placer que su otra mitad le brindará.

—Ah —fue el largo gemido que emitió la garganta de Yoongi al saberse dentro y caliente dentro de aquel maravilloso culo que clamaba sólo por él y por nadie más, tomando la imponente erección que anteriormente había estado dentro suyo y masajeando tal y como a él le gustaba tocar al suyo, cuando pensaba en Jimin y sus hermosos labios recorriendole la piel con suaves besos  hasta llegar a su miembro y tomarlo con su boca y sólo pensar en esa imagen y tenerlo ahora desnudo bajo suyo y gimiendo por más, lo hacía sentir en el borde de un acantilado que con toda la adrenalina en su cuerpo, saltaría.

Sus arremetidas eran certeras y todas iban a parar a un sólo lugar, el punto P de Jimin, quien como siempre, comenzó  a gritar por lo bien que se sentía cuando el pene bien desarrollado y super dotado de Yoongi tocaba aquella parte suya que incendiaba todos sus nervios.

—¡Más! —exigió, pues el ritmo de Yoongi era lento en ese momento —. ¡Por favor! —suplicó —. Quiero correrme, alfa.

Jimin gritaba desesperado por obtener más de aquellas intensas sensaciones que tan perdido lo tenían, y Yoongi también lo deseaba y no era nadie para negarse a ese capricho que el también quería hacer realidad, así que aumentando su ritmo de embestidas, sintió como si nudo comenzaba a hincharse lentamente tanto que comenzo a arremeter con una fuerza sobrehumana hasta sentir el alivio de su liberación.

—¡Dios! —el grito de Jimin le avisó que el nudo estaba completamente dentro, liberando la esencia de la vida en donde no había vida alguna, algo que por un momento hizo que Yoongi se sintiera triste y pensará que tal vez deseaba que su alfa fuera un Omega en verdad —, eres tan intenso.

—Tu eres tan lindo —le susurro en el oído y dejó un tierno beso en la acaramelada mejilla de su amado, sintiendo como el tiempo corría y desinchaba su nudo, haciendo que pudiera salir de su alfita con facilidad y le abrazara por detrás en una posición de cucharita —.  Quédate conmigo —suplicó,  por si a Jimin se le había olvidado lo prometido, a lo que este se dio la vuelta y le observó directo a los ojos, con los suyos con un color opaco en ellos.

—Lo haré —sonrió y Yoongi se sintió tan aliviado que le abrazo fuertemente aún sintiendo el miedo de que este se fuera de su lado.

Ambos tuvieron una ronda más de sexo duro como sus animales internos lo deseaban, para luego caer profundamente dormidos en la calidez de los brazos de su destino, aunque aún no lo tuvieran claro.

NOTA.

Aquí la que dijo que iba a actualizar ayer 😂😂 lo siento me costó escribir este capítulo y quedó horrible y carente de sentimientos 😔

Si de repente dijera algún día: ¡Compañeros en físico! ¿La comprarían?

Claro que primero tendría que arreglar un montón de cosas XD eso sería en un futuro, porque tengo ese sueño.

L@s leo 😁😉